DESMISTIFICANDO A LA ESCRITURA: ¿CONTRIBUYE LA ESCRITURA, A LA MEMORIA Y A LAS OPERACIONES MENTALES SUPERIORES?

UNIVERSIDAD NACIONAL DE LA MATANZA

ESCUELA DE FORMACIÓN CONTINUA

LICENCIATURA EN GESTIÓN EDUCATIVA

DISCURSO CIENTÍFICO II

“DESMISTIFICANDO A LA ESCRITURA: ¿CONTRIBUYE LA ESCRITURA, A LA MEMORIA Y A LAS OPERACIONES MENTALES SUPERIORES?”

POR

CLAUDIA ESTHER BECCIA

BUENOS AIRES

7 DE JULIO DEL 2012

ÍNDICE

• Introducción……………………………………………………………pág. 4

• La escritura ¿debilitadora del pensamiento y propensión a la pasividad o tecnología que modela e impulsa la actividad intelectual?.............................................................................................pág. 4

• Un debate contextuado………………………………………………..pág. 7

• No es un mito, la escritura es innegablemente beneficiosa………….pág. 9

• Conclusión……………………………………………………………pág.12

Introducción

La escritura resulta ser parte del capital cultural heredado de nuestros antepasados. Su uso significa poder, al igual que la posesión de cualquier invención humana que enriquezca la vida del hombre. Sin embargo, y como toda novedad en la cultura, ha sido sometida a la crítica y a la reflexión acerca de la conveniencia de su uso para la existencia.

El análisis acerca de lo ventajoso o no de la escritura en la vida, pasó por distintos matices, siendo tema de reflexión desde diversas posturas e ideologías. Su conveniencia e influencia en el desarrollo de la memoria y de las operaciones mentales superiores, hoy vuelve a ser un tema de relevante discusión debido al avance tecnológico y las nuevas herramientas de comunicación, que en un contexto de globalización tienen gran auge, y amenazan con la extinción de la escritura tal como la conocemos.

Es la intención de este trabajo aportar a este amplio análisis una nueva mirada desde concepciones filosóficas y socioculturales, que permitan rescatar la reflexión de dos filósofos: Platón, filósofo del siglo IV antes de C, ubicado en los comienzos de la inclusión de la escritura como nuevo instrumento para trasmitir el pensamiento, y Ong, filósofo del siglo XX, contemporáneo, que se ha desenvuelto en un contexto de gran avance tecnológico y globalización.

Luego de analizar ambas posturas destacando sus divergencias y convergencias, nos proponemos, a modo de cierre, desarrollar una opinión personal acerca del tema, enriquecida con los aportes del antropólogo social Jack Goody.

La escritura ¿debilitadora del pensamiento y propensión a la pasividad o tecnología que modela e impulsa la actividad intelectual?

Para Platón la escritura no favorece a la memoria, ni a las operaciones mentales superiores. Los argumentos expuestos a través de Sócrates en el “Fedro”, hacen entender que Platón no solo encontraba a la escritura inconveniente sino improductiva para el hombre, y además pone de manifiesto la superioridad de la oralidad frente a la trasmisión escrita, en lo que refiere a la memoria y a las operaciones mentales superiores.

Platón expone en Fedro de manera explícita las ‘desventajas’ de la escritura respecto de la memoria. Primeramente señala que la escritura conduce al descuido de la memoria “…sólo producirá el olvido, pues le hará descuidar la memoria...” Sostiene de manera rotunda que la escritura no es “…un medio de cultivar la memoria, sino de despertar la reminiscencia…” de despertar el recuerdo, la representación mental de una situación, la evoca, pero no favorece al desarrollo de la capacidad memorística, más bien lo retrasa en tanto que el sujeto está confiado en el papel, en lo escrito “… y fiándose en ese extraño auxilio, dejarán a los caracteres materiales el cuidado de reproducir sus recuerdos cuando en el espíritu se hayan borrado.” Al tener lo escrito el sujeto está seguro, no tiene seguridad en su capacidad de retener, de atesorar lo aprendido, sino de lo que tiene copiado y por porfiado cae en el descuido de este recurso valioso que es la memoria. La escritura resulta ser, entonces, una muleta que invalida al hombre. Ese ser pensante capaz de memorizar y de razonar, de producir conocimiento, se vuelve inválido producto de la escritura a la que le confía lo que él mismo; por sus propios medios, puede hacer. La escritura invalida al objetivar el pensamiento y situarlo fuera del sujeto.

En segundo lugar, Platón habla de la escritura como la sombra de la ciencia, como “sombra” del razonamiento y del pensamiento que se crea en la cabeza del mismo sujeto “…y por dar a tus discípulos la ciencia, les das la sombra de ella.” La ciencia entendida como el conjunto de conocimientos sistemáticamente estructurados y susceptibles de ser articulados unos con otros, solo encuentran en la escritura un instrumento para reflejarse, pero que no deja de ser solo una silueta oscura y confusa para el que no conoce. Esta situación no produce sino más que “ignorante presuntuosos…”, seres que no desarrollan sus propias capacidades, sino que tienen contacto con la sombra, con el simple reflejo de la ciencia y creen que conocen por eso: “…Pues cuando hayan aprendido muchas cosas sin maestro, se creerán bastante sabios, no siendo en su mayoría unos ignorantes presuntuosos, insoportables en el comercio de la vida.” Al no poder mantener una relación retórica, ni poder argumentar y defender sus ideas situándose desde un lugar pasivo, la escritura no produce un conocimiento puro y genuino, no hay un desarrollo cognitivo, no provee al desarrollo de las operaciones mentales superiores tales como el razonamiento, el juicio, la abstracción, la concentración, la comprensión, la transformación, generalización y transferencia. Crea “ignorante”, crea personas que no es que tienen una “ausencia” de conocimiento (tiene contacto con la “sombra”) no es que hay un conocimiento nulo, sino se trata de una “carencia de” o de una “imperfección” respecto de un conocimiento adecuado y esto se debe a que la escritura provee un “aprender sin maestro”, propone un discurso “fijo” que no puede ser interpelado (al contrario de lo que ocurre en una conversación entre dos personas). Para Platón, el escrito, al no poder “defenderse” ni poder ser interrogado y obtener explicación del mismo, es solo “un medio de refrescar los recuerdos del que ya conoce el asunto que en él se trata…” por lo que no favorece el desarrollo de la inteligencia, de la comprensión, del pensamiento, esto solo se alcanzan en la relación interpersonal del discípulo y su maestro, en el ida y vuelta del pensamiento bien razonado que debe crear argumentación para ser sostenido y validado. Esta ida y vuelta es la que, para Paltón, provee el desarrollo de la mente, de las capacidades cognitivas del sujeto y de la memoria, en definitiva de las operaciones mentales superiores que permiten el conocimiento.

Para Walter Ong, por el contrario, la escritura favorece al desarrollo de la memoria y las operaciones mentales superiores dado que es una “…tecnología que ha modelado e impulsado la actividad intelectual del hombre...” Una grafía, dice Ong, “es algo más que un simple recurso para ayudar a la memoria…es la representación de un enunciado”, ese enunciado lleno de significado está codificado en símbolos, que para traducir, el hombre debe aprender las reglas explícitas y conscientes, y una vez internalizadas, la sola escritura despliega en el sujeto una serie de procesos inconscientes para determinar la composición escrita. Toda esta puesta en marcha a partir de la escritura promueve el desarrollo de la memoria y de los procesos mentales superiores.

En primer lugar, Ong, es claro al exponer su opinión frente al dilema y dice que: “El uso de la tecnología puede enriquecer la psique humana, desarrollar el espíritu, intensificar su vida interior” y dado que “… La escritura…” es una de las “…formas de tecnologizar la palabra…” la escritura enriquece la psiquis humana. No obstante el autor aclara que “…la inteligencia resulta inexorablemente reflexiva, de manera que incluso los instrumentos externos que utiliza para llevar a cabo sus operaciones, llegan a “interiorizarse”, o sea, a formar parte de su propio proceso reflexivo”, debido a haber interiorizado la escritura, “nos parece difícil considerarla una tecnología”. Sin embargo la escritura necesita de herramientas - así como toda tecnología – y de códigos y reglas, ideadas conscientemente, que rigen el sistema en que operan esos códigos. En este contexto de códigos y reglas, una grafía es comprensible para los seres humanos. La escritura expresa algo en tanto “afecta profundamente los procesos inconscientes que determinan la composición escrita una vez que se han aprendido las reglas explícitas y conscientes.” Por esto mismo, el valor de la escritura para el desarrollo de las operaciones mentales superiores y de la memorias es “inestimable y de hecho esencial para la realización de aptitudes humanas más plenas, interiores…” son “…transformaciones interiores de la conciencia…” que “pueden resultar estimulantes. La escritura da vigor a la conciencia.” Ong nos describe una dinámica interior que se pone en funcionamiento con la escritura y que enriquece las capacidades interiores del sujeto. La sistematización de la escritura favorece el desarrollo de la mente, provee mayor capacidad para la reflexión,

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