Tesis De Capacitación De Personal

Acerca de la Motivación

TEORIA DE MASLOW

¡Una necesidad satisfecha no es motivadora de conducta!

Este axioma tan evidente tiene una profunda significación; a pesar de su aplastante lógica, es habitualmente ignorado por determinados directivo en la Empresa. La necesidad de aire, por ejemplo, es de primera necesidad. Y sin embargo, no tiene un efecto motivador apreciable sobre la conducta, a no ser que falte.

Cuando se habla de satisfacer necesidades como forma de evitar conflictos, muchos dirigentes llegan a pensar que el trabajador no puede estar nunca satisfecho con las condiciones de su empleo. Creen que siempre surgirán nuevas y nuevas necesidades, como una cascada. Pero no parece que sea así. Los jefes deben ser adiestrado para comprender la motivación humana, los factores fundamentales de la misma y la capacidad terapéutica o manipulativa que necesitarán para enfrentarse con ella, porque es también cierto que el desarrollo de la motivación del empleado no surge por azar, sino que es algo predecible, con tal de que se tenga un mínimo de sensibilidad con respecto a las necesidades de los Empleados.

La jerarquía de necesidades

Maslow en su libro “Motivación and Personality” (Nueva York, Harper And BROS-1954) considera a las motivaciones del individuo en términos de una jerarquía: algunas necesidades “superiores” se vuelven activas, tan pronto como han sido satisfechas las inferiores”. He aquí el resumen jerárquico que hace de ellas:

El hombre es un animal menesteroso: en cuanto se satisface una de sus necesidades otra ocupa su lugar. Este proceso es interminable. Transcurre desde la cuna hasta la muerte.

Las necesidades del hombre están organizadas en una serie de niveles: una jerarquía de importancias. El nivel más bajo, aunque fundamental cuando no se las atiende, están sus necesidades fisiológicas. Sólo para el pan vive el hombre, cuando no hay pan. A menos que las circunstancias sean insólitas, sus necesidades de amor, de status, de reconocimiento, no operan si tiene desde algún tiempo el estómago vacío. Pero cuando come regular y convenientemente, el hambre deja de ser una motivación importante; sucede lo mismo con las demás necesidades fisiológicas del hombre: de descanso, de ejercicio, de refugio, de protección ante los elementos.

ESCALA DE NECESIDADES

LAS NECESIDADES SUPERIORES SÓLO PUEDEN SATISFACER CUANDO SE HAN SATISFECHO LAS DE ORDEN INFERIOR

EJEM: NO PUEDO DESARROLLARME PROFESIONALMENTE SI PIENSO QUE NO ME VAN A RENOVAR EL CONTRATO LABORAL EN LA EMPRESA

JERARQUIA DE LAS NECESIDADES

Necesidades de protección

Cuando las necesidades fisiológicas están razonablemente satisfechas, empiezan a dominar en la conducta del hombre las del nivel inmediatamente superior y empiezan a motivarlo. A éstas se les llama necesidades de protección. Se trata de la necesidad de protección contra el peligro, las amenazas, las carencias. Hay quienes las califican erróneamente de necesidades de seguridad. Pero el hombre no exige seguridad a menos que se encuentre en una relación de dependencia en la que teme que se le despoje arbitrariamente. Lo que necesita es la “oportunidad más justa que resulte posible”. Una vez que está seguro de ello, se encuentra más dispuesto a correr riesgos. Pero si se siente amenazado o dependiente, su necesidad mayor es de garantías, de protección, de defensa. No hace falta destacar mucho que en cuanto todo empleado está en situación de dependencia, las necesidades de protección pueden cobrar considerable importancia. Actos arbitrarios por parte de la Administración, una conducta que provoque incertidumbre con respecto a la permanencia en el empleo, o que refleje favoritismo o discriminación, una conducta que provoque incertidumbre con respecto a la permanencia en el empleo, o que refleje favoritismo o discriminación, una administración impredecible de la política... todas estas cosas pueden constituir motivadores poderosos de las necesidades de protección en lo concerniente al empleo a todos los niveles, desde el operario hasta el vicepresidente.

Necesidades Sociales

Cuando están satisfechas las necesidades fisiológicas del hombre, y éste no tiene ya temores respecto a su bienestar físico, sus necesidades sociales se constituyen en motivadores importantes de su conducta: necesidades de pertenecer, de asociación de ser aceptado por los demás, de dar y recibir amistad y amor.

La Dirección empresarial sabe hoy de la existencia de estas necesidades, pero suele suponer, muy erróneamente, que constituyen una amenaza para la organización. Muchos estudios han demostrado que un grupo de trabajo con cohesión, muy unidos, pueden ser, en las condiciones adecuadas, mucho más eficaces para alcanzar las metas de la organización, que igual cantidad de individuos independientes, (SINERGIA).

Sin embargo, la Dirección empresarial suele esforzarse mucho para controlar y dirigir al hombre de forma que destruya la tendencia grupal de éste, ya que teme la hostilidad de grupo hacia sus objetivos. El hombre tiende a perjudicar los objetivos de las organizaciones, cuando se frustran de esa manera sus necesidades sociales – y tal vez también las de protección-. Se vuelve negativo, antagónico, no coopera. Pero este comportamiento es una consecuencia, no una causa.

Necesidades del yo

Por encima de las necesidades sociales – en el sentido de que no se vuelven motivadoras hasta cuando las necesidades inferiores se encuentren razonablemente satisfechas-, están las de mayor significación para la administración empresarial y para el hombre mismo. Se trata de las necesidades del yo, que son de dos clases:

a.- Aquellas necesidades vinculadas con la autoestimula: de confianza en sí mismo, de independencia, de realización de competencia, de conocimientos.

b.- Aquellas necesidades vinculadas con la propia reputación: de status, de reconocimiento, de aprecio, de merecido respeto por parte de los congéneres.

A diferencia de las necesidades inferiores, éstas no se satisfacen nunca; el hombre busca interminablemente una mayor satisfacción

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