Un relato de vida de José Martí Lectura y Análisis de Textos Literarios

[pic 1][pic 2]

Universidad Nacional Autónoma de México

Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades

Jesus Baltazar Hernandez

Oscar Daniel Flores Antonio

Un relato de vida de José Martí

Lectura y Análisis de Textos Literarios

Profesora: Olga Flores Álvarez

Mayo 2017

• Introducción                                                                             3
• José Martí                                                                                5
• A mí madre poema 1
• Comentario
• Linda hermanita mía poema 2
• Comentario
• ¡10 de Octubre! Poema 3
• Comentario
• A Fermín Valdés Domínguez poema 4
• Comentario
• A Fermín Valdez Domínguez poema 5
• Comentario
• Cesto de mimbre poema 6
• Comentario
• ¡Dolor! ¡Dolor! Eterna vida mía poema 7
• Comentario
• Mis padres duermen... Poema 8
• Comentario
• Carmen poema 9
• Comentario  
• Cuba nos une...10
• Comentario
• Fuentes de consulta

• Índice de imágenes

Introducción

José Julián Martí Pérez

Nació en La Habana, el 28 de enero de 1853. En 1866 entra en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana. Al igual que en la clase de Dibujo Elemental en la Escuela Profesional de Pintura y Escultura de La Habana, conocida como San Alejandro.

     En 1869, al pasar una escuadra del Primer Batallón de Voluntarios por la calle donde residía Valdés Domínguez, se escucharon risas de la vivienda y los voluntarios toman esto como una provocación. Regresan en la noche y destruyen la casa. Entre la correspondencia encontrada hay una carta dirigida a Carlos de Castro. Castro, compañero del colegio que, por haberse alistado como voluntario en el ejército español para combatir a los independentistas.

     Por tal razón, el 21 de octubre de 1869 Martí ingresa en la Cárcel Nacional acusado de traición por escribir esa carta, junto a su entrañable amigo Fermín Valdés Domínguez. En el año de 1870, Martí fue condenado a seis años de prisión, pena cambiada por el destierro a Isla de Pinos. En diciembre sale hacia La Habana y en enero de 1871, fue deportado a España con ayuda de sus padres. Allá se gradúa de Licenciado en Derecho Civil y Filosofía y Letras.

     Después se traslada a París, por un breve tiempo. Pasa por Nueva York y llega a Veracruz en febrero de 1875, donde se encuentra con su familia. En México se relaciona con Manuel Mercado y conoce a Carmen Zayas Bazán, su futura esposa.

     Del 2 de enero al 24 de febrero de 1877 estuvo de incógnito en La Habana como Julián Pérez. Al llegar a Guatemala trabaja en la Escuela Normal Central como catedrático de Literatura y de Historia de la Filosofía. Regresa a México, para contraer matrimonio con Carmen en diciembre del mismo año, regresando a Guatemala a inicios de 1878.

Nuevo comienzo

Concluida la Guerra vuelve a Cuba en agosto de 1878, para quedarse en La Habana, y en noviembre nace su hijo José Francisco.

     Comenzó sus labores de conspiración figurando entre los fundadores del Club Central Revolucionario Cubano, fue elegido vicepresidente en 1879. Posteriormente el Comité Revolucionario Cubano, radicado en Nueva York, lo nombró subdelegado en la Isla.

     Entre el 24 y el 26 de agosto de 1879 se produce un nuevo levantamiento en las cercanías de Santiago de Cuba. En septiembre Martí es detenido y deportado nuevamente a España, el 25 de septiembre de 1879, por sus vínculos en la Guerra Chiquita.

     Al llegar a Nueva York, se establece en la casa de huéspedes de Manuel Mantilla.

     Martí logra traer a su esposa e hijo en 1880. Permanecen juntos hasta octubre, después Carmen y José Francisco regresan a Cuba. Una semana después resultó elegido vocal del Comité Revolucionario Cubano, del cual asumió la presidencia al sustituir a Calixto, quien había partido hacia Cuba.

     Entre 1880 y 1890 Martí alcanzaría renombre en la América a través de artículos y crónicas que enviaba desde Nueva York a importantes periódicos:

     Solo tuvo dos números: el 1 de julio de 1881, con treinta y dos páginas escritas por el propio Martí y el 15 de ese mes.

     Posteriormente decide buscar mejor posición en Venezuela, a donde llega el 20 de enero de 1881. Funda la Revista Venezolana, de la que edito sólo dos números. Después de chocar con el caudillismo, tiene que volver a Nueva York.

     El 2 de octubre de 1884 se reúne por vez primera con ambos líderes (Máximo Gómez y Antonio Maceo) y comienza a colaborar en el Plan Insurreccional Gómez-Maceo; posteriormente desistió por estar en desacuerdo con los métodos de dirección empleados.

El principio del fin

     En 1887 fundó una Comisión Ejecutiva, de la cual fue elegido presidente, encargada de dirigir las actividades de los revolucionarios. En 1892 redactó las Bases y los Estatutos del Partido Revolucionario Cubano. En el mismo año resultó electo de esa organización, cuya constitución fue proclamada dos días después. El 14 de marzo fundó el periódico Patria, órgano oficial del Partido.

     En los años 1893 y 1894 recorrió varios países de América y ciudades de Estados Unidos, uniendo a los principales jefes de la Guerra del 68 y reuniendo recursos para la nueva contienda. Desde mediados de 1894 aceleró los preparativos del Plan Fernandina, con el cual pretendía promover una guerra corta, sin grandes desgastes y destrucciones para los cubanos. El Plan Fernandina fue descubierto, Martí decidió seguir adelante con los planes de pronunciamientos armados en la Isla, en lo que fue apoyado por los principales jefes.

     En enero de 1895, junto con Mayía y Collazo, firmó la orden de alzamiento y la envió a Juan Gualberto Gómez para su ejecución. Partió de inmediato de Nueva York. En República Dominicana, donde lo esperaba Gómez, con quien firmó el 25 de marzo de 1895 un documento conocido como “Manifiesto de Montecristi”, programa la nueva guerra. Ambos líderes llegan a Cuba el 11 de abril de 1895, por Playitas de Cajobabo, Baracoa.

     Tres días después del desembarco, hacen contacto con las fuerzas del Comandante Félix Ruenes. En abril de 1895 los jefes allí reunidos bajo la dirección de Gómez, acordaron conferir a Martí el grado de Mayor General por sus méritos

     El 28 de abril de 1895, en el campamento de Vuelta Corta, firmó la circular “Política de guerra”. Envió mensajes a los jefes indicándoles que debían enviar un representante a una asamblea de delegados para elegir un gobierno. El 5 de mayo de 1895 tuvo lugar su encuentro con Gómez y Maceo en La Mejorana, donde se discutió la estrategia a seguir. El 14 de mayo de 1895 firmó la “Circular a los jefes y oficiales del Ejército Libertador”, último de los documentos organizativos de la guerra, la que elaboró conjuntamente con Máximo Gómez.

     Siguiendo la marcha hacia el oeste de la provincia oriental, llegaron a Dos Ríos, cerca de Palma Soriano. El 19 de mayo de 1895 una columna española se desplegó en la zona y los cubanos fueron a su encuentro. Martí marchaba entre Gómez y el Mayor General Bartolomé Masó.

     Al llegar al lugar de la acción, Gómez le indicó detenerse y permanecer en el lugar acordado. En el transcurso del combate, se separó del grueso de las fuerzas cubanas, acompañado solamente por su ayudante Ángel de la Guardia. Martí cabalgó, hacia un grupo de españoles ocultos en la maleza y fue alcanzado por tres disparos, fue sepultado el día 27, en Santiago de Cuba.

A MÍ MADRE

Madre del alma, madre querida. 
Son tus natales, quiero cantar; 
Porque mi alma, de amor henchida,                                                                                                                         Aunque muy joven, nunca se olvida 
De la que Vida me hubo de dar.

Pasan los años, vuelan las horas 
Que yo a tu lado no siento ir, 
Por tus caricias arrobadoras 
Y las miradas tan seductoras 
Que hacen mi pecho fuerte latir.

A Dios yo pido constantemente 
Para mis padres vida inmortal; 
Porque es muy grato, sobre la frente 
Sentir el roce de un beso ardiente 
Que de otra boca nunca es igual.

[0C t. 17, p. 13]

LINDA HERMANITA MIA

Linda hermanita mía:

Feliz es el momento en que recibo

Carta tuya: feliz es este día

Porque en ti pienso y de mi amor te escribo.

Versos esperas tú que te enunciaba

Allá por la pasada noche-buena:

En el revuelto mar de mis papeles

No se sabe posar la paz serena

Y, pues que soy doncel, obro sin pena

Como obran desde antaño  los donceles:

Escribo, guardo, pierdo,

Te quiero mucho, y luego me perdonas,

Y, si a mí loco juicio, fuera cuerdo

Pensar un triste ornarse con coronas,

...