ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Cronicas

paisa96Informe6 de Noviembre de 2013

825 Palabras (4 Páginas)238 Visitas

Página 1 de 4

Era un día mas, un amanecer en esta ciudad llena de logros y metas, un hermoso sol que salía de las bellas montañas antioqueñas, donde la luz se depositaba sobré los hogares humildes y ricos de Medellín, pero en especial en un hogar, en el mío, mi nombre es Felipe quintero un joven mas de este mudo llenos de sueños y querido contarles mi historia.

Todo comenzó bien tenía una familia alegre unida, amorosa en el campo en Tiribi (Antioquia, formada mi papa, tabo, como le decía de cariño; mi mama rubiela y mi hermano veto. Todos los días salíamos a ordeñar las vacas, alimentar los marrarnos, todo era perfecto vendíamos el café, frijol etc.; pero me llenaba de orgullo ver la cara de felicidad de mis padres al ver que lo más lindo de la vida es sonreír y compartir en familia, pero siempre habrá alguien que llena la vida de oscuridad.

Aquella noche de abril llego llego la guerrilla en mi hogar, con sus fusiles gigantes y ocultado su rostro, yo pensaba “ no dan la cara por miedo a descubrir quien son en realidad”, destruían todo aquello que se les venía en gana, entrando a mi cuarto, el cual compartía con mi hermano al cual golpearon salvajemente por tratar de defenderme, llegaron al cuarto de mis padres y ocurrió la cosa menos pensada un sonido que jamás mis oídos olvidaran; el sonido de mi padre con sus últimos alientos antes de su muerte diciendo ¡ gracias familia!, después de eso ya no teníamos la misma felicidad , la vida en el campo se hacía cada día más dura, mi madre toma la decisión de partir hacia Medellín, éramos una familia mas desplazada por la violencia, cinco horas de viaje en una chiva, veía a los pasajeros y solo revelaban la otra cara de la moneda, una cara de frustración, yo cargaba en mi pecho un rosario que me había dejado mi padre, el contaba “ cuando Dios está contigo, lo difícil e imposible se convierte en alegría”.

La chiva olía mal pero no era por la pestilencia, era porque la violencia gano, yo dormía junto a mi hermano y mi madre abrazados nos tenía a los dos, en mis rostro resplandecía la luz del sol, era un nuevo amanecer, por la ventana veía otro mundo, una ciudad con enormes edificios y estructural modernas cosas que jamás había visto, conseguimos una humilde casita en la comuna 8, para comenzar de nuevo y salir adelante, ingrese a un colegio para así seguir con mis estudios que necesitaba, mi mama con todo el esfuerzo posible vendía tintos en la plaza de mercado, para así poder sacar adelante a sus hijos , pero todo no era color rosa mi hermano no aprovecho esta oportunidad de la vida, el pensamiento era negro, paso de ser un campesino humilde a ser un delincuente sin oficio, se juntaba con las pandillas que rondaban el barrio, delinquía robaba, el paso de tener en sus manos las ubres de una vaca, a tener un arma y derramar sangre y sueños de las personas, peor bueno yo en mi colegio era excelente mis calificaciones era muy buenas, a la salía del colegio, con mis tenis desgastados y mi camisa blanca que ya parecía amarilla corría hacia la plaza para ayudar a mi mama.

Otra noche más que parecía ser igual que todos, eso pensaba; a las 9 de la noche de aquel jueves, subíamos la montaña con mi madre y de repente escuchamos varios disparos, lo que no pensábamos era que mi hermano estaba en ese tiroteo, yo estaba asustado lentamente de mi rostro salían lagrimas porque cada paso que daba me acerba a un cadáver, lo mire y era el de mi hermano no respiraba, otro ser amado muerto acosta de la violencia, pero eso no acabó hay una bala perdida otro sueño acabo…

Continuaron los días, continua mis historia me gradué como profesional en administración de empresas, ya mi madre estaba muy orgullosa de su hijo, yo sigo pensando la felicidad y los sueños se cumplen cuando a ello amor, estudio, empreño y gracias a Dios le damos, como mi padre tabo lo decía, mi felicidad era ver la cara de mi madre

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (5 Kb)
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com