Fundamento Y Esencia De La Verdad

Fundamento y esencia de la verdad

Ordinariamente se entiende por verdad lo real. La definición tradicional de la verdad: veritas est adaequatio rei et intellectus o mejor aun: veritas est adaequatario intellectus ad rem (la verdad es la adecuación del conocimiento con la cosa), entraña un sentido de conformidad, de concordancia y lo contrario a la verdad (lo falso) es la falta del sentido de concordancia.

Un juicio es falso cuando no se presentan las cosas tal como son aunque aun en los juicios falsos se encuentran elementos verdaderos. En un pensamiento en el que no se identifica con ninguna cosa será imposible.

Gracias a las facultades cognitivas del hombre, estas lo han llevado a la verdad.

Al afirmar la veracidad de nuestras facultades estamos muy lejos de caer en el error por el exceso de racionalismo.

“La verdad es descubrimiento, revelación de lo existente”.

Martin Heidegger expresa de su estudio titulado De la esencia de la verdad : “si sólo mediante la aperticidad del comportamiento de la conformidad (verdad) de enunciado se hace posible, lo que hace entonces posible conformidad posee un derecho mas original de ser considerado como la esencia de la verdad”. Esto se es fundamentado en la libertad, la cual es identificada como verdad del hombre.

Esto no es subjetividad arbitraria porque trata de entregarse a lo real y el manifiesto de un “dejar ser” al ente.

“La pregunta por la esencia de la verdad encuentra su respuesta en la esencia: la esencia de la verdad de la esencia”.

Al idealismo de “Ser y tiempo” sucede ahora un realismo : el hombre esta abierto a la verdad, pero no la engendra.

Todo hombre esta empeñado en la indagación de la verdad y cuando se descubre se pega al alma y le infunde vida interior.

El hombre no inventa la verdad, se acerca a ella y la recoge con reverente humildad.

Nacimos para la verdad, aunque nos empeñemos algunas veces en vivir en el error.

Realidad = Verdad. Esto lleva ya implícita la afirmación de una verdad no creada por la mente humana. La verdad nos preexiste y nos trasciende.

Nuestra razón enuncia juicios verdaderos porque ve en la inteligencia, las verdades primeras, o idea, o principios.

La inteligencia intuye; la razón concluye.

El origen de las verdades inmutables, necesarias y universales, es Dios.

La validez de nuestros juicios está respaldada por la objetividad de normas o principios en base a los cuales la razón juzga. La verdad que hace que la razón sea verdadera, sobrepasa y trasciende a esa misma razón. La verdad intuida no encuentra su adecuada subsistencia real en ninguna cosa existente.

De no haber una verdad absoluta no habría una verdad alguna.

Cuando la verdad nos posee, surge la ciencia. La verdad para los griegos una propiedad del ser real. La verdad de las cosas en cada existencia del hombre supone que aquellas están propuestas a este.

La presencia humana en el mundo posibilita la verdad. La inteligencia reviste la forma mima de las cosas.

Medimos la verdad por el objeto, pero esta medida incluye libertad y elaboración creadora de lo externo.

“La verdad

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