¿Cómo Ser Un Docente Justo?

INTRODUCCIÓN

El tema que trataré es sobre: ¿Cómo ser un docente justo?

Ser docente es algo complicado y más aun ser justo, ya que la justicia es un conjunto de valores esenciales como el respeto, la equidad, la igualdad y la libertad.

Hoy la tarea docente es compleja, porque los estudiantes proceden de historias sociales, de trayectos culturales y de aprendizajes humanos muy diversos, por eso los docentes deben formarse para que puedan generar multiplicidad de caminos hacia el aprendizaje a partir de la diversidad de experiencias sociales y familiares con que los niños llegan a la escuela.

Haré referencia a algunas de las características primordiales que debe poseer un docente justo.

DESARROLLO

El docente debe orientar a los alumnos a la creación y el descubrimiento, que surge de interrogar la realidad de cada día, generando espacios de reflexión. Esto permitirá formar individuos críticos, libres, democráticos, trabajadores, innovadores y con sentimientos nobles.

Un docente justo se esfuerza para que los alumnos hagan el mejor uso de sus posibilidades y potencialidades, es decir, que debe atender a la diversidad del aula, ya que cada individuo posee su propio mundo intelectual y emocional.

Para que un docente sea justo es necesario que brinde a todos los alumnos las mismas posibilidades para exponer sus posturas y para acceder a información pertinente con el fin de defender sus puntos de vista y sus derechos.

El docente debe fomentar en sus alumnos las ganas de ser partícipes en la sociedad como ciudadanos críticos, reflexivos, autónomos y responsables de sus acciones. Además proporcionará un espacio donde los alumnos puedan expones sus diferentes posturas pero remarcando el respeto por las ideas ajenas.

Cuando se habla de proporcionar el espacio de reflexión, también se habla de un espacio donde se valida y legitima en la deliberación colectiva, donde se recrean las verdades mediante argumentaciones.

Para que la construcción de una intervención pedagógica sea justa necesita de una actitud crítica, creativa y comprometida.

Un docente “justo” busca que los estudiantes participen activa, creativa y responsablemente en la construcción de una comunidad democrática, en la que se reconozcan a sí mismos y a los otros como sujetos de derecho e iguales en dignidad.

Además el docente debe orientar, potenciar y fortalecer el desarrollo de la democracia no solo como sistema político, sino también, como el estilo de vida que favorece una convivencia social, justa y armónica. Por ello cuando el docente educa para la democracia está favoreciendo el desarrollo de la capacidad de actuar cívicamente sobre la base de valores como la justicia, la libertad, la honestidad, el respeto, la responsabilidad y la tolerancia.

El docente aspira a formar ciudadanos conscientes, reflexivos, identificados y comprometidos como miembros de una sociedad diversa, pero que a la vez está unida por objetivos en común y prepararlos para vivir en una sociedad multicultural.

El docente deberá promover y dinamizar la participación activa y responsable de l os estudiantes en el abordaje y solución de asuntos y problemas propios de sus entornos, a partir del diálogo, el debate, la reflexión, la clarificación de valores y su puesta en práctica mediante la ejecución de proyectos.

CONCLUSIÓN

A modo de cierre de todo lo expuesto anteriormente, considero que para que un docente sea justo debe propiciar las condiciones necesarias para que los alumnos puedan construir de manera autónoma, reflexiva y crítica sus propios valores, y para que puedan justificar sus propias acciones ante los demás.

Creo

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