Castelli guerra y su juicio
MpromeroTrabajo20 de Agosto de 2018
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TRABAJO DE INVESTIGACIÓN
JUAN JOSE CASTELLI
EL JUICIO
PROFESORA: Martino, Laura
ALUMNAS: Pérez Romero, Marcela
marce_perezromero@hotmail.com
Torreiro, María Florencia
florencia.torreiro.89@gmail.com
COMISION: 1° “E”
HISTORIA 2015
Introducción………………………………………………………………………..3
Antecedentes……………………………………………………………………….4
Índice
Capítulo I: Se prende el fuego
- La Primera Junta……..…………………………………………………………..5
- Las fuerzas contrarrevolucionarias………………………………………………6
Capítulo II: La figura
- El Alto Perú……………………………………………………………………...7
- Campaña contra Castelli………………………………………………………..10
- El Desaguadero – Huaqui………………………………………………………10
Capítulo III: El principio del fin – El juicio
- El Juicio………………………………………………………………………...13
Conclusión…………………………………………………………………………18
Bibliografía………………………………………………………………………..20
Introducción
¿Qué sabemos de Juán José Castelli? ¿Fue vocal? Sí, es cierto y en todo su camino no es lo único que hizo. Ni en años de enseñanza inicial y media se hace hincapié de hombre tan ilustre.
¿Cuánto se sabe de su vida como padre, de sus amigos y compañeros con quienes se reunía en una jabonería? Juan José Castelli fue mucho más de lo que realmente se conoce.
Una mente brillante con ideas revolucionarias ¿Por qué revolucionarias, por un concepto de rebeldía o porque ellas eran revolucionarias para la época?
El virreinato se encontraba en un cambio pero con una monarquía de tantos años impregnada en el corazón de los habitantes ¿estaban preparados para un cambio radical?
Este es nuestro propósito, mostrar de Juán José Castelli alguien más que un vocal, intentaremos mostrar al hombre militar, político, que soñaba con una futura independencia ¿Será este el motivo de su acusación y juicio? ¿Será por sus ideas jacobinas en un virreinato centralista?
En estas páginas esperamos que de una forma clara con cohesión y coherencia, ver al Castelli que no se conoce ni difunde.
Juán José Castelli nace en Buenos Aires el 19 de julio de 1764, hijo de María Josefa Villarino y de Ángel Castelli Salomón. Cursó sus primeros estudios en la escuela perteneciente al convento de los Jesuitas, a los 13 años ingresa al Real Colegio de San Carlos y toma sus estudios universitarios en la real Universidad de Córdoba del Tucumán para que estudiase teología y filosofía abandonándolos finalmente para ingresar a la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca en el Alto Perú volviendo a Buenos aires en 1778 graduado en leyes. En 1791 actuó como abogado en la Jurisdicción de la Real Audiencia de Buenos Aires, fue Cónsul en 1794 y en el período de 1810 Representante de la junta de Gobierno y Jefe político del ejército revolucionario hasta su destitución, juicio y fallecimiento en la cárcel.
Antecedentes
Buenos Aires era una ciudad portuaria en crecimiento demográfico, económico y en plena trasformación social y política. La familia ocupaba un papel central debido a que a través de ella se estructuraban las relaciones sociales y en un orden jerarquizado basado en la desigualdad era de vital importancia; no todas tenían los mismos derechos y privilegios propios de la “gente decente”, debían garantizar un linaje limpio que abría las puertas a organismos civiles, militares o eclesiásticos.
El rey, era considerado como un padre que debía guiar y cuidar a sus súbditos e intentar romper ese vínculo era un sueño inviable para la época.
A principios del siglo XIX, el sector criollo comenzaba a poner en duda los beneficios que podría ofrecer la corona. Al correr de los años la metrópoli entra en una profunda crisis por lo que esas dudas se convirtieron en certezas y Castelli junto a otros intelectuales se propusieron buscar nuevos horizontes para los americanos[1].
Para no extendernos demasiado y salir de foco de nuestro propósito mencionaremos de forma somera los acontecimientos que atravesaba la monarquía para comprender la decisión tomada por nuestros hombres: Francia en guerra con Inglaterra atrae a España a la misma (Batalla de Trafalgar). Francia en la figura de Napoleón decide tomar Portugal. Para ello ataca España lo que le llevó relevar a la monarquía española en Bayona. Este hecho político fue el punto central para que nuestros patriotas decidan formar “La Junta” y elegir el modo de gobernar el Virreinato del Rio de la Plata hasta que se pusiese fin al cautiverio de Fernando VII.
Capítulo I: Se prende el fuego
La Primera Junta
Las abdicaciones de Bayona habían dejado acéfala a la monarquía española por lo que era necesario poner en orden los dominios europeos y americanos. Dentro de las alternativas comenzó a ganar popularidad la creación de una Junta como estaba sucediendo en España.
Para dicho propósito, Martin de Álzaga alcalde de primer voto en el Cabildo propuso desplazar al Virrey Liniers y establecer la junta, pero este junto con la ayuda de la Audiencia y de Cornelio Saavedra pudo conservar su puesto. No obstante la Junta Central para evitar que se repitiese este suceso decide que las Indias ya no serían colonias sino parte esencial e integrante de la monarquía. Pero el virreinato del Rio de la Plata tampoco era el único en expresar su descontento, el Alto Perú reacciona por lo que el nuevo Virrey Cisneros solicita ayuda a José Fernando de Abascal Virrey del Alto Perú para aplacar a los sublevados quienes fueron contenidos por el enviado José Manuel de Goyeneche.
Mientras que en el viejo mundo se autodisolvía la Junta Suprema y se creaba el Consejo de Regencia para gobernar a la corona en nombre de Fernando VII, en el otro lado del océano se envía comisiones para convocar un Cabildo abierto en el cual el 22 de mayo Castelli se convirtió en el “orador de la revolución”, iniciada la sesión, sostuvo que debido a la abdicación había caducado el gobierno soberano de España y que ante la vacancia real Buenos Aires debía elegir un nuevo gobierno para no caer en las manos de Francia[2]. Por lo que el día 24 se constituyó la junta. Comenzó a circular una representación en la que vecinos, comandantes y oficiales pedían a nombre de pueblo que se estableciera una nueva junta señalando quienes la integrarían y la formación de una expedición auxiliadora. El 25 de mayo se creó la Junta Provisional Gubernativa de las Provincias Unidas, la presidia Cornelio Saavedra y seis vocales: Manuel Belgrano, Juán José Castelli, Juán Larrea, Domingo Matheu y Manuel Alberti jurando respetar las leyes del reino y conservar integra para el soberano Fernando VII y sus sucesores[3].
Las fuerzas contrarrevolucionaria
Castelli, redacta un documento que resumía lo sucedió en España justificando la creación de la junta y convocar a los pueblos para que eligieran diputados para integrarlos al gobierno y así dar mayor representatividad y volumen político a la vez que se enviaba una expedición auxiliadora a los pueblos del interior previniendo de que esta fuera necesaria para garantizar su apoyo, la dirección militar recayó en manos del Coronel Francisco Ortiz de Ocampo y a Antonio González Balcarce. Todo este acontecimiento lógicamente fue desconocido para el Consejo de Regencia como esta para la Junta Gubernativa por lo que Buenos Aires fue declarada insurgente ante la metrópoli.
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