Operación Cóndor
natae_e26 de Agosto de 2012
2.760 Palabras (12 Páginas)1.512 Visitas
Introducción
En vista de que las oligarquías nacionales se mezclaron con los intereses estadounidenses durante la guerra fría y su acción ideológica influyó en gran medida sobre los ejércitos nacionales, fueron apareciendo las conocidas dictaduras militares, que a su vez provocaron la creación y confrontación de gobiernos progresistas (o izquierdistas) que les hicieron frente, detonando así una bomba de tiempo que estalló en su contra, siendo rápidamente acallados (asesinados) o desaparecidos en otros países ajenos al propio con la excusa de asilo político, y dando inicio a una gran cadena de masacres internacionales mejor conocidas como Operación Cóndor.
En este sentido, dicha operación fue una jugada estratégica patrocinada por Estados Unidos para mantener su hegemonía, la cual, tras la derrota de Vietnam y la humillación de Cuba, se vio afectada; y para lo cual utilizaron a los países del Cono Sur y esta infame coordinación de operaciones como “policía” de la lucha contra la democracia y el progreso.
Conceptualización.-
Operación Cóndor o Plan Cóndor; nombre asignado a un plan de inteligencia y coordinación entre los servicios de seguridad de los regímenes militares del Cono Sur: Argentina, Chile, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, la contrarrevolución cubana y los Servicios Secretos de Francia en la década de los años 1970, y que se constituiría en una organización clandestina internacional para la práctica del Terrorismo de Estado con la cooperación de Estados Unidos con el fin de eliminar las voces opositoras, principalmente de la izquierda.
Objetivo general.-
Dar a conocer más sobre este hecho, en el que se han visto involucrados gran parte de los países latinoamericanos.
Objetivos específicos.-
• Exponer el poder de las potencias sobre los países tercermundistas.
• Exponer la poca integridad de los presidentes y militares involucrados, para con su gente.
• Dar a conocer las consecuencias económicas, psicológicas y políticas que quedaron tras la operación.
Justificación.-
Este trabajo tiene como finalidad demostrar el abuso del poder en la época de las dictaduras, la impotencia del pueblo ante la imposición de los altos cargos militares y el gran poder que ejercía (y ejerce todavía en la actualidad) Estados Unidos sobre los gobiernos latinoamericanos.
Desarrollo del tema.-
Principales procesos sociales intervinientes en la creación de la Operación Cóndor.-
Existen una serie de procesos estructurales complejamente entrelazados que contribuyeron a la creación de esta operación:
El primero es la estrecha relación entre las oligarquías nacionales y la de los países centrales, que determinó el desarrollo del Cono Sur, un enlace entre la estructura del poder local e internacional adecuado para el sistema de producción de los países periféricos. El dominio se concentró en una oligarquía de comerciantes y latifundistas apoyados por el ejército, que junto a la pasividad de las masas dieron rienda suelta a su codicia, haciéndose con el poder económico total y propiciando las dictaduras.
Si bien al principio éstas fueron aisladas y no se cuestionaba la legitimidad de la democracia, con el tiempo, y al ser cada vez más recurrentes, los trabajadores se organizaron en numerosas entidades, surgiendo así la clase media (principalmente urbana). Para un control social más estricto, fue prioritario establecer relaciones sociales convenientes a los intereses de las potencias y privilegios de ciertos grupos minoritarios, desprotegiendo las necesidades colectivas, disminuyendo la calidad de vida y obligando a millones de ciudadanos a sobrevivir como sea.
Remitente al segundo proceso, está la íntima relación entre la potencia hegemónica de Estados Unidos y los grupos dominantes locales.
Después de la derrota de la guerra de Vietnam y el triunfo de la revolución socialista en Cuba, La Casa Blanca necesitaba recuperarse de la humillación e incidir en cualquier gobierno anti norteamericano para seguir dominante en la región. Para ello se creó la Doctrina de Seguridad Interna, que supuestamente consistía en la instrucción y desarrollo de las fuerzas militares y paramilitares en los países latinoamericanos, siendo en realidad centros de adiestramiento para torturar, fabricar bombas con instrumentos caseros y demás atrocidades que posteriormente se pondrían en práctica con los exiliados.
Sólo entre 1970 y 1973, se invirtieron 4300 millones de dólares para difundir dicha doctrina bajo el nombre de “Escuela del Ejército de las Américas”.
En oposición a los dos procesos anteriores, surgieron en el Cono Sur gobiernos socialistas y nacionalistas que provocaron una movilización de los sectores populares y medios, logrando así hacerle frente a la oligarquía. Aparecieron los grupos guerrilleros PRT, Montoneros, Tupamaros y MIR, cuyo optimismo desvalorizaba a sus oponentes mientras éstos organizaban una contraofensiva con el Apoyo de Washington. Sin duda la gota que rebalsó el vaso.
La represión estatal fue infinitamente violenta; torturó, mató y desapareció a cientos de personas; infló hechos de violencia por parte de las guerrillas y manipuló noticias. Apoyándose en la Doctrina de Seguridad Nacional, todo civil considerado como enemigo fue eliminado, mientras que los adeptos al régimen se enriquecían gracias al Estado.
De esta manera el Cono Sur se vio asolado por cuatro tipos de dictaduras:
La Personal: Paraguay (con el Gral. Stroessner, 1954 1989). Las Burocráticas y Desarrollistas: Argentina (1966 – 1970) y Brasil (1964 – 1985). Las Nacionalistas y Reformistas: Bolivia (Gral. Torres, 1970 – 1971) y Perú (Velazco Alvarado, 1968 – 1975). Finalmente, Los Regímenes Terroristas y Neoliberales: Argentina (1976 – 1983); Bolivia (1971 – 1978); Chile (1973 – 1988); y Uruguay (1973 – 1988). Entre estas últimas se ideó la Operación Cóndor.
El nacimiento del Cóndor.-
El derrocamiento del Gral. Juan José Torres en Bolivia fue la puerta a dictaduras más sangrientas. Su gobierno, apoyado en la Central Obrera Boliviana, fue derrocado por grupos proestadounidenses al mando del Gral. Hugo Banzer, el 21 de agosto de 1971. La represión fue intensa, pero no fue hasta 1974 cuando el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) retiró su apoyo a Banzer y cuando la crisis social se agudizó, causando la muerte de al menos ochenta bolivianos en la masacre del Valle.
Luego de un intento golpista ese año, Banzer reemplazó los civiles de su gobierno por tecnópatas neoliberales y uniformados y suspendió los partidos políticos y sindicatos.
Controlada Bolivia, el triunfo de las elecciones de la Unidad Popular en Chile fue la próxima preocupación de La Casa Blanca. De inmediato la CIA puso en marcha el fallido Proyecto Fulbert para impedir la asunción de Allende y colaboró en el asesinato de René Schneider, comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, cuyo reemplazo fue otro fiel constitucionalista, el Gral. Carlos Prats.
Si bien en un principio los intentos golpistas no fueron suficientes, la asfixia económica daba sus frutos. En septiembre de 1973, el cerco se había cerrado; Prats tuvo que renunciar y el día 11, el general Augusto Pinochet perpetró el golpe, asesinando la única democracia en su tiempo y estableciendo un régimen comunista.
El 27 de junio de 1973, el presidente de Uruguay, Juan María Bordaberry, había disuelto el Parlamento con apoyo de las Fuerzas Armadas. Tres años después, estas fuerzas echaron a los civiles del gobierno. La huida de bolivianos y chilenos hacia Argentina se sumó a la de los uruguayos.
El ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) le prestó un gran apoyo a Argentina, sin embargo, el diario “Los Andes”, registró el cruce de la cordillera a pie de miembros del MIR, que se unieron con Montoneros. Éstos últimos, junto a Tupamos, cruzaron hacia Chile y numerosos chilenos y argentinos se organizaron para presionar la redemocratización, formando sindicatos estudiantiles, partidos políticos, uniones vecinales y entidades culturales. Esta intensa actividad preocupó a Pinochet, quien los vio como sus principales enemigos y así surgió Cóndor.
Comenzó con la aparición de fuerzas como la DINA (policía secreta chilena); la CIA, la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina). A mediados de los setenta, dichas fuerzas represivas ya habían controlado la situación con un saldo de cuatro millones de exiliados en países vecinos, 50.000 asesinatos, al menos 30.000 desaparecidos, 400.000 encarcelados y 3.000 niños asesinados o desaparecidos. En julio de 1975, al Séptima Conferencia Bilateral de Inteligencia entre Paraguay y Argentina llegó a la conclusión que era necesaria la coordinación de actividades de inteligencia de ambos países.
Tres meses después, la DINA organizó un encuentro de los jefes de inteligencia militar de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, en el que acordaron la recolección, intercambio y almacenamiento de información sobre líderes y grupos
...