ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Composicion Osea y Muscular de la Pierna


Enviado por   •  22 de Noviembre de 2016  •  Ensayos  •  3.590 Palabras (15 Páginas)  •  574 Visitas

Página 1 de 15
  1. ANATOMIA DE LA PIERNA

1.1 COMPOSICIÓN ÓSEA DE LA PIERNA Y RODILLA:

La pierna es un complicado sistema de segmentos, uniones, y músculos que comprende nuestro miembro inferior. Aun así, en situaciones dinámicas como correr, saltar o brincar, nos movemos con mucha agilidad y sin parecer abrumados por la complicada tarea  de controlar nuestras piernas. Esto se debe a un cuidadoso arreglo y afinación de todas las propiedades de las cuales la estabilidad y la robustez emergen (2).

El esqueleto del miembro inferior puede dividirse en dos componentes funcionales la cintura pélvica y los huesos del miembro inferior. La cintura pélvica une al miembro inferior al esqueleto axial, con el sacro como parte común a ambas estructuras, como bien sabemos la cintura pélvica tiene funciones de dar protección y sostén, actúan sobre el abdomen, pelvis y el periné, así como en los miembros inferiores (4).

Estrictamente hablando de la pierna humana es considerada como el segmento comprendido entre la cadera y el tobillo; podemos mencionar la pierna está conformada por cuatro huesos en la sección superior el Fémur y la Rotula y en la sección inferior la Tibia y el Peroné.[pic 1]

Figura 1.1 Anatomía Clínica 2012

1.1.1 Fémur:

El Fémur es el hueso más largo y pesado del cuerpo y transmite el peso corporal desde el hueso coxal hacia la tibia cuando se está en bipedestación.  Su longitud es de una cuarta parte de la altura de la persona. Consta de un cuerpo (diáfisis) y dos extremos (epífisis) proximal y distal.

El extremo distal o epífisis distal del fémur está constituida por los dos cóndilos femorales, con forma redondeada. Entre ambos cóndilos existe la escotadura intercondilea que los separa por la parte posterior. En los lados de ambos cóndilos hay unos relieves óseos llamados epicondilos.

[pic 2]

Figura 1.2 Fémur. Netter 2012 Pag 523

1.1.2 Rotula:

Se sitúa en la parte anterior de la articulación de la rodilla, por delante de la tróclea femoral; es un hueso corto y grueso su principal función es la extensión de la rodilla. En la rótula se inserta el tendón de los cuádriceps. Desde la rótula a la tuberosidad anterior de la tibia va el tendón rotuliano (3).

1.1.3 Tibia:

La Tibia localizada en el lado anteromedial de la pierna, casi paralela a la fíbula; segundo hueso de mayor tamaño del cuerpo, se ensancha hacia fuera en ambos extremos, con el fin de dar una mayor superficie para la articulación y la transferencia del peso.  El extremo proximal se ensancha para formar los cóndilos medial y lateral, que sobresalen por encima del cuerpo medial, lateral y posteriormente, formando una cara articular superior, o meseta tibial, relativamente plana.

Esta meseta consta de dos caras articulares lisas (la medial, ligeramente cóncava, y la lateral, ligeramente convexa), que se articulan con los grandes cóndilos femorales. Las caras articulares están separadas por la eminencia intercondílea, formada por dos tubérculos intercondíleos (medial y lateral) flanqueados por áreas intercondíleas anterior y posterior, relativamente rugosas (4). Los meniscos son anillos de fibrocartílago con forma de cuña. El menisco externo es un poco cerrado mientras que el interno no es tan cerrado.

El cuerpo de la Tibia es más delgado en la unión de sus tercios medio y distal. El extremo distal de la Tibia es más pequeño que el proximal, ensanchándose solo medialmente, la expansión medial se extiende inferior al resto del cuerpo, formando el maléolo medial. La cara inferior del cuerpo y la cara lateral del maléolo medial se articulan con el talus y cubiertas por cartílago articular (4).

La cara anterolateral del cóndilo lateral de la tibia muestra un tubérculo tibial anterolateral (tubérculo de Gerdy), inferior a la cara articular, que sirve de inserción distal a un denso engrosamiento de la fascia que cubre la cara lateral del muslo, añadiendo estabilidad a la articulación de la rodilla. El cóndilo lateral también presenta una cara articular fibular posterolateralmente, en su parte inferior, para la cabeza de la fíbula.

La tuberosidad de la tibia, una elevación oval en la cara anterior de la tibia, se palpa fácilmente unos 5 cm distales con respecto al vértice de la rótula. La cara anteromedial de la tibia, subcutánea, también se palpa con facilidad. La piel que cubre esta superficie se mueve libremente. Los cóndilos de la tibia pueden palparse anteriormente a los lados del ligamento rotuliano, en especial cuando la rodilla está flexionada (5).

A diferencia del fémur, el cuerpo de la tibia muestra una disposición verdaderamente vertical dentro de la pierna, y presenta una sección transversal algo triangular. Tiene tres caras y bordes: medial, lateral/interóseo y posterior. [pic 3]

Figura 1.3 Tibia y Peroné. Netter 2012. Pag 547

1.1.4 Peroné o Fíbula: Se encuentra localizado al lado de la Tibia, con el cual está conectado por su parte superior e inferior. Su pequeño extremo superior está situado hacia la parte trasera y por debajo de la cabeza de la Tibia, excluido de la articulación de la rodilla; por otra parte en su extremo inferior se inclina un poco hacia adelante proyectándose por debajo de la Tibia formando la parte lateral de la articulación del tobillo (5).

La Fíbula actúa principalmente como lugar de inserción muscular, aunque también es importante para la estabilidad de la articulación talocrural. Los cuerpos de la tibia y la fíbula están conectados por una densa membrana interósea compuesta por potentes fibras ópticas que descienden de la tibia a la fíbula (4).

La cabeza de la fíbula sobresale a nivel de la parte superior de la tuberosidad de la tibia, ya que, semejante a una protuberancia redondeada, es subcutánea en la cara posterolateral de la rodilla. El cuello de la fíbula puede palparse inmediatamente distal a la parte lateral de la cabeza de la fíbula. Al hacerlo, puede provocarse una sensación algo desagradable a causa de la presencia de un nervio que pasa por ese punto.

El extremo distal aumenta de tamaño y se prolonga lateralmente e inferiormente, formando el maléolo lateral. Los maléolos constituyen las paredes laterales de un encaje rectangular (mortaja), que es el componente superior de la articulación talocrural, y en ellos se insertan los ligamentos que estabilizan la articulación. El maléolo lateral sobresale más y es más posterior que el maléolo medial, y se extiende aproximadamente 1 cm más distalmente.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (23.2 Kb)   pdf (443.1 Kb)   docx (302.6 Kb)  
Leer 14 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com