Suplementos vitamínicos

Alumna:   Valeria Beatriz Núñez Castillo     C.I.:  5.596.206

Carrera:   Lic. En Enfermería

Consumo de suplementos vitamínicos

         Un suplemento vitamínico es un preparado que contiene vitaminas. Es utilizado cuando hay carencia de vitaminas, por seguir una alimentación inadecuada u otros motivos como el estrés o la realización de deportes que aumenten las necesidades del organismo.

         Hay varios tipos de suplementos: Los multivitamínicos o polivitamínicos, que son los más conocidos, contienen varias vitaminas y a veces también minerales; los suplementos con vitaminas del tipo B, que generalmente son inocuos; y los suplementos con una sola vitamina concreta.

         Además de vitaminas y minerales, estos productos suelen contener hierbas y otros ingredientes como equinácea y glucosamina.

         El consumo de un suplemento aumenta la ingesta de nutrientes y permite que las personas obtengan las cantidades recomendadas de vitaminas cuando no pueden cubrir, o no cubren, estas necesidades sólo con los alimentos. Sin embargo, su consumo también puede aumentar la posibilidad de recibir una cantidad excesiva de ciertos nutrientes.

Los suplementos no pueden reemplazar el valor que tienen los alimentos que son importantes para una dieta saludable. Ellos no sólo aportan vitaminas, sino que también contienen minerales, fibras y otros ingredientes que podrían tener efectos positivos en la salud. Sin embargo, quienes no obtienen suficientes vitaminas y minerales sólo de los alimentos, consumen dietas de bajas calorías, tienen poco apetito, o no comen ciertos alimentos (como los vegetarianos y vegetarianos estrictos) podrían considerar su uso.

También se dan casos en los que los profesionales de la salud deben recomendar su uso a ciertos pacientes como las mujeres embarazadas, evitando el exceso pues durante el embarazo pueden aumentar el riesgo de defectos congénitos en los hijos; los bebés, en especial los que no consumen leche materna; las mujeres posmenopáusicas para fortalecer los huesos y reducir el riesgo de fracturas y los adultos mayores porque es posible que no absorban suficiente cantidad de vitamina presente en los alimentos.

El abuso de vitaminas puede ser perjudicial. Por ejemplo, la vitamina A es imprescindible para la vista, para el crecimiento, para la piel, etc, pero es tóxica en dosis elevadas, produciendo dolores de cabeza fuertes y náuseas. La vitamina D, en exceso, provoca calambres, cálculos e incluso una hipercalcemia, que consiste en la elevación de los niveles de calcio.

Por lo general las personas deben obtener la mayoría de las vitaminas en los alimentos de la dieta diaria, las cantidades necesarias en el organismo son mínimas. A pesar de eso las personas tienen la creencia de que consumiendo frascos y frascos de suplementos estará más sana. Sin embargo lo que ocurre es que el exceso de vitaminas, considerado como inútil será excretado.

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