El corralito, la historia después de un domingo
Enviado por Andres Felipe Florez Diaz • 24 de Marzo de 2022 • Apuntes • 1.105 Palabras (5 Páginas) • 66 Visitas
El corralito, la historia después de un domingo.
Ensayo histórico, presentado por: Andrés Felipe Flórez Diaz.
La historia del Corralito se da en 2002 pero tiene sus orígenes mucho antes, si nos ponemos quisquillosos podríamos buscar su origen muy atrás, quizá en el Plan Marshall, el fin del patrón oro o la guerra fría, sin embargo, hablando de la propia historia argentina y con todas las posibilidades que esta ofrece, quiero comenzar la historia del Corralito 20 años antes, esta historia de la forma que decido narrarla es la historia de cómo Domingo Cavallo llevo a la Argentina de un enorme desastre económico a otro gran desastre económico.
Mientras finalizaba la dictadura militar y poco después de la guerra de las Malvinas, un joven economista llamado Domingo Cavallo era designado a una misión titánica, presidir el Banco Central de la república Argentina que para ese momento cumplía siete años consecutivos con una inflación anual superior al 100% mientras que una crisis de deuda sacudía todo el continente y Argentina no era la excepción, Cavallo probo combatir la inflación poniendo topes a las tasas de interés de los bancos, topes que eran inferiores a la tasa inflacionaria, esa medida no genero efectos sobre una inflación que se volvió la segunda más alta registrada en la historia de Argentina para ese entonces (Superior al 300%), también genero muchas afectaciones al sector privado, sin embargo, el protagonista de nuestra historia renunciaría a su cargo tan solo 52 días después de asumirlo, por lo que no es culpable del todo de esta tragedia.
Su sucesor en el rol estatizo la deuda del sector privado (Aunque a Cavallo le cayeron culpas por esto), una decisión que se hizo en dólares cuando el peso ley, agonizante, aún no había conocido su lecho de muerte, pero este laudo que quedo en la historia con el nombre de circular A251 empeoro convaleciente a una moneda rápidamente devaluada que no tardaría en ser reemplazada tres veces en la siguiente década.
El peso argentino reemplazaría el peso ley, y a este lo sucedería el Austral, cada uno con su propia historia de fracaso en la que era devorado por los dos enemigos de las monedas: La hiperinflación y la depreciación, cada una con su propia historia de fracaso que empeoro la situación, era una lucha de los economistas contra su propia Hidra de Lerna, cada vez que con su espada pretendían cortarle la cabeza a la inflación y la depreciación solo la hacían más fuerte, esta situación que elevo la inflación a más del 3000% parecía tener final tras el regreso de nuestro inesperado mesías, Domingo Cavallo.
En 1991 y tras haber andado por diversos ministerios, Menem, del quimérico Partido Justicialista (Tan contradictorio como su fundador, Juan Domingo Perón) le encomienda el ministerio de Economía a un Domingo Cavallo más experimentado en un mundo distinto al que existía cuando este en su juventud tuvo un paso fugaz por el Banco Central, la cortina de hierro había caído e inclusive algunas voces decían que la historia ya había terminado, el liberalismo había vencido con Estados Unidos a la cabeza, sin embargo, eso parece anecdótico para una Argentina a la expectativa de como el nuevo gobierno les labraría un mejor futuro, o cuanto menos un mejor presente, este momento fue el momento que la historia le dio a Cavallo para brillar.
En medio de la crisis impulso la Ley de Convertibilidad que establecía una tasa fija austral/dólar y poco después peso/dólar (De uno a uno), dispuso que toda la moneda estuviera respaldada en dólares y prohibió que el estado emitiera moneda para financiar el gasto, aquellos seis años fueron unos años dorados (Aunque hoy parezcan oropel) , se guio la inflación a una senda tal que en el último año de gestión de Cavallo seria de 0,1%, el PIB crecía de forma asombrosa, se redujo la pobreza, y el salario real era el más alto que se había visto y que se vio después[1], el Cavallo way fue tan exitoso que su popularidad trascendió fronteras e incluso fue mayor a la del presidente y tras su renuncia forzosa, sus enseñanzas fueron dogma en Argentina el siguiente quinquenio a pesar del evidente desgaste del mismo, esos años dorados habían sido años prestados y estaba llegando el momento de pagar.
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