LA ENTREVISTA INICIAL CON PADRES EN EL CASO DE ADOLESCENTES
eliza_blackSíntesis15 de Febrero de 2015
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UNIVERSIDAD NACIONAL DE TUCUMÁN
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
CÁTEDRA: Teoría y Técnicas de Exploración Psicológica
Niños y Adolescentes
AÑO: 1999
LA ENTREVISTA INICIAL CON PADRES EN EL CASO DE ADOLESCENTES
ADMINISTRACIÓN DE LA TÉCNICA.
AUTORA:
M. Natalia Gronda
Trabajo final de Ayudantía Estudiantil.
E-mail: ngronda@hotmail.com
LA ENTREVISTA INICIAL CON PADRES EN EL CASO DE ADOLESCENTES
ADMINISTRACIÓN DE LA TÉCNICA
El presente trabajo intenta proporcionar, a través de un caso clínico, una aproximación a la técnica de la entrevista con fines diagnósticos, en especial a la manera en que puede ser conducida con una modalidad semidirigida.
La entrevista constituye el primer momento de todo Proceso de Evaluación Psicológica, es el primer paso que va a llevar a cabo el psicólogo con el objetivo de conocer la personalidad del niño y de la familia que consulta. Facilitará asimismo la elaboración de hipótesis acerca de la conflictiva del niño como “paciente designado”, es decir, como emergente de un grupo familiar.
Es importante referirnos al caso específico de la Entrevista inicial en el caso de adolescentes y ya que lo que nos ocupa es la administración de la técnica, cabe preguntarnos: ¿a quién citaríamos para la entrevista inicial?. Seguramente si el llamado lo hacen los padres de un niño, el primer contacto será con ellos. En el caso de adolescentes tempranos es diferente. A veces es el mismo adolescente quien llama, y entonces las primeras entrevistas se realizan con él. Sólo a posteriori, generalmente antes de decidir si va a ser necesario o no un tratamiento y de qué naturaleza, será imprescindible incluir la entrevista con los padres, no sólo para tomar esa decisión, lo cual se plantea como una cuestión ética, sino también como una forma de recabar datos de la historia del paciente.
Es diferente en el caso del adolescente tardío, pues probablemente ya tiene independencia económica y mayoría de edad como para poder afrontar la responsabilidad de un contrato terapéutico por sí mismo. La opinión de los padres puede influir pero no tanto o quizá ya no influya. Pero tratándose de niños y adolescentes tempranos es imprescindible contar con la presencia y la colaboración de los padres.
En el caso en que sean los padres del adolescente quienes soliciten la consulta, podemos realizar con ellos la primera entrevista, si es que así lo deciden; siempre permitiéndoles, antes de concertar la cita, que sean quienes conversen y decidan con quién se va a establecer el encuentro.
Este trabajo hace referencia a una entrevista obtenida por un alumno de la materia Teoría y Técnicas de Exploración Psicológica ( Niños y Adolescentes) y por lo tanto sin un motivo formal de consulta. La misma fue solicitada por el propio entrevistador, con fines de práctica, a la madre de un adolescente, por lo cual no pueden considerarse las cuestiones anteriormente citadas acerca de con quién convendría realizarse la primera entrevista. Sin embargo, este caso es igualmente válido y útil desde un punto de vista didáctico para hacer señalamientos acerca de la administración de la técnica.
Con este fin se incluirá a continuación la transcripción de la pre-entrevista y entrevista escogidas, para luego, párrafo por párrafo, realizar las observaciones acerca de la administración de esta técnica.
CASO ALEJANDRO
PRE-ENTREVISTA
La pre-entrevista se realizó el mismo día que la entrevista, acordando por teléfono la hora y el lugar del encuentro. Ante el pedido de la presencia del padre, la madre del adolescente respondió que no sería posible porque su marido estaría trabajando en ese momento, sin embargo aseguró que lo consultaría con él.
La entrevista se llevó a cabo en casa del entrevistador y duró aproximadamente 60 minutos. Se aclaró que la misma sólo tenía como fin practicar una técnica, por lo que no habría devolución de información.
DATOS DE FILIACIÓN
Nombre: Alejandro
Fecha de nacimiento: 04/01/83
Edad: 16 años
Escolaridad: 1º año. Escuela pública (turno noche)
GRUPO FAMILIAR
Madre: 43 años, empleada de comercio.
Padrastro: 56 años, empleado en empresa privada.
Alejandro desconoce que no es su padre biológico.
Hermanos: Valeria, 19 años, estudiante
Mateo, 6 meses (medio hermano por parte materna)
ANTECEDENTES DE IMPORTANCIA
El padre tiene dos hijos mayores de un matrimonio anterior: una mujer (casada y con hijos) y un varón.
TRANSCRIPCIÓN DE LA ENTREVISTA
E (entrevistador): Hablame de Alejandro.
M (madre): Qué te puedo decir... es un dolor de cabeza constante, es tremendo, muy inmaduro. Es el más chico, era el único varón, muy sobreprotegido y de grande siguió siendo así. Recién está creciendo psicológicamente. Siempre hizo amistades con chicos más chicos que él. Es como que se sentía cómodo en su niñez, no quería dar paso al otro período de la adolescencia. Ahora es más responsable en ciertas cosas y en otras no, es más rebelde, más desobediente en algunos aspectos. Por ejemplo, para bañarse es una lucha constante, tengo que andar preguntándole si ya se ha bañado ordenándole que se bañe. No tiene problema en que pase una semana sin bañarse. Al principio pensaba que nosotros estábamos fallando como padres, pero hablando con otras madres, me dijeron que es normal a esa edad. Los chicos siempre están solos porque los dos trabajamos y esa yo creía que era la causa. Pero cuando son ya rebeldes... eso es normal. Con mi hija se han criado de la misma forma, con los mismos gustos y necesidades, y ella es responsable. Él es desobediente en algunos aspectos. No le gusta estudiar, aunque ahora está un poquito mejor, ahora agarra las carpetas. Es jodido para comer, no es de comer cualquier cosa. Como todo vago (sonríe), es exigente para comer, para la ropa... es como que está en la edad del pavo: quiere estar bien, quiere estar bien vestido. No nace de él trabajar, hacer algo más importante. Hay que estar preguntándole “¿qué tenés que hacer?”, “¿qué has hecho?”. No nace de él. No es eso lo que le gusta, lo estoy obligando, por eso lo hace, a él le da lo mismo.
E: ¿Y vos qué creés que él tendría que hacer para ser responsable?
M: Lo que yo pretendo es que él sea responsable en sus cosas. Si su responsabilidad es estudiar, que nazca de él, que a él le guste, que sea responsable en cada cosa que tenga que hacer. Si yo salgo y le digo “quedate en la casa...”, él espera que yo de vuelta la esquina y se va. Yo le estoy confiando algo a él, entonces que me responda. Para la edad que tiene, yo le pido que sea un poco más responsable. Por otra parte, yo sé que no todos los hijos e hijas son lo mismo. Cada uno tiene su propia personalidad, sus propias ganas de hacer o no hacer. No sé si tendrán que ver las amistades. Yo siempre le digo que busque rodearse de buenas personas, para así poder ser mejor persona él. Desde la escuela primaria hasta ahora, siempre estuvo apartado de los buenos alumnos. En el barrio hay todo tipo de gente, los chicos fuman, toman... él siempre se junta con los peores. Cuando son chicos, uno les da unos azotes y un tiempo se portan bien; pero cuando son grandes, antes del castigo, de pegarles, uno piensa “¿qué reacción podrá tener?”, “¿Y si en vez de recapacitar lo interpreta yéndose de la casa?. Hoy en día es difícil tratar de entender a los chicos en esta edad.
E: ¿Cómo lo manejan con tu marido a este problema?
M: Es complicado. Mi marido prácticamente no está en la casa. El fue criado de una forma...!, a los ponchazos -como yo siempre le digo-. Toda la vida ha hecho Io que ha querido. Nunca ha sabido darles una buena educación a los hijos. Yo no tengo el apoyo de mi marido. El cree que el hombre es para trabajar y nada más, el resto es para Ia mujer. El no le reclama ni castiga en el momento preciso. Cuando hay broncas por otras cosas -como el trabajo- lo castiga malamente. El chico se desubica. Para mí eso está mal. Siempre hubo un problema. Yo lo quiero, no porque se porte mal..., nunca lo he dejado de querer. Nunca me ha gustado que les pegue a mis hijos, a ninguno de mis hijos. Por eso siempre lo estaba desautorizando. Quizás por eso son hoy lo que son.
E: ¿Cómo es el comportamiento de Alejandro en la escuela?
M: Hasta 3º grado fue muy buen alumno, pero ya en 7º era un desastre. Ya no era buen alumno, tenía mala conducta, era muy travieso. En la secundaria, el primer año Io hizo en turno diurno. Era mal estudiante, siempre tenía mala conducta, no trabajaba en la clase casi nunca. Hay un total desinterés en él en cuanto al estudio. Él, para todo lo que sea joda... es vivísimo.
E: ¿Qué ocupación tienen vos y tu marido?
M: Él es empleado de una empresa de vigilancia privada. Yo también soy empleada, pero no en los libros, en negro, entonces, como no figurás, es como que sos ama de casa no más.
E:¿Quiénes viven con Alejandro?
M: Nosotros cuatro, cinco con el bebé.
E: ¿En qué aspectos sentís que hay discrepancias con tu marido en relación con la crianza de Alejandro?
M:
...