De La Filosofía A La Ciencia

¿Por qué existe la ciencia?

Para tratar de responder esta pregunta, sobre todo desde el punto de vista de la filosofía, donde la visión del mundo depende en gran medida de la forma de ver del filósofo en cuestión, y es precisamente esta subjetividad en la visión de lo que es o debería ser el mundo la que obligó al hombre como especie impulsados por individuos a buscar la forma en que todo ese conocimiento y visiones dispares, convergieran en unanimidad para crear una visión objetiva e integral sobre lo que el mundo fue, es y será.

Desde los inicios del hombre, siempre han surgido preguntas existenciales, que si bien, al principio no existían metodologías ni procedimientos ni bases de conocimiento de ningún tipo más que los que podían percibirse mediante la observación. Los primeros filósofos como Sócrates, observaban y reflexionaban sobre los hechos del mundo que los rodeaba, y se preguntaban el porqué de las cosas.

A lo largo de las culturas del hombre, en distintos lugares alrededor del espacio y del tiempo, el hombre ha intentado responder estas preguntas que nacían de la curiosidad de observar y de lo más importante, concientizar de la propia existencia.

Desde la cultura china, hasta la india, la hebrea y la más conocida, la griega, ha habido formas de concebir la vida y el universo muy diferentes.

Tomando en cuenta la evolución de las culturas, los intercambios de conocimiento entre una y otra, y la necesidad siempre presente de responder lo más fiel a la verdad posible, podemos deducir que la ciencia no es algo que simplemente apareció por arte de magia, o de un día para otro, sino una respuesta, una solución paulatina, cada vez más refinada para un problema recurrente en nuestra especie: La necesidad de conocimiento y del porqué de las cosas.

Poco a poco fue evolucionando el pensamiento universal de la raza humana, pasando por diferentes visiones como el idealismo, el empirismo, etc. Tratando distintos ámbitos: desde el motivo de la vida humana, el comportamiento, hasta el origen de la vida. Es así como poco a poco la ciencia se formó a sí misma universal, objetiva y práctica, pues busca la verdad, y la verdad luce similar desde diferentes puntos de vista.

Una vez que se comenzó a dar formalidad y convertir la protociencia en ciencia mediante métodos plasmados de forma escrita en documentos y procedimientos replicables y aplicables en cualquier lugar del mundo por personas con un mínimo de conocimiento básico y curiosidad; comenzó a avanzar en todos los ámbitos del hombre lo que hoy conocemos como progreso.

La ciencia llegó formalmente como el conjunto de fines provistos de herramientas para lograr contestar a preguntas inductivamente: de las más específicas a las más universales y generales.

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