La Ciudad Antigua

Introducción:

En este libro se expone la necesidad de conocer los orígenes de Roma y Grecia para un mejor y correcto entendimiento de nuestra condición social y política. Dos naciones base de la creación de nuestras leyes y principios.

Enmarca también la necesidad de la renovación de las leyes de la sociedad de acuerdo con el avance a su inteligencia:

¨Hoy ya no piensa el hombre lo que pensaba hace veinte siglos, y por eso mismo no se gobierna ahora como entonces se gobernaba¨.

Y la indudable relación entre las creencias con las constituciones que rigen a la sociedad y la creación de divisas instituciones creadas en la antigüedad y que influyen en la actualidad.

¨Reparad en las instituciones de los antiguos sin pensar en sus creencias, y las encontrareis obscuras, extrañas, inexplicables¨.

Libro I

CREENCIAS ANTIGUAS

(LARES O HÉROES)

El libro comienza relatando las más antiguas creencias sobre la muerte y el alma. Tomando como principal aquella en la que creían los antiguos griegos e italianos, en donde se reitera la posibilidad una segunda vida y que esta se desarrolla en segundo plano en nuestra misma tierra, ya que el alma no se separaba del cuerpo y que esta era enterraba con el mismo.

¨Encerramos su alma en la tumba¨

(Virgilio)

Tan fuerte era la creencia de los griegos, que pensaban que si no se le daba santo sepulcro al cuerpo (obviamente ligado al alma), el alma se presentaría ante el pueblo lanzando calamidades, exigiendo se le enterrara realizando los ritos pertinentes.

Gracias a esto, se empiezan a establecer obligatorios dichos ritos, la dotación de insumos y el establecimiento de los muertos como dioses, sin hacer diferencia entre buenos o malos. Todos gozaban de la misma divinidad en el mundo subterráneo.

¨Nuestros antepasados han querido que los hombres que habían salido de esta vida se contasen en el número de los dioses¨

(Cicerón, De Legibus, II, 22.)

En este caso los romanos les daban el nombre de ¨Dioses manes¨. Estas leyes se encuentran redactadas en el libro de las leyes Manú.

Para la cultura de los indios estas ofrendas eran llamadas sraddha, e igualmente adoraban a sus antepasados muertos rogando por su bienestar y la adquisición de propiedades.

(PENATES)

Otra de las más importantes costumbres y creencias de la antigüedad era la del ¨Fuego sagrado¨, el cual era adorado en cada hogar igual que a un dios ofreciéndole insumos con la esperanza de que este les proveyera de salud y riqueza. Aquellos que permitieran que en su hogar se extinguiera eran condenados a la propia extinción de su hogar.

Pero como todo culto, religión o creencias el ¨Fuego sagrado¨ sufrió el paso de la inteligencia humana, de ser la mayor divinidad a solo un intermediario entre los dioses de la naturaleza física y el ser humano.

(RELIGION DOMESTICA)

El culto de los muertos era un tipo de religión en la cual se especificaba que los muertos de cada familia eran sus únicos dioses y que únicamente la familia podía adorarlos eh incluso acercarse a sus tumbas. La presencia de cualquier extranjero en la tumba de un ajeno era considerada como un acto impío.

Por lo tanto, la región estaba delimitada intrínsecamente por los muros del hogar, no era pública y las ceremonias eran diferentes en cada uno. Su práctica y los altares eran resguardados de las miradas curiosas de los ajenos a las casas.

¨Sacrificia occulta¨ (Cicerón)

Solo podía ser transmitida entre familiares, cada padre era sacerdote de su hogar y solo de su hogar. Ni siquiera los pontífices podían regular la religión del hogar particular, ellos solo se encargaban de que se cumpliera con ello sin imponer métodos de predicación o sacrificio.

Las mujeres solo eran audiencia y no podían recibir la sabiduría de la religión de sus ascendentes, solo los hombres contaban con ese privilegio.

En esta fase del libro podemos identificar los orígenes de las costumbres que incluso en la actualidad se siguen practicando en comunidades arraigadas del país lo que me pareció muy interesante; una de ellas podría ser el famoso Xantolo de la huasteca en donde se les conceden insumos a nuestros muertos con la diferencia de que no los vemos como dioses, sino, como seres que estando en segundo plano terrenal conviven con los vivos en dicha fecha.

Libro II

(LA FAMILIA)

La familia no era considerada por el afecto o por simple nacimiento de un ente en ella, sino, por la unión que otorgaba el profesar el mismo culto.

La mujer no se consideraba parte de una familia hasta que no cumpliera con la ceremonia de matrimonio, mientras que e hijo siempre contaba con esa condición a excepción de que se emancipara o se negara a cumplir con el culto.

(MATRIMONIO)

Esta es la primera institución establecida en el derecho antiguo realizada con el único fin de procrear.

En la cual la mujer pasaba de realizar alabanzas a los dioses de su padre a adorar a los dioses de su marido.

¨A contar del matrimonio, dice un antiguo, la mujer ya no tiene nada de común con la religión domestica de sus padres: sacrifica al hogar del marido¨

(Dicearco, citado por estaban de Bizancio, V,)

El matrimonio tanto para los italianos, griegos y romanos constaba de tres etapas. Traditio (en la casa del padre), el deductio in domum (el traslado de la novia a la casa del novio) y el conjarreatio (realizan la adoración a los dioses del novio en conjunto)

El hecho de la importancia del matrimonio era la trascendencia del culto de cada hogar

De

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