Poder Publico

“Pacto social”

Las leyes nacen de la necesidad de un orden; Organizar a un pueblo es la gran hazaña de un estado, el cual debe velar por los derechos de una sociedad en la cual debe prevalecer como premisa la igualdad y la libertad; derecho que por nacimiento y el solo hecho de ser hombre pertenece al individuo. De aquí nace la división de estos tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

El Ejecutivo: Un estado elegido en consenso por todo un pueblo que delega en él, el ejercicio de gobernar, velar por la seguridad, respeto y acatamiento de los derechos de todo un pueblo sin dejar corromperse y sin que su avaricia nuble su razón y deje prevalecer su bien particular sobre el bien colectivo.

El Legislativo: El pueblo en reunión conjunta determina las leyes que los rigen y teniendo en cuenta la premisa de la igualdad donde todos sin distinción tienen derecho a la libertad y la vida.

La justicia debe ser aplicable a todos y no bajo una fuerza que oprima y anule al pueblo si no una fuerza que brinde, equidad al hacer cumplir las leyes.

Rousseau concluye; el estado aparece cuando los hombres sienten y se dan cuenta que están siendo privados de sus derechos fundamentales; aun con estas leyes que no son más que un registro de nuestra voluntad seguimos siendo libres.

“El hombre ha nacido libre y sin embargo vive en todas partes entre cadenas” (Juan Jacobo Rousseau, 1999) el hombre conserva su libertad moral, que lo hace dueño de su propia persona; este tiene una voluntad individual, que a veces puede no coincidir con la de la mayoría, pero está obligado a obedecer la voluntad general y si no lo hace debe ser forzado hacerlo, ya que solo así el mismo podría ser libre. Si cada uno hiciera lo que su voluntad le mande, no respetaría los derechos del otro como persona y los suyos propios se verían peligrar.

Por esto se crea el Estado como garantizador del ejercicio de los derechos individuales, para los cuales esas mismas personas deben renunciar a algunas de sus facultades en beneficio de todos, por medio de un acuerdo de voluntades, donde los ciudadanos acepten sus limitaciones con agrado para vivir en una sociedad que los proteja, asegurando sus bienes, la vida y la libertad de cada uno de los individuos mediante la protección de todos.

Otro de los pensadores de los poderes públicos fue Montesquieu el cual afirma que nuestra vida está regida por dos tipos de leyes; las positivas y las naturales.

Positivas: Son reglas que miden y guían nuestras acciones, prescritas por una autoridad que se cree con derechos de hacer estas leyes, las cuales deben estar acompañadas de una sanción o pena; sin estas la ley seria incompleta.

Naturales: Estas leyes están influenciadas por las costumbres, las circunstancias de la naturaleza en cada momento y por el propio hombre.

Montesquieu

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