Control Grupal

¿Qué es el control grupal?

R= El control grupal se refiere a las reglas, normas, valores que comparten los miembros de un grupo y mantienen mediante premios y castigos.

Joan Dean

¿Qué dice el autor acerca del control grupal?

El trabajo del maestro depende de su capacidad de manejar a los niños en grupos y como individuos. Muy pocos maestros escapan de los problemas en el aula, y casi todos los principiantes tienen que esforzarse por mantener el control.

Algunas personas parecen mantener el control muy fácilmente desde el principio, la mayoría desarrollan esta habilidad a través del tiempo.

Factores implicados en el control del aula

1.- El uso del espacio y los recursos: La forma en que se organiza el espacio en la clase tiene un efecto considerable sobre la forma en que trabajan los niños. Si los recursos están a la mano y se cerciora que queden claro qué materiales debe usar el niño, es probable que éste se concentre más en el trabajo que realiza.

2.- Empleo del tiempo: El tiempo es uno de los recursos que no se pueden incrementar. Sólo se puede emplear mejor el que se tiene.

Puede ser desconcertante encontrarse sin control, y los maestros sin experiencia han de tener en cuenta que no sólo pueden aprender a controlar a los niños, también se puede tener la capacidad de hacerlo. Gran parte de la capacidad de controlar una clase radica en la confianza en que la voz y gestos de uno, harán que los niños se comporten como desea. El problema es que es muy difícil tener confianza cuando no se sabe si lo que se les pide sucederá o no. Es posible aprender a comportarse como si se tuviera confianza.

Recomendaciones para el control en el aula

a) Los niños se comportan mal cuando no saben qué hacer - Planificar con detalle la organización del trabajo y consignas.

Práctica: Este punto se puede hacer siempre a la hora de la elaboración de la situación de aprendizaje, se debe prever material a utilizar, espacio y organización, para que el trabajo con los niños sea adecuado. Las consignas deben ser planeadas con anticipación para que de momento no se den indicaciones confusas e incoherentes.

b) Antes de dar instrucciones conviene obtener la atención – Es buena idea que los niños nos miren, para que su atención esté alerta y se pueda establecer contacto ocular con ellos. También hay que encontrar una forma de atraer su atención cuando se están haciendo trabajos ruidosos, puede ser conveniente establecer la idea de que cuando se da una palmada es porque quiere llamar la atención de todos. No debe darse demasiada información a la vez, suele ser buena idea pedirle a algún niño en específico cuál fue la instrucción dada para asegurarse de que han captado el mensaje.

Práctica: Se puede llevar a la práctica la estrategia de hacer un sonido para llamar la atención de los niños, pero realmente tiene que ser atractivo o a lo mejor algún sonido inusual que haga que los niños pongan atención al sonido. La otra estrategia de preguntarle a algún niño directamente cuáles fueron las consignas lo he puesto en práctica y ayuda mucho en el sentido de si fueron entendidas o si algún niño estuvo distraído al escuchar a su compañero entiende mejor.

c) Estar preparado cuando los niños entran en clase – La forma en que empiece el trabajo es importante. Insistir en que los niños esperen callados sin hacer nada durante demasiado rato puede ser el inicio del problema. Generalmente es mejor establecer un patrón según el cual sea de esperar que cada uno entre y empiece a trabajar en algo.

Práctica: Esta propuesta alguna vez la observé en prácticas pasadas, en donde a la hora de la entrada todos los niños tenían que poner su nombre en el pizarrón para la asistencia (al mismo tiempo practicaban su nombre y la toma de turnos). Y creo que si se puede llevar a la práctica con algo más elaborado dependiendo el propósito, pero siento que se perdería mucho tiempo al cambiar de actividad (guardar el material) y a lo mejor aparecería dispersión por parte de los niños.

d) Llamar a los niños al orden de forma individual – Cuando se intenta recabar la atención de los niños, suele ser más eficaz dirigirse a ellos individualmente por su nombre

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