“Ética para amador” plantea aspectos de nuestra vida

“Ética para amador”

“Ética para amador” plantea aspectos de nuestra vida, de lo que nosotros hacemos y sobre lo que se basa nuestra libertad. El libro es escrito porque el autor le desea brindar principios básicos a su hijo, enseñanza sobre distintos temas de la vida, su punto de vista sobre esta.

Alguno de los temas principales y más importantes del texto es la Libertad, la libertar de elegir la forma en que vivimos; a diferencia de otras especies como los animales por ejemplo nosotros podemos inventar o elegir la forma de vivir, ya que esto nos hace ser parte de la ética; el vivir. Somos libres de decidir, somos libres de decir sí o no a lo que nos plantea la vida, decidir si un algo es bueno o malo; aunque a su vez hay que saber que no siempre lo bueno es del todo bueno, y lo malo es del todo malo, puesto que todo tiene sus matices. Por lo mismo hay que saber bien que nos conviene para tomar una decisión relativamente correcta, ya que no se puede elegir lo que nos pasa, pero si se puede escoger que hacer ante esto; por ejemplo, si hay un terremoto uno no puede haber impedido que este pasara, pero si podemos elegir cómo actuar ante él; si correr o quedarnos tranquilos. En nuestras decisiones o en la libertad que tenemos de actuar se encuentran las ordenes, la costumbre y los caprichos, actuar según lo que nos ordena la sociedad puesto que se supone esta bien, o actuar por costumbre ya que creemos es lo correcto o simplemente actuar por capricho,  pero hay que tener cuidado ya que no siempre una decisión es buena por el solo hecho de ser ordenada, estar acostumbrado o por capricho. Debemos ver más allá antes de decidir,  ya que nuestra decisión debe ser lo más racional posible, ver lo que me conviene y lo que quiero, a pesar del que dirán, o de la costumbre; para esto debemos pensar más de una vez antes de decidir o actuar.

“El arte de vivir”; darse la buena vida, dejar a un lado las ordenes y las costumbres, ser libre de preguntarse qué quiero de mi vida y hacerlo; pero esto a su vez tiene cierta contradicción, ya que no siempre esto te hace feliz, la vida es compleja y por sobre todo debemos humanizar y actuar con razón; ser justos, dignos y honestos. No convertirnos en unos “imbéciles” fastidiándonos a nosotros mismos, debemos tener conciencia, saber que no todo da igual y ver si lo que hacemos en realidad nos lleva a lo que queremos. Hacer lo que queremos pero sin dañar a otro, ser responsables sabiendo que cada uno de mis actos me va construyendo, definiendo; al elegir que quiero hacer me voy transformando poco a poco, día  a día. Como lo hizo el ciudadano Kane, quien solo quería riqueza, pero para recibir esto fue actuando egoístamente, maltratando a sus semejantes de una u otra manera hasta lograr quedarse solo; al final consiguió la riqueza que tanto quería pero no consiguió lo más importante que es sentirse humanizado, ser feliz.

“Ponerse en el lugar del otro”; vivir humanamente con otros, sin importar como sea el otro, ya sea ladrón, hable otro idioma, tenga otras culturas, etc. Hay que tratarlo como a un hombre, la ética es eso; como vivir bien la vida humana, vida humana que transcurre entre humanos. Hay un dicho: “como tratas te trataran”; esto es parte de una imitación, si tratamos bien las personas a su vez lo harán, si tratamos mal a otro estamos dando malos ejemplos y podemos lograr que estos actúen de la misma forma: “mientras más feliz te sientas y haces que se sientan los demás, menos malos se crearan”. Tratar humanamente es ponerse en el lugar de la otra persona, tomar en cuentas sus derechos, comprender lo que hace o siente, considerarle tanto como a uno mismo puesto que como dice Shakespeare “todos los humanos estamos hechos de la misma sustancia, de la que se nos teje los sueños”. Actuar humanamente posible es lo más importante, ya que la interacción con otros humanos es lo que nos complementa, lo que nos da real alegría o felicidad, o como quieran llamarlo.

Debemos ver siempre más allá, pensar más de una vez en la decisión que tomaremos, debemos actuar con moralidad, no hacer daño a otro. Ser más humano, ser placentero; saber aprovechar y sentir bien lo que se tiene, enriquecer la vida a base de buenas elecciones, pero no estamos lejanos a equivocarnos, eso es parte de la vida. Por ejemplo, en la política, de nosotros depende, ya que somos quienes elegimos, en una democracia todos somos política puesto que elegimos a quien se nos parezca para representarnos, actuamos éticamente eligiendo lo que más nos convenga, puesto que la policita organiza lo mejor posible la convivencia social. No se puede esperar la perfección de la política porque esta intenta ser más humana, menos violenta y más justo, tales como los humanos.

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