La Contribución de los Jóvenes en el Desarrollo y Seguimiento de la Agenda 2030

La Contribución de los Jóvenes en el Desarrollo y Seguimiento de la Agenda 2030.

Luis Atocha Sala Tuz.  

Los distintos cambios actuales a nivel mundial hacen plantearnos una nueva perspectiva sobre la situación económica, las diferencias sociales y el impacto ambiental; los cuales podemos percibir de manera directa en nuestra vida cotidiana. Estas problemáticas abordadas a nivel internacional por distintas organizaciones han sido el resultado de varias publicaciones y conferencias para enfrentarlas, en este la Organización de las Naciones Unidas, (2015) en conjunto con distintas instituciones académicas, privadas y asociaciones civiles proclaman la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible; la cual está compuesta por 17 objetivos y 169 metas. (Organización de las Naciones Unidas)

Como sabemos, con casi dos mil millones de adolescentes y jóvenes en  la actualidad, estamos actualmente frente a la mayor cohorte de esta población que el mundo ha experimentado, es por eso que al integrar sus necesidades con énfasis en la Agenda de Desarrollo, y por lo tanto realizar acciones contundentes para ello a nivel nacional y local durante  los próximos 15 años, se podría generar un gran impacto, ya  que, sin tener compromisos claros, así como inversión significativa para  la salud, el desarrollo y los derechos humanos de adolescentes y jóvenes, para poder cumplir los objetivos delineados  para alcanzar en el 2030.

Tener tanta población en la adolescencia y la juventud presenta la oportunidad de cultivar un dividendo demográfico de jóvenes saludables, con educación, empoderamiento y con empleos dignos, que así logren un crecimiento económico sostenible que no sólo funcione para los intereses de empresas privadas, sino que cumpla con las necesidades y los sueños de cada adolescente y persona joven en el marco de lo que significa desarrollo para sí mismo. Sin embargo, la realidad en estos momentos para muchas de estas personas jóvenes está llena de desigualdades sociales, de género y de ingreso.

De acuerdo al Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir ( Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir, 2015), la situación actual en México de los jóvenes es la siguiente:

Pobreza multidimensional.

Desde la reciente recesión económica mundial, México sostiene una alta tasa de pobreza, junto con mayor desigualdad poblacional de género, edad, y procedencia étnica y geográfica. Desde el 2005, el 17% de niñas entre 16 y 19 años y el 14% de las mujeres jóvenes entre 20 y 24 años vivían en la pobreza2. Más de la mitad de la población total de niños y adolescentes vivían en pobreza (53.8%), de los cuales 12.1% se encontraba en pobreza extrema. Esto representa a 4.7 millones de niñas, niños y adolescentes viviendo en pobreza extrema.  

Desempleo.  

En 2011 la tendencia de empleo juvenil mundial era de 12,3%, aumentó a 12,6% en 2013 y se prevé que llegue a 12,8% en 2018 y se calcula que en 2013 había 73,4 millones de jóvenes desempleados4. En México, en el 2012, el 9.4% de los adolescentes entre 15 y 24 años eran desemplea-dos, con las mujeres jóvenes teniendo mayor probabilidad (tasa de des-empleo del 10%) que los hombres jóvenes (tasa de desempleo del 9%).

Educación

Hasta 2011, 132 millones de hombres y mujeres jóvenes estaban en una situación de analfabetismo, de acuerdo con cifras de UNESCO. “Casi 9 de cada 10 jóvenes se concentran en dos regiones: el sur y el oeste asiático (62 millones) y África subsahariana (48 millones). En otras regiones, el número de juventudes analfabetas fue menor: Estados Árabes (6 millones), Este de Asia y el Pacífico (0.4 millones), América Latina y el Caribe (3 millones), Europa Central y del Este 0.05 millones)”. En México, más del 30% de las personas jóvenes interrumpió sus estudios entre los 16 y los 18 años, lo que implica que abandonaron la preparatoria o bien, suspendieron sus estudios al concluirla. Más del 25% lo hizo entre los 13 y 15 años.

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