Profesion Docente

La profesión docente

Ser maestro o docente es importante porque consiste en la construyen ciudadanos nuevos, ayudan a descubrir vocaciones, forman a la gente del futuro y aparte de todo ello, sacrifican todo por proporcionar a sus alumnos la más importante arma contra la ignorancia y la descomposición social, la educación. pero el maestro no puede ser simplemente transmitir de forma aséptica y fría los distintos saberes, técnicas y hábitos que preparan al niño para hacer o fabricar algo, para ocupar un puesto o ganar un sueldo. Todo esto es necesario, pero sólo en la medida en que nace de algo mucho más profundo. En la labor del maestro es sentir esa emoción que se produce en el alma del educador, cuando, gracias a su trabajo diario, a su ilusión y dedicación, el buen maestro conoce bien a sus alumnos, su evolución personal se pone a su lado, anda a su paso para ayudarle, guiarlo, darle fuerza, proponerle metas y medios para que las alcance. Con su palabra y sus acciones va directo a la mente de quien lo quiera escuchar

Pero para lograr estas cualidades en los maestros implican como lo ya mencionado que es la vocación de servir y educar también una preparación profesional que tal vez no todos los maestros las tengan y que algunos no están preocupados por seguir tratándose de superarse porque ellos no tiene la vocación de ser maestro que solo lo hacen como un trabajo más que no les importa si el niño logro aprender que el maestro no disipa las dudas y no trata de inculcar ese interés por el conocimiento y por otras razones el ser maestro implica tratar de mejorar todo esto y no solo en los actuales maestros si no también en los que se están en formación en las escuelas normales horas de estudio en las que se lleva gran parte del día o de la semana que no las desperdicien o no les dan importancia porque no era la única opción o no consiguieron ingresar en la institución que ellos preferían.

El buen maestro debe leer, estudiar, estar al día en todo, intercambiar experiencias con sus compañeros, conocer el medio en que desarrolla su misión porque su trabajo es duro y permanente: “no se es maestro por horas, sino todas las horas del día”. Un buen maestro transpira serenidad, orden, equilibrio, método, disciplina, auxilio en los apuros, buen ánimo en los momentos difíciles, consejo en las dudas, alegría en los momentos felices ser docente, no implica solo dictar horas de clases, sino dedicar alma. Exige no solo ocupación, sino vocación de servicio. el genuino educador se esfuerza por ser verdadero amigo de cada uno de sus alumnos, ya que ellos no son cosas para barrerlas, son personas, con su propio mundo intelectual y emociona,. Es necesario cooperar con ellos para que hagan el mejor uso de las posibilidades y potencialidades. Es triste comprobar cómo la mayoría de los docentes reducen su profesión a meros dadores de clases y creadores de planificaciones

...