Arte, mitos y ritos

Arte, mitos y ritos

¿Qué decimos cuando hablamos de lo sagrado y lo profano? Bueno, es algo muy simple, por un lado, lo sagrado que es lo religioso y por otro lo profano, es decir, lo que no posee una carga religiosa. Su intención, es analizar el proceso de secularización de lo religioso en la modernidad. El término secularización se relaciona directamente con el adjetivo secular, que hace referencia a todo aquello que no pertenece a lo religioso. La secularización es, entonces, el proceso que transforma lo eclesiástico en secular. También esa palabra se utiliza para caracterizar al proceso que se vive por fuera de la esfera individual, como los que atraviesan las sociedades o las naciones. Así es como Emergen dos agentes históricos, el homo religiosus y su antagonista, el hombre moderno “arreligioso”.

Para hacer esta dualidad entre lo religioso o sagrado y lo irreligioso o profano en el plano cronológico, se analizan únicamente cuatro elementos: el espacio, el tiempo, la naturaleza y el cosmos, y finalmente, la praxis humana, es decir, la idea religiosa del hombre junto a sus prácticas religiosas. Según Cliffor Geertz “la religión no es tan solo metafísica", compromete el ethos y la cosmovisión” esta relación es esencial y le aporta al conjunto de valores sociales lo que requieren para ser represivos, ya que estos son manifestados como condicionantes en el sustento de una estructura especifica.

La religión tiene el propósito de mantener el fondo de significados generales que establecen las conductas individuales y dan la posibilidad de analizar la propia experiencia.

También habla del sistema religioso que es un conjunto de símbolos organizados en un todo, el número de símbolos es limitado. Estos impresionan en los ritos y en ellos se apunta tanto a los valores positivos como negativos, se trata de una síntesis sobre lo que el mundo es.

Existe un acto de manifestación de lo sagrado en la realidad llamado Hierofanía, algo de otro mundo que se expresa a través de un soporte material que adquiere naturaleza sobrenatural sin dejar de ser lo que es (objetos, "la naturaleza es susceptible de revelarse como sacralidad cósmica"). Así, las sociedades arcaicas solo atienden a la dimensión de lo sagrado por ser lo verdaderamente "real", y todo orbita a su alrededor. Por contraposición, para el hombre moderno, la realidad no posee ningún contenido de sacralidad, ninguna dimensión religiosa en cuanto a su concepción. Se dice que hay una pluralidad de concepciones religiosas según su contexto histórico (en lo económico, lo cultural la organización social) que conllevan distintos ritos y costumbres.

Hablando de ritos, se dice que sin rito no hay mito porque éste marca una conducta

de retorno al orden primero lo que quiere decir que desde que el hombre vive en sociedad

apela al mito ya que es una representación de la realidad, una historia vivida por un grupo como sagrada. Además, este posee diferentes características: plantea la existencia de lo sagrado, selecciona alguna parte de la realidad, posee más resistencia que otros géneros y presenta la estructura del conocimiento. Dice que “Implica una conducta de retorno al orden primero a partir de su instalación en el mundo, el hombre afirma una dimensión nueva de lo real.”

Continuando con este tema, El lenguaje del mito expone propiedades específicas que están sobre el nivel usual de la expresión lingüística. El sentido que tenga un mito depende de la forma en la que se combinen los elementos de la composición.

En cuanto al nacimiento de los mitos, se sostiene que surge de la unión entre efectos, los que están en la conciencia del contenido de las relaciones históricas de los hombres

entre si y con la naturaleza y los efectos del pensamiento analógico sobre el contenido de sus representaciones.

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