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Apendicitis


Enviado por   •  6 de Abril de 2014  •  3.444 Palabras (14 Páginas)  •  233 Visitas

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Síntomas:

Dolor:

Es el síntoma más característico de la enfermedad. Existe en todos los pacientes con apendicitis, salvo en quienes padecen de mielitis transversa o trastornos semejantes. (5)

Dolor típico:

Inicialmente suele ser un dolor abdominal difuso que se percibe en el epigastrio o en la región periumbilical, no muy intenso y de origen visceral. Puede acompañarse de náuseas y vómitos. A veces adquiere carácter cólico. Surge como causa de una distensión del órgano, asociado con movimientos de peristalsis cuyo estímulo es llevado sobre las fibras aferentes viscerales. Después de una a cuatro horas de iniciado este dolor, se fijará en la fosa iliaca derecha donde se hace constante y estable, por la participación en el proceso del peritoneo parietal que entra en contacto con el apéndice inflamado. Esta sucesión clásica de la aparición del dolor, se encuentra en el 55% de los pacientes con apendicitis y se define como "dolor típico". (1, 6, 7)

Cuando el apéndice ocupa su posición normal, el dolor se localiza con su máxima intensidad en el llamado punto de McBurney, situado en la unión del tercio medio con el tercio externo de una línea trazada del ombligo a la espina iliaca anterosuperior, o en el punto de Lanz, situado en la unión del tercio derecho con el tercio medio de una línea trazada entre las dos espinas iliacas anterosuperiores. (7, 8)

Dolor atípico

El "dolor abdominal atípico" es aquel que no sigue la sucesión clásica de tipo visceral y somático, y se presenta en el 45% de los pacientes en los que se presenta la apendicitis. El dolor puede ser totalmente somático, a menudo bien localizado en el cuadrante inferior derecho desde el principio. A la inversa, puede que nunca se localice y siga siendo difuso durante toda la evolución preoperatoria de la apendicitis aguda. Se encuentra dolor atípico más a menudo, en pacientes viejos en los que el dolor siempre es menos intenso y se localiza en fosa iliaca derecha mucho más tarde. También presentan en muchas ocasiones dolor atípico, los pacientes que reciben antibiótico por largo tiempo por algún problema que no tiene relación alguna con el trastorno principal. Shackelford plantea que cuando el paciente ha tenido una crisis previa de apendicitis, el dolor se inicia por la fosa iliaca derecha y que es mínimo en los pacientes vagotomizados. (9, 10)

Cualquier paciente con apéndice de localización anormal, tiende a tener antecedentes atípicos, sobre todo de dolor. El apéndice retrocecal muy alto no suele producir más que dolor difuso en el flanco derecho. Un apéndice inflamado que esté localizado dentro de la pelvis, nunca producirá dolor somático que afecte la pared abdominal anterior, sino, en su lugar, solo tenesmo vesical y malestar vago en la región suprapúbica. En los apéndices de localización subhepática, las molestias serán vesiculares.(11, 12)

Se dice que el dolor de la apendicitis aguda se alivia de inmediato después de la perforación y prosigue con intensidad disminuida durante un tiempo corto, "calma traidora de Dieulafoy", hasta que sobreviene el dolor característico de la peritonitis difusa. El alivio del dolor se atribuye a la disminución de la presión en el apéndice. De hecho, rara vez ocurre alivio del dolor después de la perforación. En la mayoría de los pacientes el dolor prosigue o aumenta la intensidad. Es característico que después de la perforación no esté localizado de manera tan precisa. Además, el paciente está claramente enfermo y comienza a aparecer distensión abdominal.(9, 13, 14)

En los varones, la apendicitis, aun sin perforación, produce algunas veces síntomas testiculares. Puede haber dolor en el testículo derecho, en el izquierdo o en los dos, o el paciente dice que el derecho estaba retraído en cierto período de la enfermedad. El dolor puede ser debido a irritación de los filamentos simpáticos que acompañan a la arteria espermática, pero es más probable que se trate de, un verdadero dolor apendicular referido al testículo, ya que los dos órganos parecen estar inervados por el 10° segmento dorsal. La causa de la retracción testicular pudiera ser la estimulación directa del nervio génitocrural.

Generalmente el paciente con una apendicitis aguda tiende a quedarse quieto ya que observa que con los movimientos, ejercicios o la tos, el dolor se exacerba. (8.9)

Anorexia:

La falta de apetito o la repugnancia por la comida puede ser considerada como un grado menor de la misma sensación y a menudo tiene el mismo valor para el diagnóstico. Toda persona que, estando antes sana, pierda de pronto el apetito y se queje de dolor abdominal debe ser cuidadosamente vigilada por si tuviera una apendicitis. (10)

Náuseas y vómitos:

Las náuseas, ocurren en 9 de cada 10 pacientes con apendicitis. Los vómitos son reflejos y son más variables que las náuseas. Los niños y los adolescentes vomitan a menudo. Quizás no haya vómitos en los pacientes ancianos. Los vómitos de la apendicitis no son persistentes ni prolongados y pueden ser alimentarios o biliosos. La mayoría de los pacientes vomitan una o dos veces. Los vómitos aparecen después de la iniciación del dolor. Si preceden al dolor, deberá ponerse en duda el diagnóstico. Se puede considerar como regla general importante la de que la intensidad y frecuencia de los vómitos al principio del ataque indican el grado de distensión del apéndice y, por consiguiente, el peligro inmediato de que se perfore.(1, 2, 15)

Constipación:

Las características de las evacuaciones tienen poco valor diagnóstico. La constipación puede verse en el 60% de los pacientes. Algunos señalan voluntariamente que la defecación les alivia el dolor.(2, 10)

Diarrea:

Aunque lo corriente es que el enfermo esté estreñido, hay muchos casos en que inmediatamente antes del ataque existe diarrea, sobre todo en niños pequeños y puede ser un signo confundente. (9, 11)

Fiebre:

En la apendicitis aguda la fiebre en sus comienzos es moderada alrededor de 370 a 38,50 C., tan es así que si la sintomatología comienza con fiebre de 390 a 400, algunos autores plantean que no es apendicitis aguda. Cuando ocurre la perforación, la temperatura se eleva por encima de los 38,50 C y se acompañara de escalofríos. Es de gran valor semiológico la diferencia de la temperatura rectal y axilar en más de 1º.(1, 2, 10)

Examen Físico:

En cuanto al examen físico general,

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