Trabajo practico Las ruinas circulares y una flor amarilla.

Trabajo practico Las ruinas circulares y una flor amarilla

1-

1. Se da cuenta que todas las personas son inmortales debido a que la vida de cada uno, junto con sus acciones, sus éxitos, fracasos y las cualidades de cada uno, se van traspasando infinitamente de persona a persona a lo largo del tiempo, heredando el mismo destino que la persona anterior.
2. Contó que en un autobús de la línea 95 había visto a un chico de unos trece años, y que al rato de mirarlo descubrió que el chico se parecía mucho a él, por lo menos se parecía al recuerdo que guardaba de sí mismo a esa edad.
3. El del perfume
4. Por la dificultad que tienen los desconocidos para poder ser invitados a ellos.
5. Al principio piensa que al haber matado a Luc terminaría con la línea de fracasos en su vida, una que según él no tenía sentido que se siguiera repitiendo, pero al haberse encontrado con la flor amarilla, se da cuenta de que él era el único mortal entre las personas.

2-

“Las ruinas circulares” y “La flor amarilla”

A lo largo de ambas historias el tema principal que se puede destacar es el despertar que sufren los personajes en cada una de ellas. Ambos personajes, sin tener la intención de hacerlo, desencadenan un despertar que provoca que sus realidades sufran un cambio completo de paradigma, mediante el cual los personajes se dan cuenta que la vida que pensaban estaban viviendo no tenía el sentido que ellos creían.

En el cuento de Las ruinas circulares, si bien el punto de vista narrativo del cuento es omnisciente, es decir que está narrado en 3ºra persona, el narrador no explica detalles del tiempo, espacio ni del protagonista. El personaje principal, el soñador, no tiene nombre ni descripción física y lo único que se sabe de él es cuál es su objetivo (soñar a otro hombre), que es un mago, taciturno y que viene del Sur. También se puede apreciar que la mayoría de descripciones en este cuento son poco definidas o parecen metafóricas.

Cuando se analiza el texto, se puede denotar en varias ocasiones las diferentes alusiones a la circularidad de las cosas, la imagen del círculo representa lo que pasa en esta historia ya que no comienza ni termina y habla de un tiempo y espacio infinitos, como por ejemplo “El forastero se soñaba en el centro de un anfiteatro circular”. Otra vinculación que se puede ver es que en ese templo se rendía culto al dios del fuego, quien accede a ayudar al hombre a darle vida a su creación “mágicamente animaría al fantasma soñado, de suerte que todas las criaturas, excepto el Fuego mismo y el soñador, lo pensaran un hombre de carne y hueso”. En este caso el fuego también puede verse como una forma de renovación, purificación o renacimiento (nuevamente, otra referencia a la circularidad del tiempo, que se renueva una y otra vez).

El tema central del texto es la confusión del límite entre realidad y sueño, ya que el hombre soñado se convierte en una persona con vida al igual que él y al final de la historia el soñador descubre que él también es soñado. Esto es una cadena infinita que no tiene principio ni fin.

Algo a destacar en el cuento de Borges es que, en el mismo, aunque el protagonista logra darse cuenta de la verdad, no logra romperse la circularidad del tiempo.

En la historia de Cortázar, un hombre que encuentra a un chico en la línea 95 del autobús, tiene la certeza de que la voz de él era igual que la suya en su infancia, de que aquel chico tenía los mismos defectos y características que él, que tenían muchas coincidencias visibles.

El hombre encuentra tantas similitudes suyas en el chico, no solo físicas sino de experiencias de vida y secuencias análogas en los hechos ocurridos en las vidas de cada uno que llega a tener la certeza de que aquel chico era él y que viviría una vida igual a la que había vivido el “Luc no solamente era yo otra vez, sino que iba a ser como yo, como este pobre infeliz que le habla”.

El hombre llega a la conclusión de que todos somos inmortales, según su convicción de que su vida tenía continuidad a través de Luc y como no soportaba la idea de que exista como él y que después habría más como el que vivan la misma vida y soportar su misma miseria, el hombre decide matar a Luc, creyendo que así nadie más tendría que cargar con el peso de su vida imbécil, pero luego se da cuenta después de matar a Luc que representaba la continuidad del narrador, éste se da cuenta, al ver una flor amarilla, de que acababa de romper la cadena:
"De golpe comprendí la nada, eso que habría creído la paz, el término de la cadena. Yo me iba a morir y Luc ya estaba muerto, no había nunca más una flor para alguien como nosotros, no habría nada, no habría absolutamente nada, y la nada era eso, que nunca hubiera nunca más una flor."

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