Tren bala inspirado en el pico del Martin pescador

Tren bala inspirado en el pico del Martin pescador

El tren bala shinkansen es el más rápido del mundo desde 1997, pero presentaba un grave problema al entrar a los túneles, comprimía el aire al estar dentro del túnel y en su salida causaba una enorme explosión (boom sónico) escuchada a más de 400 metros. Este problema fue solucionado por la compañía Japan Railway West o JR West, uno de sus mejores ingenieros Eiji Nakatsu, tenía el pasatiempo de observar aves, rápidamente encontró la solución al problema con la inspiración del ave Martin pescador, la peculiar forma de su pico tan larga y aerodinámica permitiéndole entrar con tanta facilidad al agua y su posición al entrar al agua apenas salpicando un poco de agua.

¿Cómo es esta pequeña ave? El dorso del cuerpo, cabeza y alas es azul-turquesa con destellos verdoso-metálicos. El vientre y un par de zonas bajo los ojos son de color naranja, mientras que las zonas de la garganta, orejas y orificios nasales son blancas. Su largo pico tiene una incidencia fundamental en la estructura física del martín pescador. Está adaptado a la captura de peces, en la mayoría de los ejemplares de estas hermosa ave es de color negro y a medida que se acerca a la cabeza puede mostrar un color naranja. La longitud de sus alas puede llegar a medir 25 cm, tiene un peso aproximado a los 35 gramos. No existen diferencias considerables entre la hembra y el macho.

La primera vez que se conoció el tren bala fue en el año de 1964, fue el inicio de la nueva era, el nivel de la tecnología, años después de su inauguración en la exposición de Universal Osaka en 1970, se refuerza el servicio con la capacidad de 16 vagones por cada nuevo  Shinkensin, pero si bien los ingenieros no tomaron en cuanta los problemas acústicos al igual que muchos problemas de vías.

A pesar de los problemas que trajo consigo, el shinkansen demostró ser un medio de transporte seguro para los pasajeros y existoso en todos los ámbitos, incluido el de su comercialización. El éxito del shinkansen animó a diversos países de Europa, entre otros, a desarrollar los trenes más rápidos del mundo, como el TGV francés, que comenzó a operar en 1981; y el ICE alemán, que inició su servicio en 1991. El TGV particularmente superó en aquel momento la velocidad máxima que alcanzaba el shinkansen, 210 km/h, llegando a alcanzar los 270 km/h y sorprendiendo a todos al recuperar el liderazgo mundial en alta velocidad que ostentó hasta la aparición del tren bala japonés. Después de esto Japón también se esforzó por aumentar la velocidad del shinkansen, y en la actualidad se ha logrado que el shinkansen de Tōhoku circule a la misma velocidad que el TGV, 320 km/h. (Anónimo, 2014, Historia de Shinkensin, nippon)

Su problema más significativo fue cuando el famosos tren alcanzaba velocidades mayores a los 270 km por hora cada vez que el tren entraba a un túnel comprimía el aire y al salir producía una explosión de sonido, este problema causo un gran conflicto en las áreas residenciales, dando muchas quejas a la empresa obligándolos a solucionar el problema lo antes posible. Nakatsu fue el héroe para este problema, con su inspiración en la pequeña ave martin pescador, en la que si pico largo fue la inspiración y la solución a todos los problemas aerodinámicos, pero no solo se inspiró solo estas aves, también corrigió el diseño basándose en las plumas de una lechuza para crear un pantógrafo, es el mecanismo articulado que transmite la electricidad del tren; las plumas primarias de las lechuzas tienen bordes dentados que fragmentan el flujo del aire que pasa sobre ellas disminuyendo el sonido. Al cabo de los años se presentó un rediseño del pantógrafo ahora inspirado en el pingüino adeleida teniendo un cuerpo liso perfecto para la base de dicho artefacto, siendo ahora capaz de alcanzar los 320 km por hora sin superar los 70 decibeles marcados por el gobierno como regla para no molestar a todos los residenciales cerca de las vías y túneles. En el año 2017 el tren bala es citado como uno de los mejores inventos de la tecnología inspirado en la naturaleza. Benyus publicó en 1997 un libro que marcó el inicio de una nueva era en diseño, "Biomímesis: innovación inspirada en la naturaleza". "Generalmente aquellos que diseñan todo lo que nos rodea nunca fueron a una clase de biología y por ello son realmente novatos en la forma en que funciona la naturaleza".

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