El desarrollo psicoevolutivo

Cognitivo y socioemocional Cuidado en Países en Desarrollo

Marc H. Bornstein y Diane L. Putnick

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Resumen

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Cognitivo y socioemocional Cuidado en Países en Desarrollo

Parenting

Ser padre es un trabajo cuyo principal objeto de la atención y la acción son los niños humanos sanos a los niños no lo hacen y no pueden crecer sin cuidadores competentes. Más allá de la supervivencia de sus hijos, los padres están fundamentalmente invertidos en educación y socialización de sus hijos en sentido amplio. La primera infancia es el momento en que primero dar sentido al mundo físico, forjamos nuestros primeros vínculos sociales, y primero aprendemos a expresar y leer las emociones humanas básicas. Normalmente, es los padres que llevan a los niños a través de estas primicias de desarrollo. Por lo tanto, las cogniciones y las prácticas del cuidador contribuyen de manera importante al desarrollo y el resultado del desarrollo del niño (Bornstein, 2002 , 2006 ; Collins, Maccoby, Steinberg, Hetherington, y Bornstein, 2001 ). Los padres a veces actúan en sus intuiciones acerca de los cuidados; por ejemplo, los padres casi todas partes hablan a sus hijos a pesar de que saben que los bebés no pueden entender el lenguaje. Sin embargo, los seres humanos también adquieren el conocimiento de lo que significa para los padres, y los medios de comunicación, y las imágenes generacionales, sociales de los cuidados, los niños y la vida familiar juegan un papel importante en ayudar a las personas a formular sus cogniciones de cuidado y guían sus prácticas de cuidado ( Bornstein y Lansford, 2009 ). Por estas razones, los padres de diferentes lugares varían en su cuidado.

Crianza y Sociedad

Más específicamente, el papel de los padres es educar y socializar a los niños en formas que sean apropiadas a su etapa de infancia y preparar a los niños para adaptarse a una amplia gama de funciones de la vida y contextos que ocuparán a medida que crecen. Todas las sociedades prescriben ciertas características esperadas de sus miembros y proscriben ciertos otros si sus ciudadanos son para funcionar adecuadamente (Harkness y Súper, 2002 ). Algunas prescripciones y proscripciones son esencialmente universal, como la exigencia de los padres para nutrir y proteger a sus crías. Otros varía en los grupos: Por ejemplo, los padres en algunas sociedades juegan con sus hijos y ver a los niños como socios interactivos, mientras que los padres en otras sociedades piensan que el juego de adultos con niños pequeños no entra en su descripción de trabajo ( Bornstein, 2007 ).

Por lo tanto, la prestación de cuidados desde muy temprano en la vida varía en función de opiniones sobre la importancia de las competencias específicas para la adaptación exitosa de los niños, las edades que se espera que los niños alcanzan los hitos del desarrollo, cuándo y cómo cuidar a los niños, y así sucesivamente (Bornstein y Lansford, 2009 ). De hecho, las creencias socialmente construidas son tan poderosas que los padres a veces actúan en ellos más que en lo que sus sentidos les dicen acerca de sus propios hijos ( Ochs, 1988 ). Una investigación de los horarios de desarrollo en madres australianos de ascendencia australiana y libanesa reveló que los orígenes nacionales formados expectativas de las madres de los niños y sus comportamientos de enseñanza más de género, orden de nacimiento, o clase socioeconómica ( Goodnow, Cashmore, de algodón, y Knight, 1984 ).

Cuidado tiene beneficios, así como los costes para la descendencia. Cuidado positivo en términos de educación y socialización promueve competencias cognitivas y sociales de los niños y mejora el éxito en la gestión de sus vidas. Sin embargo, el cuidado comprometido pone en peligro el desarrollo óptimo del niño, sobre todo entre los padres que carecen de los recursos, el conocimiento, la inversión, o competencias para criar a sus pequeños con el fin de aumentar el bien individual y común ( Bugental y Grusec, 2006 ).

La variación de la sociedad en las creencias y comportamientos es siempre impresionante, si observa entre los diferentes grupos étnicos en una nación o en todas las naciones en diferentes partes del mundo. Una crítica predominante de la ciencia del desarrollo es, sin embargo, que la investigación ha tendido a describir la crianza y desarrollo infantil que de acuerdo con los ideales sobre todo o exclusivamente adecuadas para occidental, educados, industrializados, y las sociedades desarrolladas ricos ( Bornstein, 1980 , 2002 ;Henrich, Heine , y Norenzayan, 2010 ). Sin embargo, la configuración regional penetrante influye en cómo los padres ven la crianza y la forma en que los padres ( Bornstein y Lansford, 2009 ). La medida para abarcar una comprensión más amplia de los cuidados ha dado lugar a una serie de preguntas importantes ( Bornstein, 2001 ), entre ellos, ¿cómo los cuidados varían en todo el mundo y especialmente en el mundo en desarrollo?Este estudio aborda esta cuestión mediante la Encuesta de indicadores múltiples (MICS), una encuesta de hogares representativa a nivel nacional e internacional comparable de los países en desarrollo en diferentes regiones del mundo ( UNICEF, 2006 ). El MICS ofrece una fuente única de información para examinar los factores protectores y de riesgo para la salud infantil, la nutrición, la educación, el desarrollo y el bienestar.

Dos dominios del Cuidado Positivo: cognitivo y socioemocional

Cuidado se instancia en cogniciones y prácticas. Cuidado también es multidimensional, modular y específica (ver Bornstein, 2006 ). En esta investigación, hemos adoptado una etic enfoque ( Jahoda, 1977 ) para el estudio internacional del cuidado de niños. Nos hemos centrado en los componentes de la crianza cognitivo y socio-emocional, ya que son prominentes, vivo, y enriquecer las responsabilidades del cuidado de que también se esperaría que varían a nivel mundial. A partir de la infancia, los niños aprenden sobre el mundo físico a través de las interacciones cognitivas, y los niños están motivados para conectar con otros a través de interacciones socioemocionales. Muchos investigadores tienen dominios de cuidado cognitivo y socioemocional operacionalmente distinguidos (por ejemplo, Bornstein, 2006 ). Estos dos grandes tipos de cuidado son relativamente independientes entre sí y desarrollo significativo porque se refieren a las competencias comunicativas, mentales, emocionales y sociales de los niños ( National Research Council, 2000 ; . Walker et al, 2007 ). Por ejemplo, las interacciones cognitivas madre-hijo predecir el desarrollo mental y verbal en los niños (por ejemplo, Bornstein, 1985 ; Olson, Bates, y Bayles, 1984 ), y las madres que están más socioemotionally sensibles a sus hijos promueven competencias interpersonales de los niños (por ejemplo,  ). Estas dos modalidades no sólo sientan las bases para el desarrollo futuro, que son universales (en el sentido de que son comunes), aunque varían en forma y el grado en el que se forman por la experiencia y la influencia de la cultura ( Greenfield, Suzuki, y Rothstein-Fisch, 2006 ;  ).

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