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Violencia De Genero


Enviado por   •  9 de Noviembre de 2012  •  6.062 Palabras (25 Páginas)  •  390 Visitas

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SOBRE LA DENOMINADA “VIOLENCIA DE GÉNERO” EN MÉXICO:

ESPECIAL REFERENCIA AL CASO DE CIUDAD JUÁREZ

ROGELIO BARBA ÁLVAREZ

Doctor en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y

Profesor Investigador del CUCI, Universidad de Guadalajara

ROBERTO A. OCHOA ROMERO

Doctor en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y

Profesor Investigador Titular de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo

SUMARIO: I. Introducción; II. Homicidio; III. Violación; IV. Conjugación entre homicidio y violación; V. El caso de Ciudad Juárez; VI. Discriminación y violencia; VII. Los derechos humanos de la mujer. Su protección; VIII. El grave problema de la reparación del daño en los delitos de violencia de género; IX. Perspectiva criminológica; X. Prevención sobre la persona del delincuente; XI. Conclusión: La profilaxis propia de la prevención del delito.

I.- INTRODUCCIÓN

La violencia, -fenómeno social de consecuencias criminalmente relevantes por lo general-, ha presentado evidentes tendencias a la alza en los últimos años. Dicha tendencia, no obstante, no es exclusiva de la sociedad mexicana, sino que se presenta abiertamente en otros países de nuestro entorno continental y, en general, en otros países de idéntica tradición jurídica . Sin embargo, la parte más preocupante de este fenómeno socio-económico-jurídico, es justamente aquél tipo de violencia que constituye y representa la inexorable comisión de uno o varios delitos en contra de ciertos colectivos especialmente vulnerables y requeridos de especial protección.

En este sentido, evidencia una especial importancia por su frecuente ejercicio, la hoy denominada violencia de género .

Se ha denominado violencia de género a aquél fenómeno criminoso que se dirige, fundamentalmente, en contra el colectivo femenino de nuestro país, aunque, debemos advertir, que el término puede válidamente encontrar aplicación en ambas acepciones de género.

La novedosa y por cierto no poco discutida Ley General de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia , entiende que hay violencia hacia las mujeres al aparecer cualquier acción u omisión, directamente relacionada con su género, que cause daño o sufrimiento psicológico, físico, patrimonial económico, sexual o incluso la muerte tanto en el ámbito privado como en el público.

Por su parte, en términos similares la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido la violencia contra la mujer como cualquier acción o conducta basada en su género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como en el privado .

Pero al margen de su concepto y de las coincidencias más o menos claras entre la legislación nacional y la perspectiva internacional, resulta indiscutible que este tipo de violencia genera muy particulares afectaciones en los planos físico y psicológico. Entre estas afectaciones cobra especial relevancia el llamado síndrome de la mujer maltratada, que sucede a las agresiones sufridas por la mujer como consecuencia de las condiciones socioculturales que se colocan, e indebidamente diferencian, al género masculino y femenino, situando a éste último, inexplicablemente, en una posición de subordinación con respecto al primero. Tales condiciones se presentan fundamentalmente en los tres ámbitos básicos de la relación de la persona: el maltrato en el seno de las relaciones de pareja y la familia , agresión sexual en la vida social y acoso en el medio laboral .

El síndrome aludido se define como una situación de hecho, -aflictiva en general-, condicionada por la realización de una serie de conductas agresivas contra la mujer, en las que la violencia se desarrolla bajo las ya señaladas circunstancias, persiguiendo determinados objetivos y con la potencialidad propia de una serie de factores que operan bajo comunes denominadores .

En estas condiciones, la violencia de género en México se erige como un medio a través del cual se comenten serios y por demás cobardes delitos, de manera muy frecuente y sistemática, contra un sector mayoritario y generalmente endeble de la población representado por las mujeres . Ya no sólo en Ciudad Juárez, Chihuahua, y en el desierto fronterizo aparecen cadáveres o se suman a la fría estadística más y más delitos sexuales cometidos contra familiares de mujeres desaparecidas y defensoras de los derechos humanos, en distintas partes del país se multiplican de manera sorprendente estos crímenes. Entre tales casos, aparecen con penosa celebridad los Estados de Chihuahua, México y Oaxaca.

Como vemos, la violencia contra la mujer y sus consecuencias nefastas se multiplican día con día y, muy lamentablemente, -si es que lo lamentable puede ser todavía superlativo en este caso-, ha dejado de ser un fenómeno, -como en principio se ha dicho-, propio de colectivos sociales poco culturizados y económicamente desprotegidos , para engarzarse en todos y cada uno de los estratos sociales . En este sentido, hemos sido testigos de innumerables y verdaderas atrocidades cometidas contra mujeres, que en la mayoría de los casos implican la comisión, como ya dijimos, de diversos delitos dentro de los que destacan, por su gravísima lesión a los bienes jurídicos en ellos tutelados, el homicidio y la violación .

En efecto, son tales delitos los que gravemente vulneran, lesionan, desintegran y en definitiva pulverizan, ciertos bienes jurídicos de fundamental importancia para cualquier individuo pero, como resulta evidente, su vulneración y consecuencias se agudizan en el caso de las mujeres. Ellas representan un colectivo ampliamente vulnerable que, -a pesar de tantos esfuerzos-, sigue siendo blanco de diversas conductas delictivas, completamente execrables por lo demás, pero que más allá de ello las colocan en una penosa situación de aislamiento y desamparo social.

Por tanto, en régimen de coherencia a continuación se analizan fenomenológicamente los señalados delitos, colocando en orden de prelación al homicidio por considerarlo el delito cuya comisión convierte en irrelevante el análisis o estudio de cualquier otra figura criminal.

II.- HOMICIDIO

La voz Homicidio significa “privación de la vida de un ser humano por la acción de otro”. Su origen etimológico, homicidium, proviene de las voces latinas hominis caedes

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