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Antecediendo El Primer Gran Desastre Mundial.


Enviado por   •  19 de Septiembre de 2014  •  1.311 Palabras (6 Páginas)  •  277 Visitas

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No se podría definir la causa puntual de la Primera gran Guerra Mundial sencillamente porque no la hubo. El conflicto se produce por la suma de distintos factores que afectaban a las grandes potencias europeas. Es verdad que el hecho que desencadenó la tragedia fue el asesinato del archiduque austriaco Francisco Fernando en Sarajevo pero no podríamos decir que la culpa fue de Serbia, atribuyéndole el homicidio, o de Austria por amenazar a dicho país. Más bien se podría afirmar que este hecho fue la gota que rebalsó el vaso de la paz armada europea, algo que hace tiempo amenazaba con explotar dado a la situación internacional que estaba cada vez más deteriorada.

En del presente ensayo podrás encontrar una gran serie de antecedentes y datos sobre las causas que fueron acercándonos a la primera gran tragedia del mundo la primer gran guerra mundial.

E

l imperialismo de los siglos XVI – XVIII fue un imperialismo basado en el mercantilismo es decir, en un sistema colonial que tenía como objetivo principal proveer de materias primas a las metrópolis generalmente administradas por compañías comerciales que las explotaban por iniciativa propia, según el material educativo para la enseñanza de la historia “hacia 1870 aparecen nuevas formas coloniales en Europa (Alemania, Bélgica e Italia) dos imperios coloniales extra europeos (Estados Unidos y Japón), un aumento en los territorios de Inglaterra y Francia, así como un mantenimiento por parte de Holanda y Portugal de sus territorios y una pérdida de España de sus colonias iberoamericanas y del pacifico” esto último causa su debilitamiento y pronta desaparición como uno de los grandes imperios mundiales.

Esta nueva forma de imperialismo mundial fue una clara consecuencia de la industrialización que al verse favorecidos los grandes bloques del comercio por la reducción de la mano de obra y una mayor producción de sus mercancías en un menor lapso de tiempo estos se ven atraídos por un ideal expansionista de sus fronteras tanto políticas como comerciales, donde invertir todo ese capital sobrante y seguir obteniendo las materias que se requerían para el sostén esas nuevas formas de producir era un aspecto primordial y sumamente importante para la consolidación del imperio como la máxima potencia mundial.

Las nuevas potencias como Alemania, Rusia, Gran Bretaña, Francia, Italia y Bélgica, buscaron el dominio de un mayor territorio del cual obtener todos esos recursos tanto humanos como de material primo que los llevaran al establecimiento de la superpotencia por lo que comienzan con un ideal expansionista que busca principalmente lugares donde invertir todo su capital sobrante, apoderarse de la materia prima, ampliar el mercado, cubrir las exigencias de las grandes colonias, aumentar el prestigio internacional del país colonizador, consolidar los sentimientos nacionalistas de gran potencia, así como tener un sentimiento de superioridad y un ideal de civilizar a los pueblos “inferiores”, una especie de renovación de los ideales evangelizadores de españoles durante los siglos XV y XVI. Sus formas de dominio “sometimiento a la soberanía de la potencia colonizadora, control político y territorial por parte de la metrópoli, así como su administración” fueron causa del descontento de grandes multitudes también el hecho de que “la potencia colonizadora obtenía ventajas comerciales de zonas que eran independientes y le cedían una cantidad de puertos en calidad de puertos francos” fue una de las formas en que las grandes potencias pudieran ir expandiendo sus dominios además de ser una forma por así llamarlo “protectora” que controlaba su política exterior y las riquezas de ese país mientras que las autoridades nativas tenían la encomienda de controlar a su política interior.

El mapa político de Europa estaba dominado por cinco grandes potencias: Austria-Hungría, Gran Bretaña, Francia, Alemania y Rusia, y una casi gran potencia: Italia. Entre estas naciones existía un inestable equilibrio de poder, y formaron alianzas para auto protegerse. Austria-Hungría, Alemania e Italia formaron la triple Alianza. Francia, Rusia y Gran Bretaña formaron

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