Crimen Organizado

Un serio problema es la delincuencia organizada que causa un grave daño al país, a sus habitantes y a sus instituciones; genera inseguridad y zozobra (intranquilidad), y pervierte casi todos los ámbitos de la vida nacional, incluidos, por supuesto, el desempeño económico y el quehacer institucional.

¿Pero cómo se ha llegado hasta este extremo?

Las causas primordiales de este fenómeno, empezando por las sociales son: la miseria, la desigualdad individual y regional, la falta de educación, los ínfimos niveles de vida de grandes sectores de la población, la insalubridad y la desintegración familiar y comunitaria provocadas por las privatizaciones, las aperturas salvajes de los mercados nacionales y la liquidación de las políticas sociales, sin embargo la motivación más frecuente es la obtención de beneficios económicos, por lo que podemos mencionar que el factor desempleo es lo que permite que se creen este tipo de organizaciones donde se dividen el trabajo, se asignan las tareas y muchas veces existe la jerarquización en donde hay un jefe, un grupo de mandos y operadores de base, todo esto con el fin de tener una buena organización y poder así llevar a cabo su cometido. Esto provoca un serio problema para el desarrollo del estado.

La ola de violencia está afectando el país y la seguridad de sus pobladores y con respecto a esto citare a Gabriel Regino García, catedrático y especialista en temas de seguridad por la Universidad Nacional Autónoma de México quien sostiene que el crimen organizado está promoviendo una cultura de extrema violencia al implementar técnicas milenarias, tales como el desollamiento de sus víctimas y con ello está enviando un claro mensaje a sus rivales de lo que les podría pasar.

El presidente de México, Felipe Calderón, firmo a inicios del 2009 una ley clave para combatir el crimen organizado y el narcotráfico en el país, que modifica la coordinación entre las autoridades y establece las reglas para la profesionalización policial. Con ello las autoridades pretenden hacer frente a la escalada de violencia vivida.

La norma promueve la participación ciudadana y establece nuevos mecanismos de control y sanciones para los agentes policiales y funcionarios públicos que cometan actos delictivos.

Con la ley se crea el Consejo Nacional de Seguridad Pública, un órgano colegiado encabezado por el presidente de la República, dedicado a la atención a las víctimas del delito y seguimiento de los programas de seguridad pública. Se fundan también el Centro Nacional de Información, para "resguardar la integridad de las bases de datos criminalísticos y de personal" del sistema mexicano de seguridad, y el Sistema Único de Información Criminal, que contendrá antecedentes de criminales y medios de identificación de los mismos.

Con todo ello, el Ejecutivo pretende dar "mayores herramientas

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