Treas Grandes De Colombia

Jesús Guerrero Hernández:

Siempre fue un hombre con emprendimiento, pues desde niño ideaba pequeños negocios que le dejaban algo de ganancia. Llegó a Bogotá en 1979 para reemplazar a uno de sus hermanos en una empresa de transporte como mensajero y cobrador. Ganaba 850 pesos, la mitad de un sueldo mínimo de la época. Después de haber trabajo durante tres años en la empresa de transporte de carga y llegar a ganar un sueldo mensual de $4.500, se retiró pues noto que la empresa no tenía ningún crecimiento. Su liquidación fueron 32 mil pesos, los cuales Invirtió en cinco vestidos de paño y corbatas, y el dinero restante fue el capital inicial para Servientrega, primer recurso financiero para la empresa. La primera sede de Servientrega fue en su casa paterna, en el barrio Veraguas, de Bogotá, el Recurso físico en donde se realizará la actividad económica.

El 22 de marzo de 1982, junto con su hermana Luz Mary, Jesús Guerrero crea oficialmente Servientrega. Pues cuando eran empleados de la empresa de transporte de carga, detectaron la oportunidad de incursionar con soluciones que mejoraran los niveles de servicios para la categoría de documentos y paquetes. En la mañana se vestía como ejecutivo y visitaba a sus clientes con unas tarjetas de presentación y en la tarde, se ponía un saco cualquiera para ir a recoger los paquetes que había negociado temprano. Inicialmente él era el único empleado de Servientrega, vemos que hubo la necesidad de contratar personal dentro de la nueva empresa se evidencia la necesidad del recurso humano. Por lo tanto Jesús Guerrero tres días después, contrató a un mensajero en el puerto de Buenaventura.

Servientrega inicia sus operaciones con tres envíos diarios bajo la modalidad de “entregas las 24 horas”, entre las ciudades de Bogotá, Cali y Buenaventura, para este fin utilizaron empresas de transporte de pasajeros intermunicipales. En esta primera fase, Los socios fundadores supervisaban personalmente la operación para que las misivas y encomiendas llegaran a su destino sin inconvenientes y en forma oportuna. Gracias a la calidad del servicio y a la confianza de los clientes rápidamente, la operación se expandió a las ciudades de Medellín, Barranquilla, Pereira, Cartagena, Santa Marta, Valledupar, Montería y Cúcuta.

Entre 1988 y 1992 el interés de los socios por generar un impacto de la marca crece e impusieron el lema Servientrega… ¡es entrega segura! es llevada a la radio y medio escritos, como estrategia de publicidad e impacto de la marca.

En 1990 Servientrega siendo líder en el sector, con amplias oportunidades en el mercado internacional se crea Servientrega Worlwide que incursiono en los mercados de Estados Unidos, Venezuela y Ecuador. Con la implementación del servicio internacional y con la llegada de competidores de otros países, Servientrega lanza la campaña en radio y medios escritos “que nuestro nombre no sea en ingles no importa” lo que se constituiría en uno de los medios de persuasión del mercado para utilizar este servicio.

En 1997 con el crecimiento de la empresa se amplió el equipo de profesionales con una estructura organizacional plana no jerarquizada. Se inaugura en el aeropuerto internacional el dorado de Bogotá el Centro Internacional de Logística.

Cumplidos los quince años Servientrega como pionera en la creación e innovación de servicios y la cobertura más amplia del país, incursiona en la televisión con los primeros comerciales bajo el concepto “hemos creado una cultura” y “más de mil puntos”. Para soportar la creación de otros servicios como Documentos Masivos, Valores y Hoy Mismo se diseñan las estrategias “Servientrega más servicio” y Nadie entrega tanto a los Colombianos como Servientrega”.

Más adelante bajo la estrategia de integración Servientrega se estructura en dos frentes: Integración interna, con el propósito de optimizar los recursos físicos, tecnológicos, los procesos y la productividad del talento humano se crean los “CGC” Centro de Gestión Corporativa. Y la Integración Externa, integrando múltiples servicios al mercado “centro de soluciones” ofreciendo soluciones en transporte aéreo y terrestre, almacenamiento, pick & pack, distribución y medios de pago.

Podemos observar que Jesús Guerrero Hernández empezó con un pequeño capital y a medida que fue creciendo la empresa y a medida que llegaban nuevos socios aumentaba el capital, hasta que hoy en día, cuenta con más de 2500 vehículos entre furgones, camiones y mulas, cuenta con tres aviones de carga y con más de 2000 puntos, más de 22 mil colaboradores a nivel internacional, entre los que se cuentan sus 10.750 empleados en Colombia y los restantes en Ecuador, Venezuela, Estados unidos y panamá.

Ernesto Mejía Amaya:

Nació en Santander, luego su familia lo llevo a vivir a Bogotá, después a Argentina, para radicarse en finalmente en Cali. En su estadía en Argentina durante aproximadamente seis años Ernesto Mejía aprendió todo sobre la reparación de baterías, pues el estudio siempre fue un factor fundamental para él. Durante los primeros años de su permanencia en Cali, Ernesto Mejía trabajo en una Distribuidora de baterías desempeñándose como reparador, allí se destacó porque realmente conocía sobre reconstrucción de baterías.

La idea de negocio surgió después de un fuerte accidente de tránsito que lesionó gravemente a Ernesto Mejía, después de su recuperación tuvo la firme intención de que, en cuanto estuviera apto para continuar trabajando, buscaría la forma de independizarse. Sin embargo no sabía exactamente cómo hacerlo pues en ese momento carencia de recursos económicos requeridos para la ejecución de alguna actividad. No podía solicitar créditos, porque apenas llevaba un año viviendo en Cali, tampoco tenía amigos con suficiencia económica que pudieran servirle de fiadores, ni haberes para respaldar una deuda. Por tal razón Ernesto Mejía decide comprarle a su jefe de la empresa de distribución de baterías un pequeño taller de reparación que no había tenido buenos resultados, pero que poseía algunos implementos útiles para la reparación de baterías, se lo compro por

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