El Desfile

El Desfile.

Cerca de las ocho de la mañana empezaron a llegar a las inmediaciones de la Glorieta Hidalgo, alumnos, maestros, elementos de las corporaciones policías y funcionarios locales, que participaron en el desfile, quienes permanecieron en el lugar 40 minutos.

Las bandas de guerra de los planteles realizaba sus últimos ensayos para estar preparados para el momento oficial, los docentes y directivos trabajaban afanosamente en la organización de los estudiantes,

para tomar sus lugares en el evento, pero causó gran admiración el arribo del 45º Batallón de Infantería, ya que el pelotón de fusileros llevaban tres perros dos labradores y un pastor alemán, a quienes los pequeños empezaron a tomarles fotos.

A las 8:23 horas, la presidenta municipal, Socorro Herrera Orta llegó al lugar de la cita, ataviada con un traje de vestir color beige, con flores pintas a mano y un moño en el cabello muy patrio para encabezar el acto cívico que fue muy breve y al término de este, junto con el capitán Emilio Reyes Ramírez, la encargada de la URSEHN Gloria Elizabeth Rodríguez e integrantes del Cabildo, se incorporó a los contingentes, y en ese momento, alumnos de la Escuela Secundaria “Pedro Antonio Santos Rivera” le aplaudieron y gritaron.

Pero, como siempre en todos los eventos, no podía faltar un can, que se atravesó al paso a la Alcaldesa y acompañantes, cuando estaban a punto de emprender su camino, lo que provocó que colaboradores de inmediato lo quitaran, para evitar un incidente.

A pesar de la poca asistencia en el tramo de la Glorieta al cruce con la avenida Hidalgo, en varios tramos la gente aplaudió al paso del grupo encabezado por Coco, a quien le saludaban, donde niños y niñas grababan con sus teléfonos celulares los detalles del desfile.

Los policías estatales que acordonaron el lugar, buscaban en todo momento una sombra ya que el intenso sol estaba fuerte, y aprovecharon para echarse “un taco de ojo”, al paso de las estudiantes de secundaria y bachillerato.

LOS OVACIONADOS: EJÉRCITO MEXICANO

Durante el paso de los contingentes desde el Ayuntamiento hasta las corporaciones de auxilio, los más ovacionados en la calle Hidalgo, desde niños hasta personas adultas mayores, fueron los integrantes del Ejército mexicano, quienes a su paso por esta arteria la gente no dejó de aplaudirles.

Es la primera vez desde hace muchos años, que la gente decide tomar un aplauso general, hacia un contingente en especial, antes lo hacían cuando los grupos que desfilaban hacían algo curioso o interesante.

Sin embargo en esta ocasión, tan sólo con el hecho de pasar frente a ellos, había en los rostros de la gente, sorpresa de verlos de frente, de conocerlos y darles gracias por la seguridad que daban dentro de la ciudad.

Había cámaras fotográficas por todos lados, celulares grabando este contingente en especial, que fue muy largo en comparación con años anteriores, ya que presentaron desde camionetas, Hummer, personal caminando y cargando armamento, perros amaestrados, hasta integrantes del Servicio Militar Nacional.

No pudo faltar, en los siguientes contingentes, la maestra que regañaba a los alumnos, porque algo habían hecho mal, como salirse de la fila, el caballo “rejego” que no quería caminar y amenazaba con irse hacia la gente, por lo que tuvieron los charros que emparejársele para hacerlo caminar, el perro que se atravesó al paso de los alumnos que desfilaban, las campanitas de los ‘bonaiceros’ o vendedores

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