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Inicial de la atención del recién nacido


Enviado por   •  21 de Noviembre de 2013  •  Trabajos  •  2.129 Palabras (9 Páginas)  •  282 Visitas

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Cuidados inmediatos

Inmediatamente después del nacimiento, el neonato se enfrenta a riesgo como perdida de calo y aspiración de liquido, así como el reto de sobrevivir a nuevo entorno. Los cuidados iniciales tienen la finalidad de:

1. Mantener el funcionamiento cardiorrespiratorio

2. Preservar la termorregulación (conservando al niño seco y tibio).

3. Garantizar la identificación y la seguridad.

4. Valorar los signos vitales.

5. Evaluar la edad gestacional para identificar la madurez

Valoración del funcionamiento cardiorespiratorio

El recién nacido debe empezar a respirar a los pocos segundos de alumbramiento, en caso de problemas de inician medidas de reanimación, en caso necesario detectar los signos de sufrimiento respiratorio que incluyen:

1. cianosis que no sean manos y pies (la acrocianosis se debe a la lentitud de la circulación)

2. retracción del abdomen por debajo de las costillas.

3. aleteo nasal

4. Respiración tipo gruñido que tal vez solo sean audibles con estetoscopio.

5. Frecuencia respiratoria sostenida superior a 60 respiraciones por minuto.

A menudo se administra oxígenos con mascarilla hasta que el neonato llora con vigor y desaparece la ciniosis.

La valoración de Silverman-Andersen

Valoración del funcionamiento cardiorrespiratorio del recién nacido

La valoración del bebé después del parto informa a los padres sobre la integridad de su pequeño hijo, los principales exámenes que se le realiza son los siguientes:

El test de Apgar

El test de Apgar es un método que permite evaluar al bebé inmediatamente después del parto y así realizar un diagnóstico acerca del tratamiento y trastornos que pueda presentar. Este examen consta de la valoración de 5 signos clínicos:

1. Frecuencia cardiaca.2. Esfuerzo respiratorio.3. Tono muscular.4. Irritabilidad refleja.5. Color.

Examen cardiorrespiratorio

Un indicador de la función cardiorrespiratoria del recién nacido es el color rosado e su piel. Este es el color que señala bienestar en el bebé. Por el contrario, si se encuentra pálido es posible que indique hemorragia, hipoxia o acidosis.

Otro indicador de bienestar está en que la frecuencia respiratoria esté entre 40 y 60 por minuto, y no debe presentar quejido respiratorio ni aleteo nasal, lo cual mostraría deficiencia respiratoria.Se debe evaluar el abdomen del bebé. En el recién nacido es blando y un poco deprimido debido a que tiene muy poco aire, en la medida que se va llenando de aire comienza a distenderse.

Segundo examen

En las 12 horas siguientes debe hacerse al bebé otro examen físico en el cual se evalúan los siguientes aspectos:

Postura y actividad: se evalúa su estado de sueño, alerta y llanto. En cuanto a la postura, el bebé debe presentar en estado de reposo manos empuñadas, extremidades dobladas y un poco hipertónicas (duras). Es importante tener en cuenta que la posición del bebé depende en gran medida de su postura en el útero materno. Piel: generalmente presenta un color rosado suave o con aspecto morado. Es normal que presente una pequeña descamación de la piel. En el caso de bebés prematuros su color será más transparente, pues su piel es más delgada.La piel del bebé también estará cubierta de un material graso que se forma durante el embarazo y de un pelo fino (lanugo) especialmente en los hombros y el dorso, el cual puede ser más abundante en bebés prematuros.Otro signo normal en el recién nacido son las manchas conocidas como manchas mongólicas, que son de color azul grisáceo y que se presentan en las nalgas, el dorso, o los muslos. Esto es normal y no representan signos de alguna patología. Cabeza: es normal que la cabeza sea grande en relación con el resto del cuerpo. Se debe tener en cuenta el estado de las fontanelas, la bolsa serosanguínea (edema del cuero cabelludo como consecuencia de la presión que se ejerce sobre el bebé durante el parto) y Suturas.- Ojos: el iris del recién nacido es de color grisáceo. Es normal que presente secreciones que no requieren tratamiento. Los ojos generalmente permanecen cerrados, con alguna respuesta ante estímulos lumínicos. Si se encuentra opacidad en la córnea y el cristalino, debe realizarse otro tipo de exámenes pues no es normal.- Nariz: debe confirmarse la permeabilidad de su capacidad respiratoria pasando una sonda nasogástrica. Es posible que presente dificultades debido a los flujos que no ha acabado de expulsar de su vida en el útero materno.- Boca: los labios del recién nacido deben ser rojos, sus encías presentar relieve dentario y fisuras en el paladar.- Oídos: se evalúa la forma e implantación del pabellón auricular. Los tímpanos, aunque son difíciles de visualizar deben tener apariencia opaca. Cuello: es corto y simétrico. Debe explorarse movilidad, la cual puede estar influida por su postura fetal y la presencia de aumento de volumen: bocio, quistes y hematomas. Tórax: se debe observar su forma y simetría. Los movimientos respiratorios que se consideran normales oscilan entre 30 a 60 por minuto. Clavículas: se debe palpar una superficie lisa y uniforme para descartar fractura que puede haber ocurrido durante el parto. Pulmones: en condiciones normales los pulmones se expanden en forma simétrica y tiene un adecuado murmullo vesicular. Se debe sospechar alguna patología en caso de presentar un murmullo vesicular asimétrico o disminuido. Ombligo y cordón umbilical: el cordón comienza a secarse al rededor del quinto día y se cae espontáneamente entre el séptimo y décimo día. El bebé puede presentar hernias sin que esto represente la presencia de alguna patología. Ano y recto: se debe examinar la ubicación y permeabilidad del ano. El niño debe haber eliminado un meconio en 48 horas después del nacimiento. Caderas: debe haber simetría. Se debe descartar luxación congénita. Extremidades: los brazos y piernas del bebé.

Aclaración de las vías respiratorias

Cuidados al cordón umbilical

Cuando se corta el cordón umbilical durante el nacimiento, queda un muñón que debe secarse, sanar y caer para cuando el bebé tenga cuatro semanas. Mientras el cordón esté sanando, manténgalo lo más limpio y seco posible. Bañe al bebé con esponja en lugar de sumergirlo en una tina con agua.

Vigile el cordón umbilical por si hay infección. Esto no ocurre con frecuencia, pero cuando lo hace, puede diseminarse con rapidez. Los signos de infección son:

• Secreción amarillenta y mal oliente del cordón

• Enrojecimiento y sensibilidad de la piel alrededor del cordón

Otro de los problemas poco frecuentes es el sangrado activo, el cual generalmente ocurre cuando el cordón es halado demasiado pronto. Deje que el cordón se caiga de manera natural, incluso si sólo pende de un hilo. En el sangrado activo, cada vez que se limpia una gota de sangre, aparece otra gota. Si el cordón sigue sangrando, llame al pediatra de inmediato.

Algunas veces, en lugar de secarse por completo, el cordón formará tejido cicatricial rosado, llamado un granuloma. Este granuloma drena un líquido amarillento y claro. Esto generalmente desaparece en alrededor de una semana. Si no lo hace, llame al pediatra.

Si el muñón del bebé permanece después de cuatro semanas, puede haber un problema con la anatomía o el sistema inmunitario del bebé. Consulte con el pediatra.

Estabilización de la temperatura corporal

Los seres vivos denominados homeotermos tienen la capacidad de mantener una temperatura corporal estable por medio de mecanismos que regulan las pérdidas y la producción de calor. En esto consiste la termorregulación. La estabilidad de la temperatura corporal es expresión de un equilibrio entre la producción de calor y la perdida de calor. Si el recién nacido, y especialmente el prematuro, tiene mayor facilidad para enfriarse que en etapas posteriores de la vida, esto tiene que explicarse ya sea porque tiene mayores perdidas de calor o menor capacidad de aumentar la producción de calor en ambientes fríos o una combinación de ambas cosas.

Las pérdidas de calor en el recién nacido.

Este tiene mayores pérdidas de calor que en etapas posteriores de la vida (Tabla 6.1) y se debe a los siguientes factores:

Alta relación de superficie/volumen. Esta relación depende del tamaño del recién nacido y de su forma. Mientras mas pequeño el recién nacido mas alta es esta relación y mayor es la superficie expuesta al ambiente externo por la cual se pierde calor. El prematuro además tiene una forma más plana, lo que también influye en que esta relación sea alta.

Menor aislamiento cutáneo. La piel y el tejido subcutáneo son también mas escasos en el recién nacido, lo que es mas notorio a mayor prematurez y bajo peso. Los niños de muy bajo peso (<1500g) tienen además una piel muy delgada que facilita las perdidas por evaporación.

Control vasomotor. La forma como el organismo se aísla del frío externo es por medio de la vasoconstricción cutánea. Este mecanismo esta bien desarrollado en los RNT a los pocos días de vida. En el caso de los prematuros el control vasomotor no es tan efectivo. Es más inmaduro a mayor prematurez.

Postura corporal. La postura es un mecanismo de defensa frente al frío. Es la tendencia a "acurrucarse" que tienen todos los mamíferos de manera de disminuir la exposición de superficie corporal al medio ambiente. El RNT no puede cambiar su posición en flexión de las 4 extremidades. El prematuro de menos de 34 semanas de gestación, tiene una posición con todos sus miembros extendidos y posteriormente presenta una postura con sus extremidades inferiores en flexión. De tal manera que este es también una factor que limita sus defensa frente a ambientes fríos.

La producción de calor en el recién nacido:

Hay una producción de calor que es el resultado del metabolismo basal, la actividad y la llamada acción térmica de los alimentos. Esta es la llamada "termogénesis no termorreguladora". Cuando las perdidas de calor superan esta forma de producción de calor el organismo responde con mecanismos que disminuyen las perdidas (postura y vasoconstricción) y con una forma de producción de calor que es una respuesta específica a los ambientes fríos. Esta es la "termogénesis termorreguladora". El recién nacido tiene una forma especial y muy eficiente de termogénesis termorreguladora que es realizada por el metabolismo de la llamada "grasa parda. Este es un tejido graso especial muy vascular izado y con rica inervación simpática tiene una alta capacidad para producir calor a través de reacciones químicas exotérmicas. La grasa parda se encuentra distribuida principalmente en la región interescapular, alrededor de los vasos y músculos del cuello, en la axila, en el mediastino entre el esófago y la traquea y alrededor de los riñones (Figura 6.1) La capacidad termogénica del recién nacido, es baja en las primeras horas de vida. La respuesta metabólica al frío mejora en el curso de las horas y días llegando en el recién nacido de término a cifras semejantes a las del adulto. En el prematuro la respuesta termogénica es menor (Tabla 6.2).

La termogénesis termorreguladora está influida por diversos factores. Debe existir una función tiroídea normal. En el hipotiroidismo congénito hay dificultad para regular la temperatura. La asfixia, los bloqueadores beta adrenérgicos, el diazepam y algunos anestésicos, disminuyen la respuesta metabólica al frío.

En conclusión la labilidad térmica del recién nacido se debe principalmente a que este tiene mayores pérdidas de calor y en menor grado a las limitaciones en la producción de calor especialmente en las primeras horas de vida. Todos estos factores aumentan en el prematuro proporcionalmente al grado de su bajo peso y prematurez.

Así como el recién nacido tiene facilidad para enfriarse en ambientes fríos, también tiene mayor facilidad para absorber calor en ambientes cálidos. El principal mecanismo de defensa en estos casos es lasudoración. Esta función está limitada en el recién nacido a término y mas en el prematuro por inmadurez de las glándulas sudoríparas. De tal manera que estos tienen también dificultad para mantener su temperatura en ambientes cálidos y por ende mayor riesgo de que suba su temperatura corporal en estas situaciones.

El manejo del ambiente térmico del recién nacido.

El buen manejo del ambiente térmico es un aspecto fundamental en el cuidado del recién nacido, especialmente del prematuro. Para comprender las medidas que se deben tomar debemos recordar las cuatro formas a través de las que se pierde el calor:

Los mecanismos de transmisión y pérdida de calor.

La conducción es la perdida de calor a través de dos cuerpos en contacto con diferente temperatura. En el recién nacido es la pérdida de calor hacia las superficies que están en contacto directo con su piel: ropa, colchón, sábanas, etc.

La radiación se da entre cuerpos a distancia por ondas del espectro electromagnético (ej. típico, el sol, radiadores, vidrios, etc.) El recién nacido perderá calor hacia cualquier objeto más frío que lo rodee: paredes de la incubadora, ventanas. Ganará calor de objetos calientes a los que esté expuesto: rayos solares, radiadores de calefacción, fototerapia etc. La pérdida de calor es inversamente proporcional al cuadrado de la distancia.

La convección, es propia de los fluidos (ej. el aire, el flujo sanguíneo, etc.), El recién nacido pierde calor hacia el aire que lo rodea o que respira. Por estos tres mecanismos también se puede ganar calor.

La evaporación. Es la pérdida de calor por el gasto energético del paso del agua a vapor de agua. Un gramo de agua evaporada consume 0.58 calorías.

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