La ciudad y la sociedad en el marco de la globalización
Enviado por Caroline Garcia Del Risco • 13 de Noviembre de 2019 • Ensayos • 1.254 Palabras (6 Páginas) • 84 Visitas
“La ciudad y la sociedad en el marco de la globalización”
Caroline García del Risco
Cuando hablamos de globalización nos referimos a un proceso que integra la política, la economía, la sociedad, la cultura y la tecnología. Pero mayormente solo muestra los beneficios económicos y políticos que genera debido a la expansión comercial dejando de lado las grandes brechas sociales que causa el mal manejo de esta. Si bien es cierto el desarrollo de todos estos ámbitos depende mucho del estado, pero no excepta a la población; ya que ésta resultará afectada con la decisión que se tome y por ende afecta a la ciudad.
La globalización está ligada al capitalismo ya que este proceso posiciona a las potencias mundiales en primer lugar dejando de lado a los países en vías de desarrollo con solo un 25% de las inversiones internacionales, acrecentando así los índices de pobreza extrema. Enrique Diez Gutiérrez (2010) sostiene que las empresas multinacionales son las protagonistas fundamentales de la globalización neoliberal. Se han convertido en un actor dominante, abarcan todos los países y actividades económicas y representan la mayor fuerza en la economía mundial actual.
Entonces entendemos que también existe un impacto negativo, esto debido a la diferencia social que genera, la cual se da no solo por la pérdida de identidad, sino también por la desigualdad económica de la población. Esto significa que no está funcionando para todos los países y mucho menos para todas las clases sociales. Aspectos como la educación, la comunicación, los servicios sociales y la atención medica no llegan a esos pequeños pueblos lejanos de la ciudad; dejando olvidadas a estas personas, limitando sus oportunidades de inserción en la sociedad. Esto se debe a la privatización de servicios públicos, la cual se ha convertido en un negocio lucrativo y muy rentable para las grandes empresas que buscan ganancias, elevando las tasas de interés, logrando así, que estos servicios sean inaccesibles para personas de bajos recursos. De esta manera el Estado pierde total responsabilidad, haciendo oídos sordos a la realidad que se vive día a día en países tercermundistas.
Actualmente la educación está orientada hacia la capacitación técnica y tecnológica con la finalidad de cubrir las necesidades de empresas trasnacionales, permitiendo “la incersión dentro del mercado laboral”, vendiendo la idea de tener una mejor calidad de vida cuando en realidad será solo un trabajador más, con el sueldo mínimo y los pocos beneficios que estas empresas brindan.
La globalización actúa de manera indiferente con el individuo, basándose solo en el capital financiero olvidándose de sus tradiciones, costumbres, hábitos y creencias, estandarizando el estilo de vida de las personas obligándolas a cumplir ciertos requisitos para su aceptación dentro de la sociedad. Una de las consecuencias de esto es el declive de las lenguas minoritarias como por ejemplo en Perú se han perdido 37 lenguas indígenas en los últimos años, ya que las personas con la globalización van dejando su identidad cultural amoldándose a costumbres y hábitos que las potencias mundiales imponen. Estos problemas generan la famosa brecha social la cual repercute dentro de la ciudad, ya que esta debe adaptarse a la globalización.
El sistema político se ha uniformizado, lo que ha permitido que se unan los países para regirse por leyes en común. Esto ha producido un enfrentamiento entre la política perteneciente al propio Estado y a la política que quieren imponer las disposiciones supranacionales provocando en la población el no sentirse representado por ninguna de estas entidades. A largo plazo esto podría producir una nueva forma de control cultural y/o económico por parte de las potencias dominantes.
Si bien es cierto la intervención de estos organismos en países en vías de desarrollo como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ayuda a regular aspectos como tratados internacionales y ambientales, convirtiéndose en un ente arbitrario que busca mantener un crecimiento regulado en los países asociados a ella de manera pacífica. También existen países como Brasil que no se sienten representados por potencias mundiales y buscan de manera extremista desligarse de ellas, llegando así a elegir a candidatos presidenciales con ideas radicales que pueden desencadenar una crisis social.
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