Desarrollo De Roma

Desarrollo de Roma

A lo largo de la Historia las civilizaciones del mundo han tenido una característica en común, todas tienes sus mitos y leyendas, algunas de ellas describieron el origen de su cultura, cuidad, organización entre otras cosas y como todos sabemos Roma fue la excepción. Aunque tal vez algunos duden de la veracidad de la leyenda, se les atribuye a los gemelos Rómulo y Remo, que gracias a los cuidados e instintos maternales de una loba sobrevivieron a la muerte y que al llegar a ser unos jóvenes fuertes con la ayuda de otros se fundó lo que un día llego a ser el imperio Romano.

Tras su fundación como una pequeña aldea, la configuración de la ciudad fue ampliándose poco a poco pasando por distinta etapas. La primera fue la Roma cuadrada que comprendía un surco trazado por Rómulo sobre el monte Palatino, con torres y muros a modo de protección. Al norte estaba el monte Velio que lo unía con el Esquilino, y por donde se fue extendiendo la población que ocupó posteriormente los siete montes.

La segunda etapa fue, la Roma de los siete montes o las siete colinas que fueron acogiendo población de los alrededores que fueron haciendo de Roma una gran ciudad.

Los primeros pobladores se asentaron alrededor del río Tíber, formando diferentes grupos étnicos, llamados los Ramnes o Romanenses, Luceres y Laciences. Roma no surgió repentinamente sino que fue creciendo poco a poco a medida que aumentaba la población y los asentamientos de los diferentes grupos crecían.

La Monarquía

Desde el momento en que los habitantes de estas siete colinas se organizaron en una comunidad, necesitaban un dirigente y como fundador el primer rey fue Rómulo a quien le correspondió sentar las bases para la organización de la nueva nación y estado emergente, “La Gran Roma”.

Como padre de la gran familia de ciudadanos, el rey reunía en su persona todos los poderes, carácter vitalicio, el rey era para Roma lo que Júpiter para el mundo. El rey era como el dueño de la ciudad, el primero de los ciudadanos y el primero de los soldados. El rey era el comandante de todos los ejércitos, la mayor autoridad eclesiástica, era el máximo pontífice.

Sin embargo, a pesar de ser una monarquía, el pueblo participaba en las decisiones importantes de su nación a través de las curias y cada vez que moría un rey elegían aquel con virtudes como la sabiduría y el valor. Rómulo gobernó enérgicamente y llevando a práctica la democracia.

El único rey que se impuso fue Rómulo por ser el fundador de Roma, sus sucesores fueron elegidos por el pueblo. Los reyes fueron: Numa Pompilio, Tulio Hostilio, Anco Marcio, Tarquino Prisco “El antiguo”, Servio Tulio y el último rey que vieron los romanos fue a Tarquino el soberbio que se caracterizó por un gobierno arbitrario. Pero como era de esperarse el resto del pueblo se encontraba inconforme con el gobierno, por lo que expulsan de Roma a Lucio Tarquino.

Con su expansión, Roma tuvo que añadir a su estado a la población de las ciudades conquistadas y es de este modo que se dan los grupos sociales. La conformación de la sociedad de Roma la integraban los: patricios, sabinos, la familia y los esclavos.

La República

Con la expulsión De Tarquino se sustituyó el régimen monárquico por uno nuevo de carácter colegiado, es decir, La República Romana donde se puso fin a los mandatos unipersonales del monarca dando lugar al gobierno de dos cónsules, jefes anuales del Estado y del Ejercito con el propósito de que ninguno de los dos instaurara nuevamente la monarquía, como representantes del conjunto de los ciudadanos. A partir de entonces la aristocracia patricia pasó a dominar la política, la religión y el derecho, debido a que sólo sus miembros podían acceder a las más altas magistraturas, al Senado y a los cargos sacerdotales.

Fuera de los compromisos comunes con la liga latina, Roma puso en práctica una política expansionista de forma independiente en la que en la mayor parte de las batallas tuvo éxito.

Sin embargo, a pesar de su victoria, Roma casi vio el final de su ciudad y de su poderío, ya que una banda de galos, se aproximó a Roma en donde los ejércitos romanos que les salieron a paso, fueron derrotados. Roma, salvo la fortaleza del Capitolio, quedo arrasada en buena medida a instancia de los invasores. Finalmente los galos se retiraron a cambio del pago de un fuerte rescate. Pero al abandonar Roma fueron sorprendidos Marco Furio Camilo quien logró reunir las fuerzas suficientes como para imponer el poderío de Roma sobre cualquier amenaza.

Tras estos episodios Roma siguió emprendiendo guerras con pueblos cercanos incluso hasta en territorio de la Grecia meridional. Durante esta larga serie de guerras, Roma había evolucionado. Las concesiones arrancadas por los plebeyos a los patricios habían abierto una brecha en la antigua constitución y el antiguo orden social. Poco a poco, los plebeyos habían ido adquiriendo más o menos los mismos derechos que los patricios. Los casamientos entre clases habían sido finalmente autorizados, tras un largo periodo de prohibición. Los plebeyos no sólo podían se tribunos o ediles (magistratura dependiente de los tribunos, que usaban como auxiliares para tratar los pormenores de la administración), si no que fueron aceptados en la pretura (encargadas principalmente de gobernar provincias) y, unos años más tarde, en el consulado.

En efecto, la vieja magistratura que había sustituido a la realeza se había ido dividiendo y en cierto sentido negociando a medida que crecía el Imperio de Roma, las guerras se hacían lejanas y más largas, y se necesitaban más magistrados para administrar los asuntos. Un cónsul que pasaba largos meses en el ejército ya no podía impartir justicia a diario en el Foro. Por eso se había creado la función de los pretores, que los relevaban de estas funciones. Junto con los cónsules, también se habían dispuesto cuestores, jóvenes magistrados a cargo de las finanzas, de esta forma los cónsules quedaban más libres para encargarse de los asuntos realmente importantes.

Sin embargo, quién sabría que a medida de que más personas participaban y más instituciones se creaban, traerían el fin de la República.

A fines de la República la situación de Roma en lo social y político era muy compleja. Las diferencias sociales seguían ahondándose. Frente a la gran masa de proletarios pobres se encuentra una clase de ricos comerciantes e industriales (el orden ecuestre o de los caballeros) y otra que acapara el poder político para sí (la clase senatorial). El fenómeno de la esclavitud se da en gran escala como consecuencia de las guerras

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