Ética a Nicómano- Aristóteles Reporte

Ética a Nicómano- Aristóteles

Reporte capítulos I, II, III, IV y VI

En estos capítulos se da a conocer como Aristóteles, desde su filosofía, plantea el por qué del comportamiento del hombre y cual es el proceso que lo lleva a actuar cierta manera.

En el capítulo uno se habla y se define la Recta Razón, la cual, en resumidas palabras es la facultad cognoscitiva del hombre, es decir, que sirve para conocer, no obstante, la recta razón siempre es infalible pues es el punto de referencia objetivo.

Posteriormente en el capítulo dos, habla de las tres cosas propias del alma, las cuales son el sentido, el entendimiento y el apetito. El sentido, es el que viene antes del entendimiento, puesto que, un hombre falto de todos sus sentidos no podría comprender absolutamente nada y sería como un niño que aún está dentro del vientre de su madre. El entendimiento, por su parte, es la verdad, y la verdad es solamente contemplativa, a lo que se concluye que el entendimiento no sirve para hacer o cosa alguna; es ahí cuando entra el apetito, el cual se define como el deseo que se da por causa de alguna cosa.

Luego, en el capítulo tres, se habla acerca de los cinco hábitos del entendimiento; arte, ciencia, prudencia, sabiduría y entendimiento. Aquí sobre todo deja en claro lo que es la ciencia, la cual es un hábito demostrativo y nos dice que toda ciencia se puede enseñar, y todo lo que se puede saber, se puede aprender.

En el capítulo cuatro, por su parte, nos habla del arte. Aquí Aristóteles se refiere al oficio y de esta forma distinguirla de la ciencia, ya que el arte es mucho más general y cualquier ciencia es arte. También nos muestra dos formas de arte una que es a través del entendimiento y otra por medio de la razón, en conclusión para Aristóteles el arte es un hábito en el cual las cosas pueden suceder de otra manera.

Finalmente en el capítulo cinco, aborda como Aristóteles hace la comparación entre la incontinencia y la incontinencia del enojo, ya que para Aristóteles el enojo no consulta a la razón, si no más bien es una parte reactiva del hombre y por lo tanto no está en sus manos. Sin embargo, parece ser que el enojo escucha a la razón pero no la percibe bien y el deseo, por su parte, no la escucha y por esto es más vergonzoso.

Concluyo pues, que la recta razón del hombre, es la que nos sirve para actuar de buena manera, que las tres cosas propias del alma son las que nos hacen, de cierta forma, un ser racional y pensante y no un animal sin razonamiento; que los cinco hábitos del entendimiento son los canales por los cuales podemos comprender las cosas, y que el enojo y él deseo abordan a la razón de maneras muy diferentes.

Me atrae la filosofía de Aristóteles y estoy de acuerdo sobre las tres cosas

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