Sistema Vestibular en el movimiento

        En este ensayo vamos a definir cuál es la relación del sistema vestibular y visual con el movimiento, comenzamos diciendo que el sistema vestibular es el regulador del movimiento y del equilibrio, lo que nos permite desplazarnos en el entorno. Cuando caminamos, el ojo nada más utiliza sus movimientos propios sin ayuda del sistema vestibular a lo que se le conoce como opcilosia. Lo que vemos alrededor lo veremos borroso o lo seguiremos con la mirada. Los receptores del sistema vestibular se encuentran en el oído interno, que permite conservar una imagen estable en el ojo, lo que es fundamental para el equilibrio.

          El sistema vestibular es un sistema sensorial que se encuentra en el oído interno y que coordina el movimiento con el equilibrio. Se desarrolla antes que el sistema visual, y esto hace que el movimiento sea guía de la visión mientras termina su desarrollo y ya cuando se desarrolla completamente el sistema visual, la visión es la que guía al movimiento. Cuando la cabeza se mueve, este movimiento se detecta por los sensores vestibulares del oído interno y la información se envía al sistema nervioso central y se procesa, luego envía señales a los músculos oculares y hace que los ojos se muevan en la dirección opuesta. Cuando hay una lesión cerebral, podría ocurrir un fallo en el reflejo vestibular ocular y algunos de los síntomas y signos podrían ser mareos, desequilibrio y un sistema binocular inestable, cuando esto sucede, los sistemas vestibular y visual se des coordinan.

El sistema visual funciona como detector del movimiento, nosotros observamos mejor las imágenes visuales cuando no hay movimiento y esto hace que nuestra vista dependa del reflejo vestibular-ocular, que nos ayuda a estabilizar nuestro campo de visión. El sistema visual puede ajustar el movimiento con el reflejo cervical-ocular, que trabaja con el reflejo vestíbulo-ocular para que la retina tenga una imagen estable y ayudan a la percepción visual, estos dos sistemas permiten que la persona participe en un ambiente donde hay movimiento constante y necesita de una adaptación al ambiente donde se encuentra. Entonces podemos decir que la vía vestibular-ocular se controla en respuesta al movimiento de la cabeza y capacitan a los ojos para que permanezcan fijos sobre un objeto estacionado, mientras que la cabeza y el cuerpo se mueven, también se encarga de la estabilidad de la fijación de mirada, el reflejo vestíbulo-espinal se encarga de la postura y equilibrio del cuello sobre el cuerpo y del cuerpo sobre las respuestas corporales, reflejo oculo-vestibular se encarga de la agudeza en la fijación de la mirada, reflejo oculo-cervical se encarga de la alineación del cuello con la mirada. Los receptores vestibulares se encargan de la orientación de la cabeza y de los ojos, proporciona el tono postural anti-gravitatorio e inicia la contracción muscular para regresar el cuerpo al equilibrio si es perturbado. Los receptores visuales entregan información de la visión periférica que es la detección del movimiento, hace que aumente el tono muscular para combatir la perturbación en el equilibrio, advierte que se necesita cambiar la posición o el apoyo postural. Las vías vestíbulo-oculares se proyectan en los núcleos oculomotores: III, IV y VI, estas conexiones son necesarias para que la mirada esté estabilizada durante el desplazamiento. Son igualmente responsables del nistagmus, que es un movimiento involuntario, rápido y repetitivo de los ojos, puede ser de lado a lado (nistagmo horizontal), hacia arriba y hacia abajo (nistagmo vertical) o circular (nistagmo rotatorio); tanto fisiológico como el que aparece en situaciones patológicas.

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