La formación es una dinámica de desarrollo personal que consiste en tener aprendizajes, hacer descubrimientos, encontrar gente, desarrollar a la vez sus capacidades de razonamiento

La formación es una dinámica de desarrollo personal que consiste en tener aprendizajes, hacer descubrimientos, encontrar gente, desarrollar a la vez sus capacidades de razonamiento y también la riqueza de las imágenes que uno tiene del mundo. (Gilles Ferry)

Buen día autoridades educativas que nos acompañan, profesores, familiares, compañeros de generación y demás personas que nos honran con su presencia; hoy 27 de julio del 2015 estamos reunidos con motivo de la celebración de la entrega de certificados: generación 2011-2015 de las Licenciaturas en Educación Secundaria con Especialidad en Historia y Geografía.

Es para mí una gran responsabilidad y me siento honrada al dirigir estas palabras. Ha sido tan difícil empezar a escribir, ¿cómo resumir en pocas líneas todo lo que hemos vivido y sentido aquí?

Podemos pasar toda la vida imaginando fantasmas y preocupándonos por el camino del futuro, pero todo lo que siempre será es lo que ocurre aquí; en las decisiones que tomamos en este momento, las cuales están basadas en el amor o en el miedo, muchos elegimos nuestro camino por miedo disfrazado de practicidad; lo que realmente queremos parece imposible de alcanzar y ridículo de esperar así que nunca nos atrevemos a hacerlo; es por ello, que al aceptar formarnos como docentes hemos adquirido el compromiso con el prójimo y con la sociedad en general, teniendo presente que el efecto que tengamos sobre otros es el bien más valioso que hay.

Como diría el Maestro Reyes Esparza, “Hablar de una formación inicial del maestro es aludir a una etapa común en la vida, es retomar una serie de experiencias algunas gratas otras no tanto, por medio  de las cuales nos fuimos introduciendo en una dimensión destacada, de la cual teníamos una visión nebulosa, que contenía ideales que nos parecían atractivos y por los cuales valía la pena trabajar, el ser maestro”.

Por ello ser maestro hoy tiene afortunadamente otros rasgos que se inscriben en su lado luminoso y se descubren cuando logramos trascender las pequeñas miserias de la cotidianeidad y recuperar lo esencial, lo que alguna vez no nos atrajo hoy día lo hacemos por “vocación”: el cariño a los adolescentes, el deseo de ayudarles, de abrir sus inteligencias, de acompañarlos en su proceso para llegar a ser hombres y mujeres de bien. Compañeros no basta con saber cuáles son los rasgos del perfil de egreso de un docente, debemos ser conscientes y actuar, pues el maestro del siglo XXI es un formador de ciudadanos, capaz de leer los contextos locales y globales que le rodean y de responder a los retos de su tiempo.

Hagamos de cuenta que nuestra vida es como un tren, lleno de sueños, fantasías esperanzas, despedidas y lo más importante es que siempre va hacia delante. Este es un fabuloso tren, subirán y bajarán personas, maestros de la vida, amigos, familiares, hagamos este viaje de la mejor manera posible, tratando de relacionarnos bien con todos los pasajeros, sin hipocresías, buscando y aprendiendo lo mejor que tengan para ofrecer.

Terminamos un ciclo, cerramos un capítulo, nos despedimos de personas y lugares que tal vez ya no frecuentaremos, pero que han formado parte de nuestra vida por algún tiempo, crecer duele, pero al mismo tiempo no podemos evitar entusiasmarnos por la nueva etapa que próximamente empezaremos, nuevos sueños, nuevas metas y retos, nuevas personas y nuevos lugares, la aventura continúa, en la escalera todavía hay peldaños por subir.

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