La vida del sanador

Un día en la vida del sanador

El inventor quiere terminar pronto su máquina del tiempo para ir a conocer a al pasado y conocer la vida de inti, pero en el camino se encuentra con obstáculos.

La primera prueba del inventor fue pasar agónicas horas en los valles de la envidia, donde fue torturado por personas que le alteraron el subconsciente a este llenándolo de envidia hacia los demás; pero que este pudo superar por que era feliz con lo que tenía hacia que las personas lo dejaron seguir adelante.

Su segunda prueba fue por el rio del rencor, donde este al pisarlo se llenaba de furia y malos recuerdos frente a las demás personas, así, que sus ojos se llenaron de rabia y se pusieron rojos pero cambiaron de color al ver las buenas acciones en las que él pensaba por lo cual el rio la dejo pasar.

Su tercera prueba la encontró con un hombrecito que era intolerante que al verlo lo insulto para probarle su intolerancia, entonces a cada una de sus ofensas el viajero las ignoro y no le prestó atención, el hombrecito le grito mas fuerte para que este le respondiera, pero no funciono. Entonces el hombrecito abrió una puerta dijo:

Has pasado mi prueba puedes conocer al gran curador.

Al llegar vio un pueblo rodeado de montañas, con mucha vegetación, con un sol resplandeciente, campos de praderas, cascadas de aguas cristalinas, un cielo azul, ciervos, perros, venados, mariposas, y muchos más animales.

Siguió caminando y se encontró cinco casas: la primera le pertenecía a un vecino rencoroso que no hablaba y furioso con los demás; la segunda una vecina intolerante que le gritaba y le respondía a los demás; el tercero un niño egoísta que no le daba sus juguetes a nadie y no daba a nadie de sus cosas; la cuarta una niña mentirosa que le hacía engaños a todo el pueblo; y la quinta una señora asquerosa que no cuidaba su casa y dañaba la naturaleza a su alrededor.

Siguió caminando y por fin se encontró con el curador, el inventor le pregunto el nombre y él le dijo que se llamaba Inti, y que era curador de personas enfermas de malas costumbres y actitudes; el inventor le conto sobre los cinco vecinos para que solucionara el problema con estos, Inti le dijo que si y se pusieron en marcha.

El sanador llego a las cinco casas, y toco en la del señor rencoroso, se acerca a el y le dice: que las personas no le tienen odio por todas las cosas malas que a echo y al contrario lo acepta: y asi el señor se da cuenta de que no debe guardar rencor a los demás.

Se acerca a la segunda puerta de la vecina intolerante, se acerca a ella la cuestiona sobre sus diferencias y que nadie trata de ofenderla para que ella se tenga que portar mal con los demás y así se da cuenta de que debe tolerar a los demás.

Llega a la tercera puerta y se acercó al niño egoísta y le dijo que los demás lo aprecian

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