Continente Americano El continente americano, aspectos generales y su división política

Continente Americano

El continente americano, aspectos generales y su división política.

América es el segundo continente más grande del planeta, después de Asia. Ocupa gran parte del hemisferio occidental de la Tierra. Se extiende desde el océano Glacial Ártico por el norte hasta el Cabo de Hornos por el sur, en la confluencia de los océanos Atlántico y Pacífico, los cuales a su vez delimitan al continente por el este y el oeste, respectivamente. Con una superficie de más de 42 000 000 km², es la segunda masa de tierra más grande del planeta, cubriendo el 8,3% de la superficie total del planeta y el 30,2% de la tierra emergida, y además, concentra cerca del 12% de la población humana. La misma, está separada del resto de los continentes por grandes distancias, salvo el continente asiático de que dista 89 km en el estrecho de Bering.

América comenzó a tener un contacto masivo y significativo con el Viejo Mundo a partir de 1492 por Cristóbal Colón, aunque existen vestigios de asentamientos vikingos datados en el siglo XI, y que forman parte del patrimonio mundial de la Unesco División política de América.
Éste es uno de los cinco continentes en que se ha dividido la Tierra (junto con Asia, África, Europa, América y Oceanía, que serían seis si agregamos la Antártica).
Dividida la Tierra, en el meridiano de Greenwich, en dos hemisferios, toda América está en el Hemisferio Occidental. A partir de ahí, América  está dividida de polo a polo, en la línea del ecuador y podemos ver que América del Norte, junto con Centroamérica y parte de Sudamérica, se encuentran en el Hemisferio Norte, mientras que el resto es América del Sur (la mayoría del territorio) se localiza en el Hemisferio Sur. Comúnmente, podemos ver e identificar a América subdividida en tres regiones o subcontinentes: América del Norte, América Central y América del Sur.

En América hay islas muy grandes, como la Groenlandia, la más grande del mundo, que forma parte del archipiélago Ártico. También hay islas más pequeñas, como las de Puerto Rico y Jamaica localizadas en el archipiélago de las Antillas. Frente a Ecuador, está el Archipiélago de las Galápagos, famoso por tener una fauna única en el mundo; al sur está Pascua, famosa por sus restos arqueológicos y las de Juan Fernández, una de las cuales fue el escenario de las aventuras de Robinson Crusoe.

En el litoral del océano Pacífico se encuentras dos penínsulas: Alaska y Baja California. En las costas del océano Atlántico se localizan las penínsulas de Labrador, Florida y Yucatán. 
Entre las islas y las penínsulas se forman golfos y bahías. El Golfo de México es el más grande; también están la Bahía del Hudson, el Golfo de San Lorenzo, el Golfo de California o Mar de Cortés y el Mar Caribe. América limita al oeste con el océano Pacífico, al este con el Atlántico, al norte con el océano Ártico y al sur con el Paso de Drake (que separa a la Antártica de América), en aguas jurisdiccionales de Chile .Las formas del relieve y los rasgos característicos de América impresionan por la magnificencia de los Andes a través de 7.500 kilómetros; la extensión de las tierras orientales, especialmente de la gran cuenca amazónica; la dislocación o separación de los relieves centroamericanos y antillanos; la altura del "techo" de América latina (altiplano boliviano); la valiosa riqueza que existe en las montañas antiguas (zócalos) o recientes (cordilleras), y la enorme potencialidad de las tierras bajas (llanuras y valles), hacen del continente americano un sector que aún se explora y atrae.

En términos generales, en todas partes los relieves montañosos o accidentados tienden a separar a los países y son difíciles de transformar por la actividad humana; en cambio las tierras bajas facilitan la vida de relación y el poblamiento.

A través del tiempo América ha experimentado una evolución geológica cuyo resultado es el aspecto que ofrece actualmente. Las estructuras más antiguas se remontan a la época precámbrica y son el Escudo Canádico y los macizos de Guayania, Brasilia y Patagonia.

El relieve americano es modificado constantemente por diversos factores naturales, algunos internos de la corteza terrestre y otros externos, como la lluvia y el viento que han tallado insólitas formas en las rocas, como en las rocas de Talampaya (Argentina).

América se caracteriza por el gran desarrollo de sus llanuras y por tener un gran desarrollo en el sentido latitudinal, ya que presenta todos los tipos de clima, desde los cálidos hasta los fríos con todas sus variedades. El clima cálido tiene un gran desarrollo en América y presenta tres variedades: ecuatorial, subecuatorial y tropical.

El mar actúa como un regulador de la temperatura, atemperando las diferencias de las mismas en la zona costera. Las temperaturas de éste continente se estudian por medio de isotermas.  El continente americano se encuentra en bajo la acción de centros ciclónicos y anticiclónicos permanentes y estacionales.

El descubrimiento de América ha tenido extraordinaria influencia en los destinos de la humanidad .Desde la época en que los navegantes españoles y portugueses que se han apoderado de  las diversas regiones de este Continente, llegando desde las orillas del Atlántico a las del Pacifico, América ejerció marcando predominio en la suerte política de Europa.

América se halla entre el océano Atlántico y el Pacífico. Se extiende desde el océano Glacial Ártico, al Norte, hasta el océano Glacial Antártico al Sur, con una longitud de 14.000 kilómetros.

Tiene un total de 42.262.142 kilómetros cuadrados. De ellos, América del Norte tiene 23.880.192 km2 y 440.302.196 habitantes y América del Sur, 17.819.1000 km2 y 375.000.000 habitantes.

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América del Norte

Es un subcontinente que forma parte de América, situado en el Hemisferio Norte.

Sus costas son muy irregulares y desgarradas, sobre todo en la porción septentrional del continente, debido a que esta región fue afectada por la cuarta glaciación. Debe destacarse que no todos sus accidentes costeros tienen el mismo origen, pues la glaciación no afectó a todo el continente, sino principalmente a la porción septentrional. Entre sus accidentes costeros se destacan grandes golfos, amplias bahías y extensas penínsulas.

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