Mando Unico Policial

Mando Único Policial: ¿Regreso a la Administración Pública Tradicional?

I. Introducción

El tema de la seguridad pública e incremento de índices delictivos en nuestro país han estado muy presentes dentro de la agenda pública y la agenda gubernamental; a través de los años la situación que guarda México en materia de seguridad ha sido cada vez más preocupante, es por esto que el gobierno mexicano en años recientes ha decidido actuar en una forma más determinante y rígida en el combate a la delincuencia, muestra de esto es la intención de implementar un Mando Único policial que ayude a “coordinar esfuerzos” entre los niveles de gobierno estatales y municipales, que a su vez ayuden a disminuir los índices de criminalidad en la república. Y es aquí dónde radica el punto principal para este trabajo, estas medidas que se están tomando a partir de la fusión entre policías tanto estatales como municipales, que atañen por completo a la administración pública, así como la capacidad administrativa-operativa que guardan los municipios para el ejercicio de las funciones de los cuerpos policiacos.

II. Seguridad: crisis en la administración pública mexicana.

Debido a la crisis de violencia que ha aquejado a México en los últimos años, Felipe Calderón Hinojosa lanzó una iniciativa en el año 2010 que haría una reforma estructural bastante agresiva en la organización de los cuerpos policiales de los distintos niveles de gobierno; ésta crisis, sin embargo, atañe completamente a la administración pública, y más aún, por esta reingeniería propuesta por el entonces presidente de la república y la Conferencia Nacional de Gobernadores.

El índice de los delitos de alto impacto en México para el año 2010, representaban el 51% de los delitos cometidos en el país, para el 2012 incrementó a 53% , es por esto, que Felipe Calderón en conjunto con la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO) hicieron un llamado a crear la “Policía Única Estatal”, en ésta además de proveer mayor especialización a los cuerpos policiacos, también proponía la fusión con la policía estatal e incluso desaparición de las policías municipales, con el argumento de que éstas últimas mostraban un nivel alto de corrupción y colusión con las distintas organizaciones delictivas, además de la ausencia de elementos de seguridad en muchos municipios en situación de pobreza en el país.

La crisis radica precisamente en la falta de capacidad operativa de los municipios en cuanto a seguridad y en general en la provisión de servicios públicos para la sociedad; aunado a esto otra problemática se encuentra en la reestructura que se propuso, debido a que no se contaban –y no se cuentan- con los elementos suficientes (tanto jurídicos como administrativos) para ejecutar e implementar una policía única estatal.

III. Prevalencia del modelo tradicional burocrático en el Mando Único Policial

El modelo que prevalece en el tema del Mando Único policial y en general en el tema de seguridad pública en México, es el burocrático tradicional debido a las prácticas netamente normativas y burocráticas en el ejercicio de las funciones de cada nivel de gobierno para proveer de seguridad pública a sus ciudadanos.

IV. Cercanía entre gestión pública y gestión privada.

La cercanía o la distancia entre la gestión pública y la gestión privada no están presentes en este tema, debido a la falta de presencia en éste, y además por la naturaleza del mismo ya que la seguridad es un derecho de los ciudadanos que corresponde y es inherente al Estado, el ámbito privado no tiene participación o no debería tenerla en éste tema, por que lo que dicta la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y, finalmente, por que el monopolio de la fuerza pertenece indudablemente al Estado.

V. La seguridad inherente al Estado alejada completamente del ámbito privado.

Según el artículo 21 de nuestra Constitución será actividad inherente al Estado, todo aquello que competa a la seguridad de sus ciudadanos y que a la letra dice: “…La seguridad pública es una función a cargo de la Federación, el Distrito Federal, los Estados y los Municipios, que comprende la prevención de los delitos; la investigación y persecución para hacerla efectiva, así como la sanción de las infracciones administrativas, en los términos de la ley, en las respectivas competencias que esta Constitución señala. La actuación de las instituciones de seguridad pública se regirá por los principios de legalidad, objetividad, eficiencia, profesionalismo, honradez y respeto a los derechos humanos reconocidos en esta Constitución…” es por esto que el rol del mercado en este caso no tendría injerencia alguna en el tema por su naturaleza, sin embargo, la demanda de la sociedad en este supuesto es tener este sentido de seguridad y confianza mientras lleva

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