Leones Por Corderos
mjgonzalez5912 de Mayo de 2014
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En el mundo son más los buenos que los malos
Las sociedades desde la antigüedad han buscado su propia permanecía, sin importar lo que se necesite para lograrlo. En USA “la potencia mundial” el único país con capacidad de crear desarrollo y sostenibilidad también hace parte de este mundo egoísta y rentable, que busca solo su voluntad de vivir sobre el mismo eje que lo soporta “la nación”, la guerra económica, política y social que sostiene con Iraq ha dejado más de 3500 soldados muertos desde el 2003 (cifra no sustentada) pero ¿El gobierno que puede hacer para acabar con la amenaza que está consumiendo su país? Los grandes mandatarios del gobierno como senadores entre otros, deben convencer a su pueblo que están haciendo las cosas bien, que son instituciones de control que fundamentan el poder comunicativo, pero interesan más los artículos de “el auge de los asesores de imagen en la política” que saber la verdad sobre los planes de acción que son implementados para dominar un país que no es democrático y por esto es una amenaza para la sociedad, no una ficha lucrativa para el sostenimiento de la gran potencia o que Irán un país con potencial Nuclear y cómplice de Iraq es el siguiente objetivo, no por sus grandes reservas de gas y petróleo. Este poder fetichizado elimina o acomoda a sus intereses las instituciones normativas o procedimentales para alcanzar un “estado de gobierno”.
Ante esta problemática no hacemos nada más que criticar, pues es más fácil solo evadir el problema, esta comunidad carece de luchadores, de valientes y audaces que son capaces de hacer algo por cambiar algo que es casi imposible, porque es mejor rendirse que pelear y fracasar. El estado convierte a su comunidad en títeres conformistas esperando por las noticias de farándula, pues los medios buscan complacer, vender lo que el gobierno les paga por que vendan, porque la guerra se entrega en todos los hogares de un país democrático. El gobierno toma el poder que cada miembro de la comunidad le ha otorgado, pues la potentia no puede ejercer por si misma esta capacidad del poder político, y ahí se crean los representantes con intereses particulares que maquillan las demandas de la comunidad para tranquilizarla, donde imponen sus propias reglas de juego ya que nadie se lo impide, pues el poder es dominación, tienen control sobre el pueblo y lo saben, nos mantienen al margen con los medios de comunicación y su opinión pública, y así todos los miembros de la comunidad nos sentimos seguros y rutinarios, pues no importa la salud, la educación, el desempleo o la falta de condiciones dignas para vivir, importa la comodidad y si estamos a gusto la crisis ya no existe (o por lo menos la ignoramos). No existen instituciones que obedezcan totalmente a los que lo necesita, si no se pide, nada se dará, no demandamos NADA.
Estamos en un lugar donde los de sangre azul son espectadores, y los que el sistema les ha dado la espalda son solo actores secundarios sin importancia (donde un negro y un mexicano también quieren hacer algo por un país injusto con ellos) porque de nada importa si eres egresado de la mejor universidad del país, la ética y justicia no se edifican en un salón de clases. Pero para que el sistema funcione realmente se necesita esta jerarquización, porque no hay señor feudal sin vasallo o burgués sin sirviente, se necesita corderos con poder que dominen a influenciables leones, en el sistema capitalista no somos más sujetos portadores de derechos, sino fichas de juego, clientes, la sangre por ser succionada, individuos que necesitan el consumo para sostenerse, y aquellos que encabezan la pirámide son nuestros titiriteros multimillonarios.
La guerra, el método más rápido para crecer sin dar muchas explicaciones razonables por aquellos que se preocupan por el bienestar común, porque matar es un pecado capital, a menos que estés en la inquisición,
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