El amor una puerta que abre y cierra el inconsciente

El amor una puerta que abre y cierra el inconsciente

En un principio hemos de abordar conceptos y premisas del amor visto desde el psicoanálisis, tales como el tiempo, la historia, las clases de amor, la falta de ser en el sujeto, la identificación (amor narciso), para luego introducirnos en el mundo contemporáneo relacionando vivencias diarias y percepciones del amor a través de canciones, que nos permitirán ver de cerca un poco más nuestra realidad, para finalmente llegar a una conclusión.

La historia del humano inicia en el momento del nacimiento donde “no sabe quién es, qué sexo tiene, a qué familia pertenece, en qué lugar del mundo vive” (Bernal, s.f., p. 130) cosa que conocerá a través del lenguaje donde su repuesta está condicionada por el saber y no por el ser, que no tendrá jamás, por lo que pasará toda su existencia buscando esta falta de ser en un lugar u otro, y que generalmente estará vinculado con el amor, donde se busca un refugio para velar su carencia de ser fundamental.

Indudablemente, el sujeto viene al mundo a través de una familia o al menos a través de una madre, pero si bien, estos solo son partícipes de su nacimiento y por ende cada sujeto en el mundo es un ser en soledad, que radica en la imposibilidad de ser parte del mundo a pesar de convivir en el mismo, de allí que necesite remitirse a otro, de quien espera ser correspondido. Esto, a su vez, comienza a constituir una elección del objeto en concordancia con unas condiciones de tipo narcista, quiere decir que se identifica en la otra persona, ya que lo que verdaderamente ama es la imagen de sí mismo que ve en el otro.

Esta relación de amor tiene como lazo un cierto “sistema de deberes y derechos, de potestades y soberanías, en los que queden comprometidos” (González, s.f., p. 14), pero en este mismo se da el poder y en la mayoría de casos uno de los dos puede hacerse con él, por eso hay un juego entre ser objeto de deseo y sujeto que desea, pues ambos no se pueden dar al mismo tiempo, por ello uno de los dos siempre se hallará en desventaja, como ocurre en los casos donde uno de los amantes se encuentra a la deriva y esto lo hace convertirse en un esclavo del amor, pues está convencido que el objeto de su amor, es quien le da sentido a su vida.

En lo referente al tiempo “el amor no tiene historia, es puro presente, es aquí y ahora, sin huella que permita recuperar su vivencia en el futuro” (González, s.f., p. 13), por esto cuando las parejas que se aman terminan, recuerdan los momentos con nostalgia, se sienten tristes,  añoran volver a vivir aquello, pero ya es demasiado tarde porque esos momentos ya no regresaran y es precisamente por esto que el amor hay que disfrutarlo cuando se da; así el mundo social y las tradiciones tachen esto de locura, de hecho ya es una locura y quien lo tome como algo racional que se predetermina y sigue ciertos lineamientos se va a perder de aquello que por ser inesperado puede ser sorprendente.

A menudo creemos en el amor de un tipo o de otro, porque encontramos en la historia algo que nos identifica, ya sea el pasional del siglo XVII, el caballeresco, el romántico, la pasión que se deleita en ser alguien para el amado “El mío difiere de todos los males, pues me place; en él me complazco (…) sufro gratamente, y tanta alegría hay en mi dolor que estoy enfermo de delicias” citando a Chrétien de Troyes citado en (González, s.f., p. 13), y de esta manera hacemos referentes y supuestos, pero que pasaría si ese sentimiento no pudiera nombrarse como amor y que las personas no supieran, ni tuvieran rastro de lo que llamamos amor, cómo amaríamos, cuántos estaríamos enamorados. Una buena pregunta, que por lo menos nosotras no le daremos solución.

Estas interpretaciones y deducciones las sacamos de la historia y el tiempo, y hasta justificamos muchas veces el desamor con el tiempo, decimos que lo desgasta; entonces aparecen las telenovelas y películas que justifican ciertos pensamientos sobre ello; cuando la novela o película termina generalmente con un fueron felices y todo se arregló en un instante ampliado lleno de gloria, de festejos que idealizan a la felicidad y al amor en una reducción de momentos.

En este punto puede decirse que hemos hablado de los conceptos y un poco de la teoría sobre el amor, así que ahora tocaremos un poco nuestro mundo.

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