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Comunicación no verbal (CNV): Entrevista de trabajo


Enviado por   •  25 de Octubre de 2017  •  Tareas  •  1.348 Palabras (6 Páginas)  •  289 Visitas

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Comunicación no verbal (CNV): Entrevista de trabajo

La comunicación, además de un elemento esencial en la relación entre las personas, es la principal herramienta para desempeñar la profesión docente. En todo intercambio comunicativo se necesita de un emisor y un receptor -interlocutores-, un mensaje, un canal, un código y un contexto para que se pueda hacer efectivo. A grandes rasgos, podemos diferenciar entre la comunicación oral y la escrita, y dentro de la oral, nos encontramos con la verbal y la no verbal. El lenguaje, en todas sus formas de expresión, es el sistema que utilizamos para comunicarnos. En este trabajo, nos centraremos en los elementos que conforman la comunicación no verbal planteando una entrevista de trabajo ficticia, y analizaremos los componentes que se pueden identificar según la clasificación propuesta por Caballo (1993). Antes de todo, hay que saber que la comunicación no verbal es toda aquella información que transmitimos con nuestro cuerpo, ya sea a través de la postura corporal, la expresión facial, el tono de voz, etc.

  • Entrevista de trabajo

Laura se presenta a su tercera entrevista para ocupar una vacante de profesora este mes. Está un poco nerviosa porque sabe que es un acontecimiento importante, pero tiene muchas ganas, ilusión y seguridad para optar al puesto. Para la ocasión, ha escogido un look casual, con unos vaqueros oscuros, una camisa azul marinero, unas bailarinas, un recogido de pelo a media altura y un maquillaje discreto con el que consigue disimular el cansancio acumulado de estar trabajando todo el fin de semana en el restaurante. La sala dónde se realiza la entrevista tiene las paredes blancas, y en el centro hay una mesa con dos sillas colocadas cara a cara, una para el entrevistador y otra para el entrevistado. Al llegar el director la recibe en la puerta, se dan un apretón de manos, y la invita a sentarse. Para romper el hielo, el entrevistador le pregunta si ha llegado bien y cómo le está hiendo el día, y Laura se lo explica mientras aprovecha para hacerle una radiografía superficial para saber cómo será la dinámica de la entrevista. Hasta el momento todo va bien, Laura consigue no parecer nerviosa e intenta mantener el contacto visual en todo momento con su interlocutor.

El director empieza preguntándole por su formación académica y sobre su estancia en el extranjero durante dos años. Con una sonrisa en la cara, le cuenta que en el grado se especializó en la enseñanza de la lengua inglesa porque así tendría más oportunidades laborales, pero que después hizo un máster de Educación para niños de Altas Capacidades debido a una situación personal concreta. Hablando de asuntos personales, Laura gesticula mucho, eleva su tono de voz y la velocidad con la que se expresa ya que se siente a gusto y cómoda con la conversación, y consigue una fluidez comunicativa con el mensaje que está dando.

El siguiente punto del que hablar será la experiencia laboral. Laura, debido a su corta edad -28 años- no tiene mucha experiencia en la educación formal. Ha sido durante 5 años monitora en actividades de ocio no formal, y ha hecho dos substituciones de 1 mes en dos escuelas diferentes, además de todas las horas de prácticas del grado y del máster. Ella es consciente de que no tiene mucha experiencia, pero está muy segura de que tiene la capacidad personal, la formación académica y las habilidades sociales que se necesitan para ser un buen docente. Parece que al entrevistador le está gustando Laura cómo aspirante para el puesto y pasa a contarle las condiciones de la oferta. Durante 10 minutos, le enseña el organigrama del centro, el proyecto educativo, los horarios, las condiciones salariales, etc. Poco a poco, Laura se va relajando y sin querer se ve con brazo apoyado en la mesa y la cabeza reposando en su puño, con la espalda curvada hacia adelante y sin poderse aguantar un par de bostezos. Inmediatamente el director se da cuenta que quizás está lanzando demasiada información y la hace volver a participar preguntándole por qué cree que ella tiene que ser quien ocupe el puesto y cuáles considera que son sus debilidades y fortalezas como persona. Laura vuelve a erguir su espalda y se lo cuenta con soltura, acercándose más a la mesa y quedando a 1 metro aproximadamente de su interlocutor, volviendo a mostrar confianza, seguridad y comodidad. Entre risas, Laura le da una palmada en el hombro al entrevistador y al instante se da cuenta que quizás ha abusado demasiado de la confianza.

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