HISTORIA DEL CONSTITUCIONALISMO EN MÉXICO

HISTORIA DEL CONSTITUCIONALISMO EN MÈXICO

A lo largo de la historia se ha buscado que exista una convivencia social lo mejor orientada posible, por lo que desde nuestros antepasados para lograrlo durante transcurso la historia han llevado a la práctica múltiples técnicas, de las cuales a la que se le debe resaltar con cierta importancia ha sido la creación de leyes que conforman los principios, valores, reglas, criterios, obligaciones y derechos que rigen la organización y funcionamiento de la sociedad, desde entonces hasta hoy en día, pues a resultado ser la de mayor efectividad para lograr el bien común.

Es así como surge nuestra ley más importante a la que llamamos Constitución, Proyecto Nacional, Carta Magna, Ley de Leyes, Ley Suprema, Ley Fundamental, etc.; aunque su nombre oficial es Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Con el paso de la historia nuestra Constitución ha cambiado, entre los que podemos recordar la Constitución de Apatzingán de 1814; la primera Constitución que adoptó la forma de vida federal de nuestro país en el año de 1824; la llamada Constitución de las Siete Leyes de 1836; la Constitución de 1857 y la original que nos rige desde el año de 1917, que fue elaborada por Venustiano Carranza y el Congreso Constituyente de Querétaro, pero que sus leyes no se han mantenido igual, si no que ha sufrido reformas gracias a los adecuarnos a los cambios que a vivido nuestro país y el entorno en el que nos desarrollamos y que sin duda alguna a sido necesario pues hay situaciones que no se han abarcado y de las cuales no existen reglas que nos puedan orientar para valorizarlas.

Podemos afirmar, sin la menor duda, que en el presente lo único constante es el cambio, producto del acelerado desarrollo de la ciencia y la tecnología, la complicada relación de interdependencia entre las naciones y los nuevos espacios de libertad individual y social que caracterizan el mundo moderno. Para los mexicanos de todas las generaciones y en todas las épocas, la Constitución ha sido el documento en el que se expresa la visión de México en un momento particular de su historia, pues invoca la historia viva del pueblo mexicano, sus momentos dramáticos, la búsqueda del mejoramiento social por medio de las reformas.1

1Muñoz, Virgilio/Acuña Borbolla, Manuel F.

Nuestra Constitución: Historia y valores de una Nación,

Fondo de Cultura Económica, México, D.F., 2000, pg.23.

Desde el año de 1810 en que comenzaron las primeras inquietudes por la libertad del pueblo y la independencia de México de los Españoles, desde el domingo 16 de septiembre, hasta la actualidad, nuestra historia política ha tenido obstáculos para obtener el triunfo en las pocas veces que hemos salido victoriosos.

La primera Carta Magna de nuestro país fue la Constitución de Apatzingán, que fue elaborada por el Congreso de Anáhuac la cual fue convocada por José María Morelos el 13 de septiembre de 1813 durante la lucha de Independencia. Mientras Morelos convocó el Congreso de Anáhuac, en España se restablecía el gobierno absolutista de Carlos IV, que suprimió la Constitución liberal de Cádiz de 1812, por lo que Morelos declara formalmente la Independencia del gobierno español.

El documento de mayor importancia que acompaña este movimiento fue “Los Sentimientos de la Nación”, donde José María hubo de exponer 23 puntos, el ideario fundamental de la patria pronta a constituirse; y surgió un tanto a fin de superar los errores y limitaciones contenidos en los “Elementos constitucionales” de López Rayòn.2

Sin embargo, a pesar del triunfo libertador de 1821 mediante los Tratados de Córdoba, el país aun no contaba con una constitución. Durante el gobierno de Iturbide, se promulgó el Reglamento Provisional Político del Gobierno del Imperio, el cual, hacía del emperador Agustín I de Iturbide la única autoridad de la nación.

Los legisladores de 1824 comprendieron la necesidad de que México fuera un país de leyes, de ésta inquietud se obtuvo como resultado la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos, sancionada por el Congreso General Constituyente el 4 de octubre de 1824; esta Ley Suprema no sólo es la primera si no que estableció un conjunto de principios políticos que marcarían para siempre nuestra historia.

El artículo 4ºde esa Constitución, establecía que México asumía la forma de gobierno republicano, donde se declara que es una “república representativa popular federal”. La característica que establece ésta Ley de Leyes era el ejercicio de funcionamiento de la unidad nacional como una forma de vida federal.

En oposición de los liberales surge el proyecto de los conservadores, el cual cobra fuerza como resultado de la confusa situación política que vivió la nación con la caída de Iturbide , así como por el desorden que causó el gobierno del general Antonio López de Santa Anna; dónde Lucas Alamán es el representante más autorizado de esta corriente de pensamiento y formula sus principios dentro de los cuales destacan los siguientes: “Estamos decididos contra la Federación, contra el sistema representativo por el orden de elecciones que se ha seguido hasta ahora; contra los ayuntamientos electivos y contra todo lo que se llame elección popular, mientras no descanse sobre otras bases…”3

2Sayeg Helú, Jorge.

Introducción a la Historia Constitucional de México,

México 1978, pg.25. 3Muñoz, Virgilio/Acuña Borbolla, Manuel F.

Nuestra Constitución: Historia y valores de una Nación,

Fondo de Cultura Económica, México, D.F., 2000, pg.37.

Este proyecto se conoce como Bases y Leyes Constitucionales de la República Mexicana, decretadas por el Congreso General de la Nación en el año de 1836, como consecuencia de esta la única autoridad competente era el Supremo Poder Nacional, que conserva la división de poderes en ejecutivo, legislativo y judicial, éstos representaban fundamentalmente la voluntad del presidente de la República.

Los mexicanos pasaron varias décadas donde los constantes abusos de los distintos gobiernos de Santa Anna habían cambiado las bases en que descansaba la nación: el respeto a la Constitución y a los principios democráticos que de ella emanaban y con el

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