Cultura Sinaloense

No es un secreto tanto para los sinaloenses como para el mundo que Sinaloa ha logrado destacar en la música regional de una manera sorprendente, pero en cada fenómeno hay pros y contras, y esta no fue la excepción, la típica música de banda que suena al ritmo de la tambora, paso de ser un himno para los mexicanos, específicamente para los sinaloenses, a ser una de las corrientes musicales más amenazadoras de todos los tiempos con sus llamados narcocorridos, movimiento alterado y demás. La cultura Sinaloense no solo se caracteriza por la alegría de la gente, el espíritu de fiesta, los bailes y sus coloridas celebraciones, si no que ahora ha tomado otro color, un color rojo para ser precisos, ya que ahora los grupos musicales describen en sus canciones la sensación de “mancharse las manos de sangre”.

Se dice que el origen de la banda es Europeo, y que fue traída a Sinaloa debido a la gran cantidad de inmigrantes europeos que en ese entonces habitaban en Mazatlán. Sin embargo la etnomusicóloga Helena Simonett explica que las primeras bandas sinaloenses se formaron por gente que desertaba de las bandas militares y las municipales y se iba a vivir a los pueblos serranos, donde retomaban las melodías populares.

El primer gran divulgador de la banda en Sinaloa fue el Trovador del Campo Luis Pérez Meza, quien logro llevar la banda a otro nivel, al tener presentaciones en Estados Unidos junto con la “Banda el Recodo” que fue de las pioneras en ese tiempo y la cual es responsable de numerosos éxitos musicales que hoy en día forman parte de la cultura sinaloense como ejemplo El Sauce y la Palma, El Sinaloense, La India Bonita, Los Vergelitos, Mi Gusto Es, etc.

Cualquier Sinaloense debería sentirse orgulloso de tener una historia musical como esa, que ha logrado dar a conocer a Sinaloa por todo el mundo con las bellas melodías que producen en su mayoría los instrumento de viento por los cuales está conformada.

Pero no todo es algo de lo cual sentirse orgullosos dentro de la música regional. Antiguamente los corridos tuvieron su mayor auge durante la Revolución Mexicana y servían para propagar noticias, simples acontecimientos triviales y sobre todo hazañas de los principales personajes que lucharon por la justicia e igualdad en México. Pero hoy en día existe una versión retorcida de este estilo musical, lo cual llaman narco corridos, que narran las historias de los capos más conocidos, sus hazañas, incluso los traficantes pagan para que se les haga uno donde describan sus “aventuras”. Es lamentable ver como una tradición de una época que ha marcado la historia de cada mexicano, se haya convertido en un homenaje para aquellos que únicamente han traído tragedias para el país y no creo que eso sea algo para sentirnos orgullosos.

Lo curioso de todo esto es que en la población juvenil es donde ha tenido mayor impacto, porque incluso apoyan este tipo de música, y han convertido en sus ídolos a todos aquellos narcos que están íntimamente ligados a las rutas del tráfico de drogas y la riqueza generada a partir de la actividad, la dinámica de los relatos que responde a la necesidad de hacer visibles las metas conseguidas.

Este tipo de música no trata solo de hacer saber su historia al pueblo si no que no basta con el solo hecho de tener cosas, hay que presumirlas, las joyas, los carros, las armas, incluso a las mujeres, que en lo personal considero que son materializadas en este tipo de demostraciones y a ellas parece no importarles, con la condición de estar al lado de las personas más influyentes, poderosas y peligrosas de la región. Pero sin embargo hay una gran parte de jóvenes que defienden el estilo grupero por el ritmo gozoso, bailable y lúdico, independientemente de la historia que se cuente.

Otra de las corrientes musicales es el llamado movimiento alterado, que este incluso es más revelador que el anterior, ya que

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