Ciudadania

La Ciudadanía

Introducción

El presente ensayo pretende analizar y dar a conocer todos los aspectos que relacionan a un individuo con la sociedad, que significa ser un ciudadano y su previa invención, mediante la definición y comprensión de su concepto, recapitulación breve de su historia, desde el primer concepto de ciudadanía y como ha sufrido cambios, el cómo se lo vivía en épocas pasadas y como se lo vive actualmente en la sociedad moderna.

Para una mejor comprensión del tema es fundamental remontarse a los tiempos de la antigua Grecia ya que sus orígenes se llevaron a cabo en este lugar. Los griegos implementaron sistemas políticos basados en la concepción de ciudadanía, al igual que la filosofía y democracia fueron formas de dominación en las que toda idea de intervención política estaba excluida.

Desarrollo

El ser ciudadano conlleva que cada individuo posea un sentido de pertenencia hacia una comunidad política y que la misma lo reconozca como un miembro perteneciente. La ciudadanía es la agrupación de deberes y derechos los cuales establecen un vínculo de relación de los individuos con la sociedad, esta definición se relaciona a distintos términos políticos que, de no existir, la persona se vería imposibilitada de participar en los asuntos del estado, además de la intervención directa o indirecta del individuo en el gobierno; también implica derechos y deberes los cuales deben ser respetados y cumplidos por los ciudadanos.

Formar parte y ser reconocido como integrante de una comunidad cuenta con deberes y derechos tales como: el resguardo de los logros sociales más justos, la petición de nuevos derechos, exigir el cumplimiento de contratos sociales, son solo algunas de las acciones que cada ciudadano adopta en su diario vivir. Existen varias formas en las cuales una persona se puede convertir en ciudadano, la conciencia de ciudadanía tiene que ver con la politización de una persona para que pueda pertenecer al proceso de elaboración de una ciudadanía activa la cual no solo esta al margen, observando que el estado sea quien se encargue de hacer los derechos de cada uno si no que mas bien promueve la lucha para la obtención de los mismos, en el espacio publico hacer validos sus argumentos y promover la creación de un proyecto de participación y democracia entre ciudadanos mediante alianzas con la sociedad.

Para que un ser humano pueda pertenecer a una sociedad, ser reconocido políticamente o declararse ciudadano debe cumplir con los derechos y obligaciones que le otorga el estado, caso contrario las personas que no lo hagan pueden ser despojados de ellos, sobre todo a las personas mayores que han cumplido su mayoría de edad (mayores de 18 años) por más de algún tipo de incumplimiento de los deberes y derechos asignados a un individuo como ciudadano

La ciudadanía no debe ser calificada como una serie de acciones concretas tales como: la atribución de beneficios sociales, ser participantes en elecciones o tener libertad de expresión, si no que más bien la ciudadanía es parte del acontecer constante de cambio y construcción.

En las antiguas civilizaciones como Grecia y Roma los ciudadanos eran grupos privilegiados, un porcentaje reducido ya que las mujeres y esclavos no contaban con los requisitos necesarios para pertenecer a ese estatus social, desde entonces, el universo ha ido evolucionando la manera en la que cada nación gobierna y dirige a la población. En la actualidad cada Estado de gobierno conforma una organización jurídica bajo el concepto de poder de dominación ejercida en determinado territorio, los principales elementos de la organización estatal son la población, el territorio y el poder.

Los logros de los derechos ciudadanos han precedido una larga historia y ha significado, como lo manifiesta Marshall, una lucha infatigable de las colectividades. De esta forma, los derechos ciudadanos se distinguen en tres clases, que surgieron a lo largo del tiempo y en distintas condiciones, son en primer lugar los derechos civiles, los derechos políticos y finalmente los derechos sociales. (Licta, 2001)

Por lo tanto, ya está establecido en la sociedad normas y leyes que permitan un desarrollo social en base a la democracia y los derechos que le corresponde a cada persona de forma inalienable, permitiendo una ideología de ciudadanía más justa y responsable, sin embargo, no siempre se respeta el hecho de que cada persona nace con una infinidad de derechos establecidos por la ley, discriminando a una persona por raza, género, política, credo, o lenguaje.

La ciudadanía representa una conquista que se va consiguiendo a lo largo de la historia. En este sentido, la ciudadanía constituye un ideal de vida política. Un buen ciudadano es aquel que, además de sujeto de derechos, es sujeto que participa en la construcción de la ciudad. Este ideal de ciudadanía representa a una persona propietaria de un cada vez más amplio repertorio de derechos que la comunidad política debe garantizarle. (Hill, 2012)

Es por ello que la ciudadanía no debe de confundirse simplemente con el hecho de pertenecer a un pueblo o nación, ya que, día a día la desigualdad entre los grupos más desfavorables es notoria por diversos factores políticos y económicos, como es la inmigración en diferentes partes del mundo; ciudadanía es integrar y participar en cada proceso gubernamental con el fin de beneficiar al colectivo, porque solo el pueblo como tal tiene el poder dirigir el futuro de su nación a través del constitucionalismo y la igualdad de derechos.

La importancia de la Participación Ciudadana es necesaria para fortalecer la democracia. Por eso, resulta fundamental para favorecer el control de los gobernantes y transmitir mejor las preferencias de los ciudadanos en la toma de decisiones como ya se mencionó anteriormente la participación fomenta un tipo de ciudadanía que tiene un mayor interés por informarse acerca de los asuntos políticos, por cooperar con las demás personas, y que es más respetuosa con las que son diferentes, lo que refuerza los vínculos

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