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Eutanasia - Medicina Legal


Enviado por   •  11 de Mayo de 2016  •  Tareas  •  2.249 Palabras (9 Páginas)  •  283 Visitas

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Medicina Legal

Tarea número 2

Alumno: Marcos A. González Iglesias

Código: 82521

Turno: Noche

Eutanasia

  1. Caso Tony Nicklinson

Análisis desde el punto de vista Ético:

Podemos observar en este caso que la voluntad del paciente era liberarse de su sufrimiento, su estado era irreversible pero no asociado a la cercanía de la muerte.

Lo que vemos fuertemente aquí es la manifestación de la senda utilitarista que cada vez más incrustada en la sociedad y por ende en la ideología de las personas, causando un desinterés en lo que realmente necesita la persona,  que es eliminar o paliar el sufrimiento tanto físico como moral,  en la primera con los avances de la ciencia es muy posible con correctos tratamientos y proporcionados al dolor,  en la segunda también entre en juego el papel de las personas que rodean al paciente, detrás de ese pedido de eutanasia puede estar el no ser más una carga, una molestia para la vida los familiares, seres cercanos, que incluso la decisión puede ser influencia por estos mismos. Porque nadie quiere morir, lo que quiere el enfermo que pide la eutanasia es dejar de sufrir o no ser una carga para otros.

Muchos psiquiatras opinan que los enfermos que piden la eutanasia suelen hacerlo en estado depresivo, en los que no se deben tomar decisiones importantes.

Si se le da un buen tratamiento para paliar el dolor y se encuentro querido y bien atendido, no desearía morir, porque el dolor humano exige amor y participación solidaria todos y especialmente de los más cercanos.  

Y me encuentro en total desacuerdo con la expresión del mal menor que se fundamentaría en la virtud de la compasión y en el cumplimiento del fin de la medicina de proporcionar al paciente una muerte en paz. Ya que el médico siempre está llamado a sostener la vida y a curar el dolor,  y jamás a dar muerte “ni siquiera movido por la apremiantes solicitudes de cualquiera” Juramento de Hipócrates.  

Hay que eliminar el sufrimiento, pero no al ser humano que sufre.  

Análisis desde el punto de vista Religioso:

Para la religión la vida es un regalo, es un don de Dios, y solo Él puede disponer de ella. Desde este concepto la eutanasia está en total contradicción a la ley de Dios, que es el quinto mandamiento, “no matar”  San Juan Pablo II expresa en su Encíclica Evangelium vitae: «La eutanasia es una grave violación de la Ley de Dios».

Anticipar la muerte, en el caso de Tony, por insoportable que parezca la vida, es otorgarse un derecho que sólo a Dios pertenece.  

Y esto aun cuando el enfermo consienta y lo solicite vivamente, porque ni siquiera él  puede  conferir  un  derecho  que  tampoco  posee,  ya  que  no  es  dueño  ni propietario de su cuerpo y de su existencia. No   somos   propietarios   de   nuestra   vida,   pues   no   la   hemos conquistado  nosotros,  sino  que  la  hemos  recibido  de  Dios,  por  medio  de nuestros padres, cuando Él así lo dispuso.

Para  el Cristianismo el  dolor  tiene  un  valor redentor. Ya que Cristo nos salvó con el sufrimiento.  El  dolor  unido  a  la  pasión  de  Cristo  Redentor  lo  sublima  y ennoblece. Morir  con  dignidad  no  es  precisamente  morir  sin  dolores,  sino aceptando la muerte, cuando y como Dios disponga.

No hay muerte más digna ni más dichosa que la recibida en estado de gracia y en paz con Dios.

Análisis desde el punto de vista Jurídico:

Hemos visto que para las legislaciones del mundo de aquellos países que permiten legalmente la eutanasia en este caso de Tony no reúne ni siquiera los requisitos para efectuarla, como es la condición estar en cercanía de la muerte, pero vemos que sí reúne el requisito de estar en una condición irreversible.

Analizando desde punto de vista jurídico tampoco  sería admisible aunque se reúnan las dos condiciones puesto que  «El  derecho  a  la  vida  es  el  primero  de  los  derechos  del  ser humano» en el cual se fundamenta todos los demás derechos.

La eutanasia no se puede permitir desde ningún punto de vista, ni siquiera el jurídico.

Lo  mismo  que  es  inaceptable  legalizar  que  una  persona  quiera  ser esclava de otra, es inaceptable legalizar que una persona pida a otra que la mate. El quitarse la vida es peor que ser esclavo. Además, si se legaliza que un enfermo pueda pedir la muerte, ¿por qué no va a tener el mismo derecho un sano cansado de vivir?

El Principio de autonomía personal

Vemos que Tony ha tomado una decisión propia sobre su vida, pidiendo la eutanasia, su deseo de morir, para liberarse de su sufrimiento.

Pero el principio de la autonomía personal tiene como primer presupuesto el hecho de estar vivos y exige la responsabilidad del individuo, que es libre para hacer el bien según la verdad; suprimir la vida significa destruir las raíces mismas de la libertad y de la autonomía de la persona, por consiguiente podemos decir que este principio no puede ser utilizado de ninguna manera para justificar la supresión de la vida propia o ajena.

Elección de morir por parte de quien se encuentra en una situación de enfermedad terminal o graves sufrimientos.

Está elección de morir por parte de la persona en esta situación, por más que se diga que es de manera ciertamente personal nunca tendremos la plena certeza que es así, ya que puede ser influenciado y empujado a esta decisión por diversos factores las cuales ya estuvimos presentando en los análisis anteriores .

  1. Caso Eluana Englaro

Análisis desde el punto de vista Ético:

Éticamente la actuación de interrumpir la alimentación e hidratación aunque fuera de forma artificial de Eluana no es correcto, porque estos son cuidados ordinarios que se provee al paciente, y esto atenta al derecho a la vida y a la dignidad de la persona, ya que se ha posibilitado en que muera antes de lo que el transcurrir natural de su enfermedad determine.

Desde el punto de vista religioso

Desde el punto de vista religioso, este caso concreto no es admisible desde ningún sentido, ya que atenta directamente contra la vida misma que es el Don más preciado e importante dado por el Creador a las criaturas; la doctrina  de la Iglesia expresa que: No  es  lícita  la  acción  que  por  su  naturaleza  provoca  directa  o intencionalmente la muerte de un paciente.

Desde el punto de Vista Jurídico

No se puede dar el permiso legal a las personas, a eliminar una vida ya que es el primer derecho de todos,   nadie tiene la facultad de decidir o provocar la muerte de una persona. El Estado no puede atribuirse el derecho de legalizar la eutanasia, pues  la  vida  del  inocente  es  un  bien  que  supera  el  poder  de  disposición, tanto del individuo como del Estado.

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