Ensayo Sobre El Gobierno De Miguel De La Madrid

Análisis del sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado

Tras haber culminado los sexenios de Luis Echeverría y sus antecesores cuando México tenía una economía sostenible y un buen nivel de crecimiento económico ,fue en este periodo en particular en donde México resintió más fuerte la crisis económica debido a que la sociedad de la década de los ochentas estaba acostumbrada a los gobiernos proteccionistas que les ofrecían casi le colocaban el pan en su mano con poco esfuerzo, pues debido a esta situación le resto competitividad al mercado frente al exterior, con una producción enfocada únicamente al mercado interno y los productos ni que decir eran caros , En resumen al México no tener nada que ofrecer al exterior se vio en la necesidad de pedir prestando generando así una deuda exterior con Estados unidos.

Al llegar miguel de la Madrid al poder encontró para su sorpresa a un sistema político desmembrado, sin pies ni cabeza y un sector productivo inservible y desfigurado. Se dio cuenta que tenía que tomar medidas debido al estado en el cual se encontraba la economía, así que se vio obligado a reducir el gasto público, sanar las finanzas, públicas y sabiendo las consecuencias de la medida quizás más arriesgada pero que valía la pena intentar tuvo que reducir los salarios como medida antiinflacionaria es decir, un aumento en los precios y servicios .Por si fuera poco debía poner orden en el gobierno , apaciguar la división entre la sociedad , evitar que la protesta social estallara, renegociar la deuda externa sin declararse en quiebra ,resistir las presiones de Estados Unidos y mantener el orden constitucional. El gobierno dio un giro porque sus problemas eran como un callejón sin salida, de tal manera que se comportó como un gobierno autoritario como pasaba en otros países de América Latina.

Su gran estrategia se sostenía por dos pilares que consistían en; iniciar medidas inmediatas con el fin de lograr una recuperación económica e ir introduciendo modificaciones de fondo en el sistema político, económico y la organización del gobierno lo que el denominaría como “cambios estructurales”, acciones que en ningún otra administración se había hecho escondidos bajo un endeudamiento que crecía desmesuradamente y el petróleo, mismos elementos claves que requería el país para poder estabilizarse y tener un crecimiento económico a futuro.

En su primer día en la presidencia anuncia el programa inmediato para la recuperación económica (PIRE) cuyo objetivo era bajar la inflación, disminuir el gasto público y corregir el déficit fiscal. Se ajustaron al alza los precios y tarifas del sector público para comenzar a sanear sus finanzas, y se inició un programa de defensa de la planta productiva, el empleo y el abasto popular.

Fue un plan severo que, sin embargo, por la dispersión de la información, el alza prolongada de las tasas de interés internacionales, la recurrente caída en los precios del petróleo, la lentitud de los organismos financieros del exterior para apoyar a México con recursos oportunos, la escasa colaboración de algunos grupos de empresarios e incluso errores de instrumentación por parte del gobierno, llegó a tener desviaciones que posteriormente se fueron corrigiendo con nuevos ajustes, entre ellos la contención en los salarios de los mandos del gobierno federal. El gobierno estaba en sus inicios, y el control del aparato del Estado y sus actores tuvo que ser, necesariamente, paulatino.

Desde el comienzo de su administración, De la Madrid pidió a los funcionarios públicos predicar con el mismo ejemplo de austeridad, responsabilidad y comportamiento ético que él mantenía. Fue dentro del gobierno donde comenzó a poner en práctica la renovación moral de la sociedad mediante el combate a la corrupción y al derroche, una de las siete tesis de campaña que orientaron su mandato. Las otras seis fueron: nacionalismo revolucionario; democratización integral; sociedad igualitaria; descentralización de la vida nacional; desarrollo, empleo y combate a la inflación; planeación democrática. Estas tesis fueron su guía, no solamente para las acciones de coyuntura, sino también para los cambios estructurales. A lo largo del sexenio fue promoviendo diversas reformas a la Constitución y las leyes para materializar las siete tesis. También fueron incorporadas a los estatutos de su partido, el Revolucionario Institucional (PRI).

Consideró políticamente inviable pedir al mismo Congreso de la Unión que había aprobado la nacionalización de la banca, que la revocara; esta decisión no fue bien comprendida por muchos. A cambio, y para recuperar la confianza de los sectores productivos, ratificó en la Constitución la naturaleza del sistema económico mexicano: economía mixta con rectoría del Estado y participación corresponsable de los sectores privado y social en el desarrollo nacional.

Vale la pena recalcar que durante su sexenio se crearon otras reformas emergentes como la creación del plan nacional de desarrollo por sectores en el cual cada entidad federativa presentaría un plan de desarrollo local, en condiciones consistentes con las del programa federal. En cada caso, para elaborar los planes se consultaría a la población y a grupos interesados. La sociedad no se quedó a otras ya que con el terrible terremoto de 1985, un evento para el cual no se estaba preparado vecinos, de comunidades aledañas , oficinistas, familias, en fin una comunidad entera se organizaron para sacar de los escombros lo que quedaba de vidas salvando a otras personas o quizás obtener comida para poder sobrevivir este fue un gran paso porque desde aquel día la sociedad ya tomaba sus propias decisiones y por vez primera no dependía del gobierno para ponerse en acción. Hubo otros hechos relevantes que quisiera mencionar pero uno que en particular llamo mi atención fue el bloqueo por parte de estados unidos en la frontera norte que tenían como pretexto buscar drogas, cuando en realidad se trataba de presionar a México para acelerar la búsqueda de Enrique Camarena Salazar, agente de la DEA, la agencia antidrogas estadunidense, que había sido secuestrado una semana antes. Luego se supo que fue asesinado por narcotraficantes en represalia por una reciente destrucción de plantíos de marihuana en Chihuahua. Estados Unidos se resistió a combatir la demanda de drogas en su país. Su embajador en México, John Gavin, mantuvo una posición insolente, de intrigas y recriminaciones, hasta su renuncia en 1986.

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