IMPORTANCIA DE LA COMPLEJIDAD EN EL ABORDAJE DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

La sociedad actual está inmersa en una vasta variedad de problemáticas ambientales que en el trascurrir de la humanidad se han ido sumando unas a otras, haciéndolas en muchos de los casos tan complejas que se hace muy difícil la vía del cómo enfrentarlas; unas porque existe un engranaje burocrático que impide el avance hacia una solución viable y otras porque subyacen intereses particulares tan poderosos que cuartan el buen logro de la solución. Lo cierto de todo esto, es que algo que parecía tan insignificante y sin grandes consecuencias, ha crecido a tal grado que sus repercusiones, en la actualidad, son de índole catastróficas.

¿Cómo enfrentar lo anterior?, ¿Cómo hacerle saber a la sociedad que tome cartas en el asunto en algo que está a la vista, pero que no lo ve o no lo quiere ver?, ¿Cómo despertar la conciencia de esta sociedad que camina indolente pisando la consecuencia de sus propios actos?

De unos pocos años hacia atrás, en México, se han hecho intentos de voltear a ver el problema ambiental, problema que ha ido creciendo de manera exponencial, ¿De qué forma?: El crecimiento desmedido de las grandes urbes y por ende sus consecuencias, la tala inmoderada de grandes extensiones de bosques, el vertedero de aguas negras a los causes de los ríos, la creación de fábricas sin una supervisión ecológica, la tira o quema de basura, esto por citar algunos, porque la lista es mayúscula.

La gran disyuntiva es ¿Cómo hacer que el pueblo mexicano empiece a actuar en la solución a esta gran problemática?, y ¿Cómo sembrar conciencia en las futuras generaciones de la herencia ambiental que se les está legado?. Para lo anterior habrá, a esté pueblo, que educarlo e inmiscuirlo en una cultura altamente ambientalista; empresa de por sí difícil, pero no imposible, por la idiosincrasia que caracteriza al mexicano.

Habrá entonces que empezar por el lugar donde se forman conciencias y se crean personalidades, “la escuela”, habrá primeramente que estructurar un plan acción, ya se local, regional, estatal o nacional, con miras a formar una conciencia ecológica, instituyendo una educación ambientalista, que tenga como prioridad, un cambio de actitud ambiental, igualmente tenga, el estudio de fuentes de contaminación, para detectarlas, evidenciarlas, atacarlas y eliminarlas, para esto será necesariamente partir, desde las creadas en el hogar, hasta llegar a las de índole nacional, pasando por las locales, regionales y estatales.

Crear proyectos escolares, que no únicamente se queden en el ámbito escolar, que vayan más allá, que se vean inmersos tanto instituciones educativas como autoridades locales y municipales; que el accionar sea conjunto, coordinado y asesorado, donde el alumno sea el principal promotor de este cambio de actitudes, hábitos y conciencias, ¿Por qué?, porque él será al final de cuentas, quien en el futuro, lleve las riendas de la realidad

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