Evolución De Las Ideas

Evolución de las Ideas:

El tema principal de este apartado será si la segregación de la comunicación escrita da lugar a una evolución autónoma de la semántica fijada por escrito, transmisible y por eso mismo variable.

La separación de una evolución particular de las ideas se remite a la diferencia entre operación y observación, debido a que toda observación sólo se puede realizar en la forma del operar factico, el de comunicar. Aquí acontece la clausura operativa del sistema de la sociedad con la posibilidad de formaciones estructurales evolutivamente divergentes.

La comunicación solo será posible como operación que observa, de ella depende que se entienda el sentido de la diferencia entre información y el darla a conocer, con esto queda preparada para las siguientes comunicaciones.

Las observaciones solo se darán como acontecimientos reales, es decir, que residen exclusivamente en la realidad de las operaciones de observación mismas, ponen a prueba una resistencia que no se halla en un mundo externo objetivo, sino exclusivamente en la misma operación el propio sistema.

Las observaciones son operaciones que se reproducen de manera autopoiética a los sistemas operativos, pero no son capaces de observarse a sí mismas. Por otro lado las operaciones pueden observarse mediante observaciones dirigidas hacia ellas; de otro modo no sabríamos nada acerca de ellas. En este círculo sobre se producen efecto en la morfogénesis, en la construcción evolutiva, en la diversificación y en desmontaje de estructuras. En el nivel semántico surgen estructuras que dirigen la observación y la descripción de esos resultados evolutivos, es decir, la semántica requiere de latencias. Esta concede un cierto plazo a la innovación estructural hasta que se ha confirmado lo suficiente como para poder imponerse como orden con derecho propio. A demás hay numerosas incongruencias de tiempo entre la evolución estructural de los sistemas y la semántica.

Las estructuras se reproducen como traiciones, pero las condiciones actuales dejan ver que las descripciones de estructuras definidas por la tradición ya no cuadras, surge la experiencia de la discrepancia: las posibilidades de reproducción actual ya no soportan lo que debe reproducirse.

Los quiebres temporales ya mencionados llevan a una diferenciación objetual, esto sólo será posible cuando se encuentran ya a disposición suficientes capacidades de memoria, cuando la sociedad dispone ya en suficiente medida de la escritura. En la evolución de las ideas, la invención y difusión de la escritura marcan el punto de partida de una evolución autónoma, y la imprenta marca la cesura que provoca profundos cambios semánticos.

En la antigüedad la introducción de la escritura no se instituye de manera tan concreta y no existe la forma específica y estable con respecto a la cual pueda desarrollarse, con

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