MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INSTITUCIONES: COMO PROVOCAR CAMBIOS SOCIALES EN ESPAÑA

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MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INSTITUCIONES: COMO PROVOCAR CAMBIOS SOCIALES EN ESPAÑA

Lucas Serrano Pastor

3º VT

Psicologia del Pensament

Profesor José Luis Alba Robles

3 de Mayo de 2018

ÍNDICE

1.        RESUMEN        3

1.        SOCIEDAD, MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y PENSAMIENTO        3

2.        LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN EN LA ESPAÑA ACTUAL        5

3.        CÓMO LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN INFLUYEN EN LA OPINIÓN PÚBLICA Y PROVOCAN CAMBIOS SOCIALES        7

4.        ESTUDIO DE UN CASO:  EL ASESINATO DE GABRIEL        9

5.        CONCLUSIÓN        11

6.        REFERENCIAS        12

1. RESUMEN

Los medios de comunicación son una herramienta de persuasión y construcción de la realidad, los cuales (QUE) se pueden utilizar para diferentes fines; dependiendo como y quien (CON TILDE) los controle, el resultado es dispar. El objetivo de este estudio fue conocer el estado actual de los medios de comunicación en España y si tienen influencia en la generación de la opinión para provocar cambios sociales y políticos. Para ello, en primer lugar, se exploró la relación de los medios de comunicación e instituciones gubernamentales bajo un sistema capitalista; en segundo lugar, se indagó como los medios generan e influyen en la opinión pública de la ciudadanía; y, en tercer lugar, se analizó una noticia que tuvo repercusiones políticas y sociales en la población. En conclusión, se desdibujó un estado español con líneas difusas entre empresas, gobierno y medios de comunicación, empleados para generar acciones interesadas. Se hace necesario una reflexión conjunta encaminada hacia una construcción de medios que comuniquen la información de una forma crítica y transparente. Sin este hecho, el individuo puede carecer de libertad de decisión.

1. SOCIEDAD, MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y PENSAMIENTO

Actualmente, vivimos en una sociedad globalizada y fuertemente mediatizada. Los medios de comunicación desempeñan un papel importante en el conocimiento de la realidad y dictaminan los temas sobre los que la población debe preocuparse dirigiendo el foco de atención a aquello que consideran más relevante (Califano, 2015; Cárdenas, 2015).

Los medios de comunicación llevan existiendo desde hace décadas, sirviendo para diferentes fines y desempeñando distintas funciones. Según Romano (2006) hoy en día vivimos en lo que él llama “cultura de medios”, donde el consumo de medios (específicamente la televisión) se ha convertido en un componente fijo de la vida cotidiana de las personas, marcando una conciencia y pensamiento único en los ciudadanos.

Su dirección y gestión (DÉ QUIEN) viene determinada por el sistema económico y social predominante; y por los poderes gubernamentales del país en cuestión.  El sistema ECONÓMICO actual imperante es el capitalismo basado en la significación imaginaria de la “racionalidad instrumental”, donde se promueve un crecimiento ilimitado de producción, acumulación, enriquecimiento y consumo (Valencia, 2010). Su premisa principal es la creación continua de capital bajo el motor de la ganancia y la competitividad (Garzón, 2012). Streeck (2016) menciona que el capitalismo promete un crecimiento infinito de la riqueza mercantilizada en un mundo finito, con la utilización de la ciencia y tecnología, recurriendo a la expansión sin fin de mercados libres bajo un estado protector hegemónico que ejecuta políticas de apertura de la actividad mercantil a una escala nacional e internacional.

Pero el capitalismo no es solo una modelo económica también es un modelo social, ya que establece las relaciones entre los sujetos y estos con la sociedad. La figura actual del consumidor es una persona pragmática, responsable e informal, que construye su identidad a partir de estilos de vida que toma como signos externos de pertenencia los objetos que consume y que no es ni absolutamente dominado ni absolutamente libre (Alaminos y Penalva, 2016). Como dice Alonso (2006) el proceso de consumo está incrustado en todos los mecanismos del funcionamiento de la vida y no solo del mercado.

Bajo este sistema, los promotores y diseñadores que se encargan de los medios de comunicación dedican grandes cantidades de energía y dinero para investigar como influenciar y condicionar a las conciencias. Lo que se pretende es crear a un tipo de ser humano conveniente para el sistema capitalista de producción y consumo (Romano, 2006).

En cuento a los poderes gubernamentales, en el estado español, ya son varias voces que hablan de la posible parasitación de las instituciones por parte del gobierno actual. Se ha llegado a lo que el autor Carrasco (2017) denomina “capitalismo clientelar”, que ocurre cuando los actores del capitalismo capturan el entramado institucional con el favor de aquellos que gobiernan, estableciendo un vínculo estrecho y de intereses entre gobernantes, instituciones y empresas. Además, según Rabadán (2015) los gobiernos y partidos políticos en España conciben las televisiones como instrumentos de propaganda, controlando las noticias que se emiten a través de una legislación redactada???? de acuerdo con los intereses mencionados anteriormente.

En este contexto, teniendo en cuenta que los medios de comunicación tienen un papel clave para la construcción social, se encuentran unos medios sesgados por ciertos poderes, donde circulan temas específicos con el objetivo de influir sobre el debate público. Según McCombs y Shaw (1972) su peso en el establecimiento de la agenda social se produce en función de la importancia que otorgan a los asuntos tratados y de los atributos que adquieren los objetos o sujetos que reciben cobertura mediática. Por lo que, los medios proveen marcos cognitivos que intervienen en la percepción del público sobre los sucesos del entorno asumiendo un rol especifico de intermediaros simbólico colectivo (Wolf, 2004).

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