LA ESCUELA COMO INSTITUCIÓN EDUCATIVA

LA ESCUELA COMO INSTITUCIÓN EDUCATIVA

La escuela es el lugar en donde la educación se realiza, se cumple y se ordena, inculcando en los individuos reglas y valores necesarios para vivir en comunidad. Como regla general en una escuela intervienes profesores y estudiantes formados de acuerdo a las necesidades sociales.

En pocas palabras, la escuela es la institución encargada de reunir las influencias y coordinar las que han de transferirse al alumno, esto en función de la sociedad y la época, es decir, se adapta a su entorno pero sin olvidar su individualidad ampliando sus oportunidades de desarrollo en cualquier ámbito.

En teoría podemos decir que la sociedad, la familia, la escuela son un sistema en el cual deberían participar todos para encaminar al alumno a un desarrollo integral, sin embargo, muchas veces esto no sucede así, pues no se trabaja en conjunto y éste no es capaz de enfrentar los retos cotidianos y mucho menos a una sociedad cada vez más competitiva.

Ahora bien, el ideal es que las escuelas se adapten al contexto social para que el estudiante pueda insertarse a la vida social y productiva, trabajando para mejor su entorno y su vida personal. Debemos tomar en cuenta que la escuela por sí sola no puede lograrlo, es necesaria la ayuda de la familia, sociedad y estado.

Como sociedad vivimos bajo estructuras de toda índole con el fin de regular y organizar. El papel del estado es precisamente el de regular la educación, una de sus funciones es requisitar las titulaciones académicas, organizar el calendario escolar, requisitos de formación del profesorado, inmuebles, funcionamiento de escuelas, supervisión etc. Dando a las escuelas carácter de instituciones.

CONCLUSIONES

Uno de los actores más importantes en la institucionalización de las escuelas es el Estado, pues como lo hemos analizado es el encargado de regular los quehaceres académicos de las escuelas así como su estructura, pero no debemos olvidar que una escuela es parte de todo un sistema en el cual los actores que intervienen (escuela, sociedad, familia, alumno, estado) deben trabajar en armonía como engranes donde todo gira y si alguna pieza falla, fallamos todos.

Una escuela debe estar siempre en coordinación con su entorno, para otorgar una educación congruente, todos sus miembros deben tener el mismo propósito, no sólo en sus conocimientos, sino también en valores y habilidades, tenemos entonces que “todos dependemos de todos” para que la escuela como institución cumpla la misión de formar individuos capaces contribuir en la mejora de su sociedad y su vida personal.

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